Por
Valeria Bednarik -El par EUR/USD finalmente despertó de su letargo de
más de un mes, subiendo a 1.1482 y terminando la semana un puñado de pips por
debajo de ese nivel. El dólar estadounidense colapsó frente a todos sus
principales rivales y el catalizador fue la inflación de EE.UU. El índice de
precios al consumidor IPC se confirmó en un 7% interanual en diciembre, su
nivel más alto desde 1982.
Inflación
y bancos centrales
La
presión de los precios ha sido el tema principal durante 2021, cuando el mundo
comenzó a recuperarse del golpe inicial de la pandemia. Las interrupciones en
la cadena de suministro y un cambio en el comportamiento del consumo llevaron a
que la inflación alcanzara máximos de varias décadas en las economías
desarrolladas, lo que a su vez está empujando a los bancos centrales a
endurecer sus políticas monetarias, a pesar de que el progreso en la
recuperación económica está lejos de ser completo.
Hasta
el último miércoles, la publicación de los datos de inflación tendía a
estimular la aversión al riesgo, ya que los temores de que la Reserva Federal
de EE.UU. retirara el apoyo financiero hicieron que las acciones bajaran y los
rendimientos de los bonos del
gobierno subieran, en beneficio del dólar. Sin embargo, esta vez fue
diferente. Los mercados busátiles avanzaron, mientras que los rendimientos
de los bonos del gobierno prácticamente ignoraron el dato y el dólar colapsó.
Tal
reacción podría explicarse porque las cifras no son suficientes para
cambiar el rumbo fijado por el Banco Central de EE.UU. A finales de 2021,
los responsables de la política monetaria de EE.UU. finalmente consideraron que
las presiones sobre los precios no eran solo transitorias y decidieron
endurecer su política monetaria. En su última reunión, el FOMC insinuó tres
aumentos de tasas en 2022, mientras que Powell y compaía sugirieron además una
disminución del balance para más adelante en el año. La actitud agresiva de la Fed se
descontó antes de la publicación.
La batalla por la
recuperación continúa
La
caída del dólar se vio avivada por los malos datos de EE.UU. publicados
durante la semana. El índice de precios al productor IPP alcanzó el 9.7%
interanual en diciembre, mientras que la cifra subyacente saltó al 8.3%, lo que
refleja presiones inflacionarias persistentes. Además, las solicitudes
iniciales de desempleo en la semana que finalizó el 7 de enero fueron de
230.000, más de lo esperado por segunda semana consecutiva. También se pudo
apreciar una tendencia ascendente en la lectura promedio de 4 semanas, que
llegó a 210.000 en la misma semana.
El
viernes, el país publicó las ventas minoristas de diciembre, que fueron
mucho peores de lo previsto, cayendo un 1.9 % intermensual. La lectura
subyacente, Grupo de Control de las ventas minoristas, disminuyó un -3.1%.
Finalmente, la estimación preliminar del índice de sentimiento del
consumidor de la Universidad de Michigan para enero fue peor de lo previsto,
cayendo a 68.8 puntos desde los 70.6 vistos el mes anterior.
Al
otro lado del Atlántico, los políticos europeos mantienen su postura de
“esperar y ver”. La presidenta del Banco Central Europeo,
Christine Lagarde, dijo que entienden que el aumento de los precios es una
preocupación para muchas personas y señaló que se toman esta preocupación
muy en serio, y agregó que "la gente puede confiar en que nuestro
compromiso con la estabilidad de los precios es inquebrantable, lo cual es
fundamental para el firme anclaje de las expectativas de inflación y de la
confianza en la moneda". El vicepresidente del BCE, Luis de Guindos, dijo
que la economía europea se está acostumbrando al coronavirus y agregó que
"quizás la inflación no sea tan transitoria como se pronosticó hace solo
unos meses", aunque espera que se mantenga por debajo del objetivo del BCE
en 2023 y 2024.
¿Qué podemos esperar en el
frente de los datos?
La
UE tuvo un calendario macroeconómico escaso, publicando pocos datos de
interés. Alemania reportó un crecimiento del PIB real, que registró un
2.7%, mejor que el -4.6% anterior, mientras que la balanza comercial de la UE
de noviembre registró un déficit de 1.300 millones de euros.
En
la próxima semana, será el turno de Alemania y la UE de publicar las
lecturas finales de sus cifras de inflación de diciembre, previstas en el 5.3%
y el 5% interanual, respectivamente. Además, el país publicará la encuesta
ZEW de enero y el índice de precios al productor IPP de diciembre, mientras que
la Unión también dará a conocer la estimación preliminar de la confianza del
consumidor de enero.
EE.UU.
no publicará datos relevantes, aunque el calendario macroeconómico incluye los
habituales datos semanales de desempleo y algunas cifras relacionadas con la
vivienda.
Perspectiva
técnica del EUR/USD
El
par EUR/USD cotiza
alrededor del nivel de 1.1440, manteniendo la mayor parte de sus ganancias
semanales. El par se ha acercado al 61.8% de retroceso de su caída de 1.1691 a
1.1185 en torno a 1.1495 antes de devolver algo de terreno, actualmente rondando
el 50% de retroceso de la caída antes mencionada.
El
gráfico semanal muestra que la última recuperación desde el mínimo de 2021 se
debió a una corrección pendiente desde hace mucho tiempo, ya que el par ha
estado en un movimiento bajista prácticamente desde finales de mayo de 2021
cuando alcanzó un máximo de 1.2266. El mismo gráfico muestra que la media móvil
simple de 20 semanas se dirige firmemente a la baja y que cruza por debajo de
la SMA 200, ambas alrededor del nivel redondo de 1.1500. Los indicadores
técnicos, por su parte, mantienen su tendencia alcista, aunque dentro de
niveles negativos, lejos de insinuar un avance sostenido a largo plazo.
El
gráfico diario respalda la visión de más largo plazo, al menos mientras el par
permanezca por debajo del área de 1.1500. La SMA de 100 días se encuentra
alrededor del nivel de resistencia de Fibonacci mencionado
anteriormente, lo que refuerza la fortaleza de la zona de precios de 1.1500.
Los indicadores técnicos
han perdido su fuerza alcista después de acercarse a las condiciones de
sobrecompra. Más interesante aún, las dos últimas velas diarias muestran mechas
largas hacia arriba, lo que sugiere que el agotamiento de las compras.
Si
el par supera el área de resistencia de 1.1500, el caso alcista se hará
más evidente. La próxima zona de precio de resistencia y
el objetivo alcista probable será 1.1570/80, mientras que una vez por
encima de esta última región, parece probable un retroceso total hacia 1.1691.
Por
otro lado, el potencial alcista debería perder fuerza tras una ruptura por
debajo de 1.1385, el 38.2% de retroceso de la caída antes mencionada, con
posibilidades de retroceder hacia el nivel de 1.1250, en camino a 1.1185.
EUR/USD Encuesta de sentimiento
La Encuesta de
Previsión de Divisas de FXStreet muestra que el 75% de los
expertos encuestados esperan una extensión alcista
en el corto plazo, aunque el 77% de ellos apuesta por niveles más bajos en la
perspectiva de un mes. En la perspectiva trimestral, los alcistas representan
el 22% mientras que los que apuestan a la baja se sitúan en el 69%. En general,
parece que el interés especulativo está viendo el avance actual como una
corrección pendiente, pero sigue buscando comprar dólares a largo plazo.
En el gráfico de resumen general, la media móvil a corto plazo apunta
firmemente al alza, parcialmente distorsionada por algunas expectativas
extremadamente alcistas. El impulso positivo se desvanece en la perspectiva
mensual, mientras que el promedio móvil a largo plazo no tiene dirección, con
la mayoría de los objetivos acumulándose entre 1.0900 y 1.1300.
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