El principal banco
de inversión de Estados Unidos evaluó en forma positiva la renovación del acuerdo con el Fondo Monetario
Internacional (FMI) que
alcanzó ayer el Gobierno argentino, y que destrabará desembolsos por unos USD
4.700 millones claves para hacer frente a vencimientos con el propio organismo
y recomponer reservas por pagos hechos en el pasado. Para los analistas
de JP Morgan, el entendimiento promete estabilizar la brecha
cambiaria en el corto plazo pero, dado el nivel de inflación que enfrenta
el país, no evitará que sea necesaria una nueva “recalibración” del dólar
oficial en la segunda mitad del año.
El entendimiento,
que una vez aprobado por el Directorio del Fondo activará un muy necesario
desembolso, permitirá al Tesoro cancelar los pagos de capital de enero y abril,
así como reembolsar el préstamo puente concedido por la CAF para hacer frente
al vencimiento de diciembre pasado, consideró el reporte distribuido entre
clientes de la entidad financiera norteamericana.
“Si nuestro perfil
de inflación previsto se cumple, sería necesaria una nueva recalibración del
tipo de cambio oficial para garantizar la capacidad de acumular reservas en el
segundo semestre de 2024″
En cuanto a los
objetivos renovados del programa, el informe de JP Morgan señaló como las más
relevantes a las metas fiscales, un superávit primario del 2% coherente
con el equilibrio financiero, y de acumulación de reservas. En cuanto al
segundo la acumlación de reservas netas de divisas, el informe resalta que
implica un objetivo moderado. “El objetivo anual es sólo de 7.300 millones de
dólares, una acumulación de reservas más moderada de lo que habíamos previsto”,
dijeron los analistas señalando que la metas de USD 10.000 millones incluye los
USD 2.700 millones ya sumados durante diciembre.
También elogió los
esfuerzos por eliminar trabas en el mercado cambiario. “Se observa que las
autoridades están firmemente comprometidas a seguir eliminando las prácticas de
divisas múltiples y las restricciones cambiarias a corto plazo, al tiempo que
intentan suprimir las medidas de gestión de los flujos de capital a medida que
se abordan los desequilibrios y las condiciones lo permiten”, aunque señala que
“hubiéramos preferido un compromiso más firme para reunificar el mercado de
divisas y deshacerse de los controles de capital en el segundo semestre de
204, como una señal más clara para el mercado”.
Por último, en
cuanto a la política monetaria, JP Morgan destacó que la orientación de la
política monetaria “evolucionará para apoyar la demanda de dinero y la
desinflación, mientras que el marco y las operaciones de la política monetaria
se ajustarán para reforzar su papel de anclaje”.
“Se observa que las
autoridades están firmemente comprometidas a seguir eliminando las prácticas de
divisas múltiples y las restricciones cambiarias a corto plazo”
En ese marco,
entonces, para el banco de Wall Street “la rápida negociación podría ayudar a
estabilizar la brecha cambiaria paralela-oficial, que se ha ido ampliando
agresivamente desde principios de año”.
Pero también
adelanta lo que se viene en materia de dólar: “Aunque aún no se han
desvelado los detalles del programa macroeconómico, observamos que nuestras
estimaciones actuales de inflación para el primer semestre de 24 sugieren una
rápida apreciación del tipo de cambio real, con una inflación acumulada que
borraría la devaluación de la moneda oficial a principios del segundo
trimestre. Si nuestro perfil de inflación previsto se cumple, sería necesaria
una nueva recalibración del tipo de cambio oficial para garantizar la capacidad
de acumular reservas en el segundo semestre de 2024 y, por tanto, eliminar
gradualmente los controles de capital este año. AMBITO
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