Por Sofía Diamante
- Cuando faltan tres días para que finalicen las restricciones al pago
anticipado de importaciones, en el Banco Central se limitaron a señalar que se
“flexibilizarán las medidas tras escuchar las necesidades de las cámaras
empresarias con las que se estuvo trabajando”. Sin embargo, al mismo tiempo,
indicaron que se tomará en cuenta “garantizar la estabilidad del mercado
cambiario”. Hoy se espera que en la reunión de directorio de la entidad estén
las precisiones.
A comienzo de mes,
el Central dispuso que hasta el 31 los pagos de importaciones se deberán cursar
a partir de que ingresen los bienes al país y no se podrán realizar en forma
anticipada. Según justificaron, el objetivo es acortar las diferencias entre
los pagos de importaciones y el valor de la mercadería ingresada, que en los
últimos cuatro meses tuvo brechas de entre 300 y 800 millones de dólares.
En las reuniones
que el presidente del Banco Central, Miguel Pesce, tuvo con las cámaras
empresariales, el sector privado le pidió que se puedan girar los pagos cuando
el producto esté llegando a puerto, así se pueden retirar los productos con los
documentos en mano sin necesidad de mandarlos a un depósito.
Además, pidieron
volver a la situación anterior de poder acceder al cupo de US$1 millón para el
pago de importaciones, y no a los US$250.000 a los que se redujo el monto en la
resolución de comienzo de mes. “Se comprometieron a estudiar el tema y dijeron
que en esta semana íbamos a tener alguna respuesta. Creemos que será mañana
[por hoy] con la reunión de directorio”, dijo en reserva uno de los empresarios
reunido con las autoridades del BCRA.
“Estas medidas
afectaron sobre todo a las pymes, que no son habituales importadoras y no
pueden imponer estas condiciones de pago con sus proveedores. Al anularse el
despacho a vista, las operaciones que venían en esa condición y no pudieron
cambiar la documentación a tiempo tuvieron que ir a las terminales a pagar
estadía hasta que las puedan sacar o hasta que cambien la reglamentación”,
agregó el líder de una empresa industrial.
El BCRA impuso
trabas a los importadores luego de que perdiera US$200 millones en apenas tres
días hábiles del mes. Desde entonces, acumuló un saldo positivo de US$550
millones.