Por Sofía Diamante
- Antes de que abrieran los mercados, y ante la ausencia de anuncios
económicos, el Banco Central (BCRA) decretó ayer que se necesitaría
autorización previa del directorio de la entidad para comprar dólares al tipo
de cambio oficial. Esto generó incertidumbre entre los bancos que debían vender
dólares a sus clientes que tienen consumos con tarjeta en moneda extranjera, y
derivó en una dispersión total de la cotización del tipo de cambio minorista.
El Banco Central
impuso ayer un virtual “feriado cambiario” que alcanzó a los importadores y a
los ahorristas que todavía podían comprar divisas al tipo de cambio oficial. Si
bien no se especificó el plazo de duración de la nueva medida, se indicó que era
para “dar tiempo a la gestión del Poder Ejecutivo de cumplir con los trámites
administrativos para la conformación de las nuevas autoridades”.
La situación generó
confusión entre los clientes bancarios que tenían vencimientos de tarjeta con
consumos en dólares. Durante la mañana de ayer, las entidades no sabían si iban
a poder acceder a la compra de divisas para abastecer a sus clientes. Los bancos
tampoco podían correr los vencimientos de las tarjetas porque para ello se
necesita, debido la ley de tarjetas, un decreto de necesidad urgencia (DNU).
Por lo tanto,
varios bancos empezaron a cobrar más caros los dólares para cubrirse de una
posible devaluación. Por caso, los bancos Galicia, Santander y Macro
finalizaron el día vendiendo dólares a $500, mientras que Banco Nación y
Credicoop no se movieron de $400, el mismo cierre del jueves pasado, último día
hábil. Si se le suman el impuesto PAIS y las percepciones a cuenta de Ganancias
y de Bienes Personales, el dólar tarjeta ya alcanza los $1120, dependiendo de
la entidad bancaria.
“Los bancos tienen
que vender dólares propios para cancelar la tarjeta y no se pudieron dar vuelta
y comprárselos al BCRA, por lo tanto, se anticiparon a lo que puede ocurrir en
los próximos días”, explicaron fuentes del mercado.
Por la tarde, el
Banco Central autorizó la venta de dólares a los bancos para consumos con
tarjetas, luego del pedido de las cámaras del sector, aunque la dispersión en
el tipo de cambio minorista ya estaba en marcha.
“El Banco Central
de la República Argentina decidió hoy [por ayer] aplicar la regla de
conformidad previa a todas las operaciones de demanda que se cursan a través
del mercado de cambio. La medida fue dispuesta en función de dar tiempo a la
gestión del Poder Ejecutivo de cumplir con los trámites administrativos para la
conformación de las nuevas autoridades y anunciar e implementar las políticas
que llevarán adelante. Durante la transición, las operaciones de cambio serán
analizadas y cursadas en función de las prioridades”, decía el comunicado de la
entidad.
El mercado de
dólares financieros no estuvo alcanzado por la medida, por lo cual las
operaciones de MEP y contado con liquidación (CCL) funcionaron con normalidad
(ver pág. 11).
Los exportadores
pudieron vender divisas sin restricciones también, aunque no se esperaba que
hubiera demasiadas operaciones, dado que ayer finalizó el programa que permitía
que se liquidara 50% al oficial ($370) y el resto al CCL ($990), lo que daba un
tipo de cambio de $680. Actualmente, si los exportadores quieren liquidar,
tendrán a cambio un dólar de $370.
De hecho, al cierre
del mercado se informó que solo hubo operaciones por un total de casi US$25
millones. “Virtual feriado cambiario minimizó las transacciones de hoy, que
estuvieron por debajo de las jorpor nadas coincidentes con feriados en Estados
Unidos”, dijo el operador de cambio en PR, Gustavo Quintana.
El aún presidente
del Banco Central, Miguel Pesce, presentó su renuncia la semana pasada y está a
la espera de que el Poder Ejecutivo la acepte. Lo mismo ocurre con el resto del
directorio. El único economista de rango importante que seguirá en la nueva gestión
es Agustín Torcassi, actual gerente general, que está en la entidad desde 2002.
Bausili, por su
parte, todavía no fue designado oficialmente, ni tampoco el resto de los
técnicos que lo acompañarán. Lo mismo ocurrió en traspasos presidenciales
anteriores, cuando la cúpula del Banco Central tardó hasta cinco días en ser
nombrada de manera oficial. Ayer hubo una reunión de transición en la sede de
la entidad entre Pesce y Bausili. El futuro presidente del Banco Central estuvo
acompañado por los economistas Vladimir Werning, quien sería su vicepresidente,
y por Alejandro Lew, quien hasta hace unas semanas era el gerente financiero
(CFO) de YPF, bajo la presidencia de Pablo González.
En los próximos
días se espera que el nuevo directorio del Banco Central tome alguna decisión
con respecto al tipo de cambio oficial, que se encuentra atrasado en términos
históricos y con una brecha de 150% con relación a los dólares paralelos.
Además, la entidad necesita recomponer reservas, ya que actualmente, las
tenencias netas son negativas por US$11.000 millones, según estimaciones
privadas.
Antes de realizar
una brusca devaluación, sin embargo, se espera que el ministro de Economía,
Luis Caputo, defina la hoja de ruta del nuevo gobierno. En particular, se
espera conocer el sendero de ajuste fiscal del que hizo hincapié anteayer el
presidente Javier Milei. LA NACION |