Por Mirta
Fernández - Ante un escenario de desaceleración de la inflación en octubre y la
calma del dólar blue y las divisas financieras tras el resultado electoral de
primera vuelta, pero con proyecciones de renovada presión en la dinámica
inflacionaria de noviembre y el riesgo de que resurja la demanda
dolarizada en la recta final del balotaje, una de las incógnitas de los
ahorristas es que hará el Banco Central este mes con la tasa de interés de los plazos fijos.
El próximo lunes 13
de noviembre el INDEC difundirá el dato de inflación de octubre que, según
estimaciones de consultoras privadas, se ubicó en un rango de entre 9,4 % y
11,8%, lo que implicaría una moderación del ritmo frente al pico de 12,7% de
septiembre. Los jueves es el día que habitualmente se reúne el directorio del
BCRA, con lo cual se espera que la entidad monetaria informe su decisión
respecto a la tasa el 16 de octubre.
La última vez que el BCRA ajustó la tasa de
interés fue el 12 de octubre cuando elevó la tasa de la Leliq a 28 días 15
puntos del 118% TNA a 133%, con lo cual la tasa efectiva anual (TEA) se ubica en 255%. Así, el rendimiento del
plazo fijo tradicional a 30 días de hasta $30 millones para personas físicas es
desde esa fecha de 11% mensual. Y para el resto de las colocaciones
del sector privado la tasa mínima garantizada actual está en 126%, es decir que
da una rentabilidad de 10,5% mensual.
En esa oportunidad,
la autoridad monetaria señaló que consideró "conveniente incrementar la
tasa para "acotar la volatilidad financiera observada durante el período
electoral y favorecer la acumulación de reservas internacionales".
Tasa del plazo fijo: ¿qué análisis hacen los especialistas?
Santiago Manoukian,
jefe de Research en la consultora Ecolatina, planteó "la decisión de la
tasa de política monetaria ha estado enfocada últimamente casi exclusivamente
en mantener a raya a los dólares paralelos y la brecha cambiaria en medio del escenario
electoral, y no tanto observando su nivel respecto a la inflación, es decir si
es real positiva o negativa".
"Esto lo vimos
claramente cuando conocido el dato de inflación de agosto, la tasa quedó
fuertemente negativa y aún así el BCRA decidió no aumentarla, y recién lo hizo
en octubre en un marco de inestabilidad cambiaria más acentuada", recordó.
Por lo tanto, el economista enfatizó que "ese objetivo dual pareciera ser
un poco mentiroso, en general pesa más lo cambiario que lo
inflacionario".
"En Ecolatina
medimos una inflación de 9,4% en octubre, y esperamos que la del INDEC este debajo
del 10%. En cualquier caso, probablemente la inflación de octubre esté por
debajo del 11% que es el rendimiento nominal del plazo fijo asi que quedaria en
terreno positivo. Pero creo que la
decisión del BCRA va a depender fundamentalmente a pocos días de la elección de
segunda vuelta de cómo vengan las tensiones cambiarias", señaló.
Los analistas
también explican que subir la tasa no es una decisión fácil por el costo que
implica esa medida en términos de encarecimiento del crédito para las familias
y empresas, el impacto sobre la actividad económica, y el deterioro del déficit
cuasifiscal del BCRA.
Manoukian recalcó que "aumentar la tasa implica
mayor emisión por intereses endógenos de los pasivos
remunerados". Y eso termina retroalimenta a la expectativa de inflación
hacia el futuro.
En ese
sentido, Sebastián Menescaldi, director de Eco Go puntualizó que
el stock de pasivos remunerados asciende "a $22,3
billones" y el BCRA "el último mes pagó en concepto de intereses $2,2
billones" por esa deuda remunerada.
A su vez, el economista Federico Glustein supone
que el BCRA "no subirá la tasa teniendo en cuenta
que si la inflación de octubre es inferior a dos dígitos, sería enfriar
demasiado a la economía".
Tasa del plazo fijo: ¿qué prevén los analistas que hará el BCRA?
Menescaldi sostuvo
que en octubre la inflación bajó -el relevamiento de Eco Go arrojó 9,4%-,
dejando la tasa de plazos fijos positiva en términos reales, gracias a que el
triunfo de Massa estabilizó la demanda de pesos, aunque advirtió que "en noviembre
esperamos que los precios vuelvan a acelerarse, de cara al último round de la
pelea electoral".
"En el
interregno entre la votación y la llegada de la nueva administración, es
factible que muchos precios hoy reprimidos sean liberados y que las empresas
reacomoden sus listas. Nuestros escenarios marcan una inflación en noviembre que podría ubicarse entre el 15,8% y el
17,2% impulsada por la incertidumbre electoral y la potencial devaluación que
se espera dado el acuerdo con el FMI y la constricción de las reservas",
resaltó.
En ese marco, Menescaldi cree que el BCRA "no va a
modificar la tasa" del plazo fijo antes de la segunda vuelta electoral" pero enfatizó que "la
entidad tendrá que ver si la tiene que retocar después del balotaje".
"La tasa va a
quedar larga respecto a la inflación de octubre, pero hacía adelante la
expectativa es que el costo de vida siga subiendo con lo cual va a depender
mucho de la elección. Una suba de tasas o no va a depender de qué pase después
del balotaje. El 21 de noviembre (primer día hábil post elecciones) verán que
pasa con el mercado. Si Milei llega a ganar habrá que ver esa semana como
reaccionan los dólares financieros, los pesos, etc", fundamentó.
Para Fernando Baer, economista jefe de Quantum
Finanzas, el BCRA "mientras persista la estabilidad de los dólares
libres, el BCRA no avanzará en suba de tasas", y agregó que "después del balotaje dependerá de quien ganó y que
transición o cooperación habrá".
Alejandro Giacoia,
analista de EconViews, también opina que la entidad monetaria "después que
se conozca el dato de inflación de octubre, el BCRA no va a subir la
tasa". Argumentó que "si bien para pensar la tasa en términos reales
hay que usar la inflación futura y no la pasada, creo que el BCRA
se va a agarrar del dato de octubre para mostrar que es positiva y no va a
subirla", aunque concordó que
"dependiendo del resultado electoral, no puede descartarse" un
reajuste en noviembre.
Por su parte, la economista Natalia Motyl, juzgó que el
BCRA "dejará estable a la tasas de interés". Y subrayó que "lo
que importa es la tasa de interés real ex ante, que es la tasa de interés nominal determinada por autoridad monetaria
menos la inflación esperada, y por el momento es positiva y no hay necesidad de
aumentarla".
"La inflación
esperada se forma, en parte, en base a la inflación pasada. Y que hoy la
inflación de octubre pueda quedar por debajo del 10% contribuye a bajar la
inflación mañana, por una cuestión de expectativas. Ahora, es cierto en
noviembre con el balotaje todo puede pasar el martes post electoral". Y
aseguró: "Si gana Milei deberá subir tasas para evitar una dolarización
fuerte de carteras, deberá evitar que la gente vaya a sacar los dólares",
y especuló que en ese casó la entidad
"deberá subir tasas en 200 puntos básicos".
El analista
financiero Gustavo Ber coincidió en que "el BCRA no modificará
la tasa por la desaceleración de la inflación de octubre" y consideró que
"las definiciones de política monetaria quedarán para después del
balotaje, sujeta al resultado, y por ende la administración la transición
restante hasta el 10-D, donde se estima que debería llegar de inmediato un plan
económico integral que atienda los desequilibrios fiscales, monetarios y
cambiarios.
Para Manoukian, el
BCRA "probablemente no modifique la tasa". Y justificó: "La suba
de tasa no es una herramienta que tenga mucha efectividad en el presente en un
contexto de dominancia fiscal y falta de confianza y credibilidad en el gobierno,
y por los pocos días que quedan hasta el balotaje, salvo que haya un movimiento
abrupto del tipo de cambio paralelo no la van a cambiar".
Tasa
del plazo fijo: ¿una suba de tasa frenaría una dolarización electoral?
Franciso Ritorto,
analista de ACM, Francisco sostuvo que "si efectivamente la inflación de
de octubre se encuentra entre los valores esperados, por el momento no tendría
sentido volver a subir la tasa de interés".
"Definir una tasa de interés que mantenga atractivas
las inversiones en pesos y evite la corrida al dólar no parece posible en el
momento actual. La gente eligió el dólar como vehículo de cobertura, una
dolarización responde más a la incertidumbre y falta de confianza que se
traduce en una mayor presión por
demanda de divisa extranjera. Las herramientas para evitar esto se volvieron
cada vez más limitadas", fundamentó.
En ese marco, Ritorto dijo que "después del
balotaje hay un cambio de escenario por completo, seguramente
tengamos novedades respecto a la política monetaria luego del 19 de
noviembre".
En cambio, Eliana Scialabba, Directora
Ejecutiva del Centro de Estudios Económicos Argentina XXI (CEEAXXI) estimó que
"seguramente el BCRA subirá la tasa de interés, a fin de tratar de
descomprimir el mercado cambiario, ya que aún hay muchos argentinos que
canalizan sus excedentes en este tipo de depósitos".
"La tasa de
interés dependerá de la inflación que reporte el INDEC, la cual estimamos para
octubre por encima del 10% mensual. Esto nos llevaría a una suba mínima de 100
puntos básicos en la tasa. De dejar la tasa sin cambios, el riesgo
podría estar en una mayor canalización de pesos al mercado cambiario",
advirtió. IPROFESIONAL |