Inflación y empleo en la agenda de la próxima semana
El escaso calendario macroeconómico confirmó los desequilibrios. En EE.UU. se publicaron los pedidos de bienes duraderos, que subieron un 1.4% intermensual en febrero, mejor de lo previsto. Por el contrario, las ventas minoristas alemanas del mismo mes cayeron un 1.9% intermensual y un 2.7% interanual, mucho peor de lo previsto. Por último, el viernes se publicó en Estados Unidos el índice de precios del gasto en consumo personal (PCE). La Oficina de Análisis Económico (BEA) informó de que el índice de precios PCE subyacente, que excluye los volátiles precios de los alimentos y la energía, subió un 2.8% anual, coincidiendo con la estimación de los analistas, mientras que la cifra mensual se situó en el 0.3%, tal y como se había anticipado. Sin embargo, las cifras de enero sufrieron revisiones al alza hasta el 2.9% y el 0.5%, respectivamente. El Dólar cedió algo de terreno con la noticia, a pesar de que el presidente de la Fed, Jerome Powell, ya descartó el repunte de las presiones sobre los precios a principios de año.
Abril comenzará con un calendario muy apretado. El lunes, Estados Unidos publicará el PMI manufacturero del ISM de marzo y, el viernes, varias cifras relacionadas con el empleo antes del informe de nóminas no agrícolas (NFP). En medio, el país también dará a conocer el PMI de servicios del ISM del mismo mes.
Al otro lado del Atlántico, Alemania y la Eurozona darán a conocer las estimaciones preliminares del Índice Armonizado de Precios de Consumo (IPCA) de marzo. La UE también publicará el índice de precios a la producción (IPP) de febrero y los datos de ventas al por menor del mismo mes.
La inflación y el empleo son fundamentales para las decisiones de los bancos centrales. Las últimas cifras del IPC subyacente dan margen a la Fed para mantener los tipos en los niveles actuales. En la próxima semana, los datos relacionados con el empleo en EE.UU. serán clave, ya que si no hay signos de relajación del mercado laboral, un recorte de tipos en EE.UU. podría retrasarse más allá de junio. O incluso si se mantiene la posibilidad de un recorte de tipos en junio, los responsables políticos podrían optar por sólo dos recortes este año en lugar de los tres previstos en el último gráfico de puntos.
Perspectiva técnica del EUR/USD
El par EUR/USD parece cómodo por debajo de 1.0803, el 61.8% de retroceso de Fibonacci de la subida de 1.0694-1.0981. El gráfico semanal muestra que el par se encontró con vendedores en torno al 38.2% de retroceso del mismo repunte en 1.0871, mientras que la media móvil simple (SMA) de 20 semanas converge con ese nivel, reforzando la zona de resistencia. Al mismo tiempo, la SMA 200 permanece sin dirección muy por encima del nivel actual, mientras que la SMA 100 se dirige ligeramente a la baja en torno a 1.0600. La falta de fuerza entre las medias móviles refleja la ausencia de una tendencia dominante. Por último, los indicadores técnicos apuntan hacia abajo por debajo de sus líneas medias, favoreciendo un deslizamiento hacia la base del rango en la zona de precios de 1.0690.
Las lecturas técnicas en el gráfico diario sesgan el riesgo a la baja. Los indicadores técnicos se adentran en territorio negativo, aunque pierden fuerza bajista ante la ausencia de volumen en el Viernes Santo. Mientras tanto, el EUR/USD se mantiene muy por debajo de todas sus medias móviles. La SMA de 200 días sin dirección se cierne en torno al 50% de retroceso del movimiento antes mencionado, proporcionando una fuerte resistencia en torno a 1.0840.
El EUR/USD necesita superar 1.0870 para deshacerse de la postura negativa, con margen entonces para extender su avance hacia la zona de precios de 1.0940 de camino al nivel de 1.1000. Sin embargo, los argumentos alcistas no están claros.
El soporte por debajo del mínimo mensual está en 1.0694. Una vez por debajo de ese nivel, parece probable un deslizamiento hacia 1.0600.