En medio de una baja del dólar en
sus distintas cotizaciones, el Banco Central (BCRA) concretó
ayer la mayor compra de divisas del mes, por US$ 255 millones, y las reservas
avanzaron a US$ 26.602 millones. En tanto, el dólar blue cedió
$30, a $1.085 para la compra y a $1.115 para la venta, menos demandado.
Con esta operación en el segmento mayorista, el BCRA ya
compró más de US$ 7.000 millones desde que Javier Milei asumió la Presidencia
el 10 de diciembre último.
Los dólares financieros se desplomaron y
tocaron mínimos de un mes, con el Contado Con Liquidación (CCL) por debajo de
los $1.200.
En ese contexto, el dólar MEP cae $51,57 (-4,4%) hasta los
$1.121,79, tras finalizar la semana previa con una baja de $64,07 (-5,2%), la
mayor en dos meses. Así la brecha de este tipo de cambio con el oficial se
ubica en el 35,5%.
Por su parte, el dólar CCL baja $51,57 (-4,4%) hasta los
$1.175,97. De esa manera, la brecha con el tipo de cambio oficial se posiciona
en el 41%.
En el mercado, los operadores coinciden en que
apareció cierto optimismo por el cual suben los bonos y el Merval en dólares, y
bajan los tipos de cambio paralelos.
Para Salvador Di Stéfano,
los instrumentos financieros en pesos podrían mostrar un
rendimiento muy superior a los nominados en dólares.
"El cambio de política monetaria y cambiaria obliga a
manejar los ahorros y el financiamiento en forma diametralmente opuesta a la
época del plan platita. Hay que ahorrar en pesos y endeudarse en dólares",
sostuvo uno de los gurúes más escuchados de la city porteña.
"Estructuralmente, el clima puede estar siendo
favorecido por la proyección de oferta de dólares de la cosecha gruesa",
dijo el economista Guido Lorenzo. Aunque aclaró que
"después, es puro sentimiento del mercado".
"En el mercado parece que está ganando terreno la idea
de que el Gobierno puede enderezar el rumbo económico. Es decir, predomina el
sentimiento de que el programa del Gobierno va a dar resultados positivos. En
el corto plazo, una inflación menor a la esperada, el superávit fiscal primario
y financiero de enero que adelantó el ministro (de Economía) Luis Caputo, y la idea de un cogobierno con el PRO
podrían influir en este sentido", señaló Lorenzo.
Los bonos soberanos argentinos operaron con firmeza este
miércoles por reacomodamientos de carteras a la espera del dato inflacionario
de enero, luego de reanudar la actividad por los feriados de carnaval.
Analistas estimaban un alza de precios minoristas del 21,9%
para el primer mes del año (fue del 20,6%, según el INDEC), en tanto un
reciente sondeo del BCRA prevé un salto del 227% para 2024, desde el 213%
estimado previamente.
"Los activos en pesos podrían resistir más por la mayor
chance de cumplir con los compromisos y el aún elevado proceso de inflación con
chances de recrudecer por algún ajuste cambiario ulterior", dijo VatNet Financial Research. "Sería casi indispensable
un gran apoyo financiero internacional, pero es difícil que se produzca sin
señales de solidez política", afirmó.
El traspié en el Congreso del presidente Milei en el
tratamiento de la ambiciosa ley denominada "ómnibus", que daba
poderes amplios y permitía privatizaciones de empresas estatales entre otros
puntos, crea algunas dudas sobre los próximos pasos del oficialismo para
continuar con su plan de estabilización económica.
El riesgo país del banco JP Morgan caía 88 unidades, a 1.949
puntos básicos.
Caputo sostuvo recientemente que "el paquete económico
está hecho para estabilizar la economía y para que la gente no sufra más
problemas de inflación y devaluación y no depende en nada de la ley
(ómnibus)".
El dólar oficial se mantenía con una leve suba controlada
por el BCRA del 2% mensual, lo que crea dudas entre los inversores sobre su
continuidad, ya que la alta inflación provoca un rápido atraso cambiario.
"El juego de los pesos" se sostiene en una
economía acorralada y con fuertes restricciones cruzadas", señaló la
consultora EcoGo.
En este escenario, el dólar mayorista cotiza a $834,10 por
unidad, es decir, $2,80 arriba del cierre del viernes. ÁMBITO
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