"Será importante tener en cuenta el desarrollo de las tensiones en Medio Oriente, entre Irán e Israel, dada la aversión al riesgo de los inversores en este aspecto", dijo el agente de compensación y liquidación Puente.
La semana pasada el ente de estadísticas de Argentina -INDEC- dio a conocer un dato inflacionario de marzo con tendencia descendente y el Banco Central (BCRA) bajó su tasa de referencia ante señales concretas en la desaceleración de la tasa de precios minoristas.
ADRs
En ese contexto, los papeles argentinos que cotizan en Wall Street operan con caídas de hasta el 4,8%, encabezadas por Central Puerto, seguido de Edenor (-4,1%) y el Grupo Financiero Galicia (-4,1%). En tanto, el único título que sube es el IRSA ( 1,2%).
Bonos y riesgo país
En el segmento de renta fija, los bonos en dólares bajan hasta 6,6%, liderados por el Global 2046, seguido del Global 29 (-5,5%) y el Bonar 2041 (-3,7%). En ese contexto, el riesgo país medido por el J.P. Morgan avanza 0,8% a 1.342 puntos básicos.
La consultora Quantum, fundada por el ex secretario de Finanzas, Daniel Marx, se preguntó si los papeles argentinos, en particular los globales a 10 años, siguen teniendo “recorrido”.
Y la respuesta, pese a la fuerte caída de los rendimientos, en especial en el tramo corto de la curva, fue que sí. En comparación con otros bonos emergentes, dice un análisis, “siguen estando en el grupo de los de mayor spread”.
Con un rendimiento total del 16,9% (incluyendo spread y la tasa “libre de riesgo” de bonos de EEUU a igual horizonte, los globales argentinos a 10 años rinden menos que 29,8% de sus pares de Ucrania (un país asediado por la guerra), el 27,5% de los bonos bolivianos, el 19,5% de los de Ecuador y el 18,1% de los de Zambia, pero esa rentabilidad sigue siendo superior o cercana al triple que la de bonos de otros mercados emergentes como Uruguay, Chile, Filipinas, Perú y México, y dan dos veces y media lo que rinden papeles similares de Paraguay, Colombia y Brasil(ver abajo).
La hipótesis de que el rally de los últimos meses de los bonos argentino se debe a la demanda local es “bastante razonable”, dice el análisis, si se tiene en cuenta que ante la falta de opciones rentables para la colocación de pesos y las restricciones aún vigentes por el cepo cambiario (y otras relacionadas con regulaciones de carteras institucionales), “los inversores argentinos optan por este tipo de papeles en busca de rendimientos”.