Por Santiago
Escobar - La compra
de dólares en el mercado oficial de cambios (MULC) por
parte del Banco Central(BCRA) es uno de los muchos factores (no el
único) que inciden en el nivel de sus reservas
internacionales y es el más importante como señal de acumulación y fortalecimiento de la política
monetaria y cambiara de la entidad. Este martes, el Central anotó 16 ruedas positivas consecutivas en esa plaza en
las que lleva comprados u$s792 millones en
total y, "desde el 14 de agosto, las compras superan los u$s1.560 millones", según datos del propio
organismo.
No obstante, según
estimaciones privadas, el rojo del año es de u$s1.800 millones y los
analistas advierten que le cuesta robustecer las reservas. La racha
compradora del organismo conducido por Miguel Ángel Pesce sucede
en un contexto de balotaje y después de pagar al Fondo Monetario Internacional (FMI) u$s790
millones a principios de mes, tras lo cual, según la Consultora 1816, las
reservas brutas "perforaron los u$s21.000 millones,
alcanzando mínimos desde 2006".
En tanto, estiman
que las netas son negativas en u$s10.800. Esto se ve agravado también por la
constante intervención en el mercado cambiario oficial para mantener a raya a
los dólares paralelos (o libres legales), que son el MEP y el Contado Con Liquidación (CCL).
Lo cierto es que el
BCRA, faltando solo tres ruedas hábiles para la cita electoral del próximo
domingo, continúa con su saldo comprador y eso hace que, si bien la
situación es muy delicada en materia de reservas, se vea algo atenuada por la
racha compradora mencionada, que no se corta hace tiempo, pero sí
aminoró su ritmo en las últimas jornadas.
¿Qué hay detrás
de la racha compradora del BCRA?
Otra pregunta que
surge, es ¿cuál es la estrategia del Central para lograr
embolsar dólares durante el último tiempo? La clave principal está, según los
analistas consultados por Ámbito, en un
estricto cepo a las importaciones. El informe de 1816 señala al respecto:
"La sostenida caída de reservas se da a pesar de que el
Central es comprador en el MULC, lo que se explica por un cepo muy
endurecido".
No obstante, pese a
la falta de dólares y aunque desde distintos sectores reclaman por la
aprobación de licencias de importación (SIRAs), según pudo saber este medio, datos del Central reflejan que Argentina tiene "niveles
récord de importaciones este año".
Las compras al exterior acumularon u$s64.000 millones entre
enero y octubre y marcaron el segundo mejor registro de los últimos
5 años. Asimismo, el 2023 marcó récord hasta ahora en materia
de importación de bienes de capital, piezas y accesorios, con un
total acumulado de u$s23.300 millones, frente a u$s23.200 millones de 2022. En
2021, el rubro había totalizado u$s17,8 millones, en 2019, alcanzó unos
u$s16.100 millones y al año siguiente (con la pandemia), los u$s11.700
millones. El promedio de estos cuatro años es de u$s19.000
millones, por encima de lo que se importó en 2019.
No obstante, el
economista Amilcar Collante, señala que, con el volumen operado
en el MULC en el último tiempo, se puede intuir que "el cepo importador es
muy fuerte y están pisando las autorizaciones".
Alejandro Giacoia, economista de Econviews, comparte la
mirada al señalar que el cepo sobre el sector importador es la
clave de la acumulación de reservas, y advierte sobre el riesgo que esa
práctica conlleva sobre la actividad económica al indicar que "podría
llevar a que las empresas detengan su producción por falta de insumos".
Banco Central:
los ejes de la estrategia
El tipo de cambio
diferenciado que se aplica para el sector exportador (como el dólar agro o el
dólar soja) es otro elemento clave. "Por el lado de la oferta, el dólar Fernet, el dólar soja o el exportador (incentivo
exportador al 70% por el mercado oficial y 30% a través del CCL) les aporto una
oferta extra en el mercado oficial, lo que también ayudó
descomprimir la brecha cambiaria", apunta Colllante. Y eso ha permitido que el BCRA siga siendo comprador en el MULC.
En esa misma línea
se expresa Martín Kalos, director de EPyCA Consultora, quien explica a
este medio que la acumulación de reservas se fundamenta en una combinación de
un freno a la salida de dólares y un incentivo exportador. La conjunción de una
posible liquidación adicional por exportaciones y una reducción en el acceso al dólar oficial para pagos de importaciones es, para él,
"el principal motor detrás de la acumulación de reservas en el
contexto actual".
En cuanto al primer
elemento, señala que "se limita el gasto en importaciones, restringiendo
la salida de dólares" por esa vía. Y, por otro lado, Kalos indica que
"la medida del dólar diferenciado resulta en un tipo de cambio efectivo de
alrededor de $500, que favorece a varios exportadores, especialmente aquellos que necesitan liquidar para cubrir gastos
diversos durante la cosecha y la próxima campaña".
Para Giacoia, un
elemento esencial en el desarrollo del tipo de cambio exportador es que, tras
las elecciones generales, las expectativas de devaluación
para diciembre disminuyeron. Aclara que "esto no significa que
no habrá un aumento en la tasa de cambio, sino que probablemente será
menor de lo inicialmente previsto, especialmente si gana Massa".
Pero lo cierto es que, según su visión, esta disminución en la expectativa
devaluatoria hizo que el esquema para liquidar exportaciones, "con un 70%
al tipo de cambio oficial y un 30% al CCL, resulte más atractivo".
Y deduce, así, que "esta situación podría estar contribuyendo a
mejorar la oferta en el mercado".
Por último, Hernán Letcher, economista y director del CEPA,
introduce un nuevo eje al señalar que las políticas que apuntan a controlar los
tipos de cambio paralelos son también esenciales para la acumulación de
reservas. Eso permitió tener tipos de cambio estables en un nivel que él llama
"precio Massa", es decir, sin sobresaltos y en torno a
los $900 en el blue y a los $880 en los financieros. Aunque advierte que,
"en los últimos días, esas compras ya fueron más
moderadas".
Dólar: el
regreso del crawling peg
Asimismo, cabe recordar que todas las expectativas se
centran ahora en mediados de esta semana, pues como informó Ámbito, se espera que este miércoles vuelva el crawling peg (microdevaluaciones diarias), en principio, con
un ajuste inicial del 3% mensual. AMBITO |