Por Christian A. Buteler - Este año, a diferencia del
2023, sobrarán los dólares. Varios factores confluyen para que en el 2024
Argentina posea un excedente en la balanza comercial, lo que provocará
un ingreso neto de dólares al país.
En primero lugar las proyecciones indican un notable aumento
de las exportaciones impulsado por condiciones climáticas más
favorables que supera la sequía que afectó la campaña pasada. El calor
extremo que sufrimos en los últimos días fue mitigado por las lluvias y si bien
podrá existir algún daño, el 90% de los suelos sembrados se encuentran en buen
estado.
Por otra parte, el gasoducto Néstor
Kirchner desempeñará un papel crucial al reducir la necesidad de adquirir
energía durante el invierno, disminuyendo así una de las principales fuentes de
salidas de dólares.
Por último, se estima que la economía en el 2024 sufrirá una
caída del 3% del Producto bruto interno (PIB), lo que implica menos
importaciones y contribuye al excedente en la balanza comercial.
Según el Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM), que
elabora el Banco Central de la República Argentina (BCRA) con los pronósticos
de consultoras, centros de investigación y entidades financieras, se
proyecta para el corriente año exportaciones por u$s 82.875 millones e
importaciones de u$s 66.912 millones, dejando un superávit comercial de u$s
15.963 millones.
Este año dólares no faltarán y el BCRA podrá recomponer
reservas, la pregunta es qué haremos con los pesos que se emitan para dichas
compras.
Tasas de interés por
plazo fijo pierde con la inflación
El Directorio del BCRA mantiene sin cambios la tasa de interés mínima garantizada de los depósitos a plazo fijo,
lo que implica un rendimiento del 9% mensual mientras la inflación se
estima en torno al 20% por mes.
Desde el año pasado que los plazos fijos privados vienen
cayendo en términos reales, primero producto de una dolarización de
cartera frente a un contexto de incertidumbre y ahora por la fuerte tasa
real negativa. En enero, a precios constantes cayeron 17.8% ubicándose un 57.6%
por debajo de igual mes del año anterior.
Gran parte de esta caída vino de la mano de las personas
jurídicas, siendo la mayor concentración los fondos de Money Market.
Mientras que las colocaciones en UVA crecieron un 53% en
términos reales alcanzando los $818.637 millones a finales de enero, lo que
equivale al 5.5% del total de los depósitos a plazo. Recordemos que su
plazo mínimo de colocación fue elevado a 180 días y el monto máximo
determinado en $5 millones, pero sigue siendo el único instrumento de renta
fija en pesos con tasa real positiva.
Algo similar sucede con los bonos en moneda local que
cotizan todos, ya sean los ajustados por CER como los que lo hacen por dólar
oficial, con rendimientos negativos.
De tal manera, la ola de pesos que se avecina no posee
instrumentos de renta fija positivos donde colocarse, salvo los plazos fijos
UVA pero inmovilizando el dinero a un mediano plazo.
El problema del
crawling peg
Por lo tanto, para el momento en que empiecen a llegar esos
pesos será necesario que las tasas de inflación y de política monetaria
confluyan a niveles similares, esto es que para marzo/abril la inflación se
encuentre como máximo en 1 dígito.
En el medio el crawling peg está atrasando fuertemente
el dólar oficial, luego de una inflación de 25.5% en diciembre y posibles 20%
para enero y 15% para febrero llegaremos a marzo con un tipo de cambio de $490
a valores de diciembre, muy lejos de ese $800. Un nuevo salto del dólar oficial
implicaría un nuevo fogonazo inflacionario.
Por ello, más allá de la calma que se vive en estos momentos
con los dólares financieros, la tendencia principal sigue siendo alcista y si
ese es el caso siempre es mejor posicionarse en activos
dolarizados mientras las cotizaciones se encuentren deprimidas. Para los
ahorristas tradicionales o conservadores podrá ser directamente en la moneda
dura, hoy el precio más económico está en el BLUE, y para aquellos que además
busquen obtener un retorno por esos dólares tienen desde bonos hard dólar, obligaciones
negociables y cedears. ÁMBITO |