Por Federico González del Solar - Las organizaciones
piqueteras de izquierda y del kirchnerismo protagonizarán hoy una jornada de
protesta que tiene como objetivo generar 500 cortes de calles y avenidas en
todo el país.
Los grupos intentarán esquivar la intervención de la
ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, evitando interrumpir los lugares
donde puedan actuar las fuerzas federales.
La copiosa lluvia de la semana pasada postergó los planes de
las organizaciones sociales, que hoy, unidas en el frente de protesta que
presentaron hace casi un mes, volverán a las calles para revitalizar su reclamo
por alimentos para los comedores comunitarios. Anunciaron más de “500 cortes” a
nivel nacional que se realizarán desde las 10 de la mañana. Ninguno de ellos
dentro de la ciudad de Buenos Aires.
Al habitual paquete de reclamos, las organizaciones
kirchneristas, las de izquierda y un tercer grupo con otras referencias
políticas suman ahora su rechazo al reemplazo del plan Potenciar Trabajo, el
mayor programa de asistencia, que fue renombrado y dividido en dos segmentos,
uno a cargo de la Secretaría de Trabajo, que conduce Julio Cordero, y el otro
en Niñez, Adolescencia y Familia, que encabeza Pablo de la Torre. Ambas están
bajo la órbita de la ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello. El objetivo
fue eliminar intermediarios.
“Hace meses se viene sufriendo el desabastecimiento de
alimentos, por orden de Sandra Pettovello, en los miles de comedores
comunitarios de los barrios populares de todo el país, donde las trabajadoras
sociocomunitarias hacen malabares que ya no alcanzan para poder sostener las
ollas que alimentan a millones de familias que la están pasando muy mal”, dice
el comunicado con el que los distintos movimientos sociales retomaron la senda
de la protesta.
“Llevaremos adelante una jornada nacional, junto a otras
organizaciones sociales y sindicales, con cabecera en el Puente Pueyrredón y
más de 500 cortes y movilizaciones en todo el país, profundizando nuestro plan
de lucha frente a la falta absoluta de respuesta del Gobierno ante la
emergencia alimentaria y el ajuste a la economía popular”, añaden. “Intentamos
todos los canales posibles para poder dar solución a estos temas urgentes y ya
no hay margen, el hambre en nuestros barrios es un límite”, concluyeron.
Las organizaciones apuntan a evitar la intervención de la
ministra Patricia Bullrich y su protocolo antipiquetes poblando las
inmediaciones de algunos accesos a la Capital Federal, pero dejando liberados
los cruces, donde la titular de Seguridad tiene margen de acción.
La movilización estaba prevista para el martes pasado, pero
la medida fue levantada por la lluvia y las inundaciones. El anuncio de la
postergación también fue con críticas al Gobierno.
“Las razones de la suspensión son que las barriadas
populares se encuentran anegadas luego de las copiosas lluvias, yfund amen
organismo talmente después de que hace meses se han abandonado las obras
públicas, además de que con la modificación del programa Potenciar Trabajo ya
no se realizan las tareas de limpieza, saneamiento y desagote de las zanjas y
cordón cuneta en los barrios como se venían llevando adelante”, explicaron.
El Frente Popular Darío Santillán; la Fenat; el Polo Obrero;
la Unión de los Trabajadores de la Economía Popular (UTEP); el Movimiento
Argentina Rebelde (MAR) son algunas de las agrupaciones que marchará.
Polémica
Además de la cabecera en el Puente Pueyrredón, las
organizaciones prometen movilizarse al Puente Saavedra y a dos intersecciones
sobre la avenida General Paz en el barrio de Liniers: la ruta 3 y la avenida
Mosconi.
Silvia Saravia, dirigente de Libres del Sur, uno de los
movimientos que formarán parte de la movilización, activó una campaña de
“visibilización” virtual de la labor en los comedores comunitarios y salió a
desmentir esta semana a Javier Milei, quien había denunciado que muchos de los
comedores comunitarios no existen. “No solo eso, hay algunos comedores que vos
vas y te dicen que atienden a 500 personas y nunca atienden más de 50”, dijo el
Presidente.
“Miles de comedores y merenderos populares existen y no
reciben alimentos”, contestó Saravia, quien dijo que muchos de esos comedores y
merenderos “no recibieron ninguna visita de esa dudosa auditoría” que mencionó
Milei. ÁMBITO |