Por Carlos
Arbia - En recientes declaraciones, que no cayeron bien en el equipo económico,
el futuro ministro del Interior, Guillermo Francos, expresó que sería razonable que el dólar valga
entre 600 y 650 pesos pero
no está claro todavía en cuánto fijará el el próximo gobierno el valor del
dólar oficial que actualmente cotiza en 365 pesos.
De acuerdo a lo que
pudo saber Iprofesional el futuro ministro de Economía, Luis Caputo, y el futuro presidente del
BCRA, Santiago Bausili, por
ahora solo trabajan en algunas alternativas pero no está claro cuál será el
valor del dólar oficial desde el próximo lunes 11 de diciembre y si habrá o no
un desdoblamiento cambiario.
Extraño caso el del
presidente del BCRA, que debe ser muy tenido en cuenta como los dos primeros
traspiés del futuro Gobierno antes de asumir. El primer candidato
era Emilio Ocampo, quien se presentó hace dos meses como el futuro
encargado de dinamitar el organismo con su plan de dolarización y el
dinamitado fue él porque su plan no convenció a Javier Milei. En
particular porque los casi 30.000 millones de dólares para eliminar las Leliqs
no estaban.
Luego apareció como
candidato el físico matemático Demian Reidel, pero se fue muy enojado
porque uno de los futuros funcionarios más cercanos a Milei le quiso explicar
cómo había que hacer para eliminar las Leliqs y terminar con el cepo cambiario.
Reidel explotó y se fue a Nueva York.
Dudas en el equipo económico de Caputo por el valor del tipo de cambio
En el equipo
económico que rodea a Caputo hay muchas dudas en relación a la fijación del
valor del tipo de cambio oficial. Con este nivel de inflación
del 150 % anual hay que arrancar con un tipo de cambio alto y competitivo para
que no se lo devore la inflación.
La Secretaría de
Política Económica dio a conocer que la inflación de la primera
semana tras las elecciones presidenciales (del 20 al 26 de noviembre) fue del
3,1% s/s, con un avance importante en carnes, verduras y productos de
almacén.
En el acumulado de
las cuatro semanas previas, la suba de precios trepa al 10,8%, por lo que se
espera que el dato de inflación de noviembre, que se dará a conocer el 13 de
diciembre, muestre una aceleración con respecto a octubre.
Los aumentos, en
muchos casos, tienen un carácter preventivo ante el nuevo escenario
que se abrirá el 10 de diciembre. Pero la gran duda es a qué dólar están
fijados los precios en la Argentina. De cara a los próximos meses, las
expectativas de inflación son altas, y el presidente electo adelantó que la
Argentina atravesará un período de estanflación, es decir, un período de alta
inflación con recesión.
A esto hay que
sumarle que el valor del dólar futuro del Matba ROFEX a fin de año
está en unos 740 pesos lo que muestra que los operadores del mercado local
apuestan a una suba del 100 % del tipo de cambio oficial siempre y cuando no
haya un desdoblamiento cambiario con un dólar comercial y un dólar financiero
que maneje el BCRA.
Reducir
la emisión de pesos del BCRA para financiar el déficit fiscal
El plan de Ocampo
tenía como primer objetivo reducir la emisión de pesos del BCRA para
financiar el déficit fiscal del Tesoro para luego cerrar
definitivamente el BCRA y lograr que el dólar reemplace al peso como unidad de
cuenta y reserva de valor. Pero otro de los objetivos de ese plan era
tratar de reducir la demanda de dólares para pagar importaciones y para pagar
deuda del sector privado.
La idea para lograr
que esta demanda de dólares del sector privado se reduzca es que las empresas
importadoras o los individuos en lugar de pedirle esos dólares
al BCRA a un tipo de cambio oficial en el llamado mercado único y
libre de cambios (MULC) directamente utilicen dólares propios o los busquen en
el mercado de dólares financieros alternativos y no acudan al BCRA para que les
provea esos dólares.
Lo mismo ocurriría
con aquellos individuos o empresas que deban pagar deudas comerciales en
dólares con empresas del exterior como ocurre por ejemplo con empresas que
se endeudaron en el exterior con sus casas matrices para poder importar insumos
o productos finales.
El nuevo
esquema cambiario en el que trabaja Caputo también plantearía que el
sector exportador no tendría la obligación de pasar por la ventanilla del BCRA
para liquidar sus dólares y cambiarlos por pesos sino que podría disponer
libremente de esos dólares y en caso de necesitar pesos se los podría vender al
BCRA.
Un mercado cambiario donde el BCRA no intervenga
Por lo tanto, lo
que podría plantear el próximo gobierno es un mercado cambiario donde
el BCRA no intervenga en la compra y venta de dólares que sería una operación
del sector privado.
En ese aspecto
conviene señalar que desde su aparición en los medios el futuro
presidente Javier Milei siempre manifestó su idea que el BCRA no
tendría que intervenir en las compras y ventas de dólares porque de esa manera
el superávit comercial se lo quedaría directamente el sector privado y no
habría ninguna injerencia del BCRA o del Tesoro.
Al respecto el
economista Marcelo Elizondo, director de la consultora DNI explicó a
Iprofesional que "si bien en un primer momento lo mejor sería un
mercado cambiario desdoblado con un dólar para pagar importaciones más barato y
un dólar para liquidar exportaciones más caro al final sería muy óptimo lograr
que los dólares que demandan los importadores o los privados para pagar deuda
no los provea el BCRA".
Hay varios informes
que circulan en la city porteña acerca de cuánto puede costar el dólar oficial
luego de que asuma Javier Milei el 10 de diciembre próximo y van de un rango
de 600 a 800 pesos. Como ejemplo se puede analizar que con datos al 27
de noviembre la base monetaria suma $ 8,0 billones, mientras que los pasivos
remunerados del BCRA llegan a unos $ 25 billones, en tanto que las
reservas internacionales brutas del organismo llega a unos 21.000 millones de
dólares lo que nos daría un dólar de convertibilidad de aproximadamente 1190
pesos.
Eliminar
los desequilibrios tanto fiscal, como monetario y cambiario
Pero frente a esta
situación el gobierno deberá eliminar los desequilibrios en el aspecto fiscal ,
monetario y cambiario. Para lograrlo, el especialista Salvador Di Stefano
propone que en primer lugar se debe conseguir tener superávit
fiscal, para lograr tener reputación y que los títulos argentinos en el
mercado pasen a tener un precio mayor a los actuales.
Esto implica que el
AL30 que hoy cotiza en torno de los u$s33, puede valer como mínimo u$s45, esto
le abriría a Argentina la posibilidad de conseguir financiamiento sin
tener que recurrir a organismos internacionales, a la vez que mostraría un
balance del Banco Central con más capital genuino.
En segundo lugar,
debería lograr disminuir o cancelar el stock de leliqs, una forma de
realizarlo es consiguiendo dólares en el exterior para cancelar la deuda de los
importadores. Los que ingresaron mercadería del exterior, no la han pagado, y
están empachados de pesos en el sistema financiero.
Pagar esta deuda,
hará que los importadores se saquen estos pesos de encima y el Banco
Central debería proceder a esterilizar estos pesos lo que disminuiría los
pasivos remunerados. Sería un hecho histórico que el BCRA rompa y destruya
pesos, para que caiga la oferta monetaria en el mercado.
En tercer lugar,
sería necesario que el gobierno lleve adelante un blanqueo de
capitales con un premio para los que ingresen al mismo, sería un bono con
beneficios impositivos para quien se adhiera y traiga dólares a la
Argentina.
A su vez, CIARA-CEC
informó que la liquidación de divisas del agro alcanzó los u$s1.003
M, lo cual representa una caída del 41% interanual. Si el análisis se extiende
al periodo enero-noviembre, el sector cerealero y oleaginoso perdió u$s18.200 M
en ventas al exterior en la comparativa interanual, lo que representa un 50%
menos. IPROFESIONAL
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