Por Mariano
Boettner - El Gobierno anunció que pondrá en marcha un esquema
de “renuncia voluntaria” a los subsidios al transporte, para que los
usuarios del sistema público de trenes y colectivos paguen la tarifa plena si
consideran que no necesitan subvenciones del Estado. Lo anunció este lunes el
ministro de Transporte Diego Giuliano y sería implementado a lo largo
de esta semana. El boleto de colectivo, sin subsidio,
costaría $700 y el de tren, unos $1.100.
El Poder Ejecutivo
oficializará esa medida este martes en el Boletín Oficial. Se trata de un
registro para que usuarios de transporte que utilicen la tarjeta
SUBE puedan renunciar a contar con el subsidio. La medida solo tendrá como
alcance el sistema de transporte público que forma parte de la jurisdicción
nacional, es decir líneas de colectivos y trenes en el Área Metropolitana de
Buenos Aires.
Hay, en paralelo,
un condimento político en el anuncio. El ministro Giuliano aseguró
que la cuestión de los subsidios forma parte de la discusión de campaña.
“Nosotros somos partícipes de informar, de dejarle claro a la sociedad cómo son
las cosas. Hay intereses sociales en juego”, mencionó el funcionario. “Quien va
a decidir por opciones que van a eliminar los subsidios, deberían optar
por renunciar a los subsidios”, advirtió.
Según estimaron
fuentes oficiales, un boleto mínimo de colectivo en el AMBA sin ningún subsidio costaría
unos 435 pesos y el rango de precios iría hasta los 700 pesos. En el sistema
público que depende del Ministerio de Transporte nacional -entre colectivos y
trenes- circulan diariamente unos 5 millones de pasajeros. Para mantener el
subsidio como en la actualidad no será necesario hacer ningún
trámite, indicaron desde Gobierno.
Una vez que
oficialice la medida, el Gobierno invitará a las provincias a que
implementen un registro similar para permitir que los usuarios que quieran
renunciar a su subsidio lo haga. Actualmente unas 53 jurisdicciones cuentan con
el sistema SUBE, por lo que podrían incluirse en el sistema de renuncia
voluntaria que implemente la Nación. Se trata de un sistema distinto al RASE
que rigió para las subvenciones a las tarifas de luz y gas, que actuaron
como un registro por el cual el Estado podía discriminar, según el nivel de
ingresos, a qué nivel de cobertura de subsidios correspondería cada hogar.
“La acción de
registro para la renuncia al subsidio al transporte es sólo para las personas
que no quieran continuar abonando una tarifa subsidiada sino pagar la tarifa
correspondiente sin subsidio, o tarifa ‘plena’. En una primera etapa también se
podrá solicitar pagar la tarifa plena sin subsidio a los conductores de colectivo”,
indicaron desde Transporte.
La renuncia al
subsidio implicará, ampliaron, la pérdida de todos los beneficios asociados a
la SUBE. “Aquellas personas que optan por no continuar con el subsidio también
perderán el acceso a los beneficios que tiene SUBE: Atributo Social
Federal a grupos sociales con 55% de descuento en la tarifa y a
la RED SUBE para quienes realizan trasbordo, en el primer viaje se
paga el valor total del pasaje, en el segundo un 50% menos y a partir del
tercero un 75% menos. Como así también a todos los Atributos Locales definidos
por las jurisdicciones donde la tarifa se abona con SUBE”, mencionaron desde la
cartera que dirige Giuliano.
Diego Giuliano,
ministro de Transporte, anunció el esquema de renuncia optativa al subsidio
para boletos de trenes y colectivos
Para efectivizar
esa renuncia será necesario tener una tarjeta SUBE registrada a
nombre propio y se deberá llenar un formulario en la página web del sistema
SUBE en el que serán informados sobre los precios plenos que pasarán a pagar.
La hoja de ruta
prevista de la medida prevé que desde este martes se podría “previsualizar” el
formulario en la web, que se podrá completar desde el viernes
20. Desde ese día, además, habrá una instancia previa antes de la
oficialización de la eliminación del subisdio: el usuario que se
podrá solicitar a los choferes, al subir al colectivo, que le cobre
la tarifa plena. Desde el viernes 27 el cobro sin
subvenciones será automático para quienes hayan renunciado.
El ministro
Giuliano aseguró que la medida no implicará que quienes permanezcan en el
universo de usuarios subsidiados tengan límites o restricciones a la compra de
dólares, como sí sucede para los subsidios a las tarifas eléctricas u otro tipo
de asistencia estatal.
Por otra parte, el
funcionario ratificó que las tarifas al transporte público que son determinadas
por el Gobierno nacional continuarán congeladas hasta el 10 de
diciembre y que, en caso de que el oficialismo siguiera en la
administración del Poder Ejecutivo, replantearían la organización del sistema
de subsidios.
Según un informe
del Observatorio de tarifas y subsidios IIEP, que depende de la Universidad de
Buenos Aires (UBA), la parte que corresponde a transporte ($544.000 millones)
explica el 20% de la cuenta de subisidios, con un crecimiento de
79,8% anual nominal entre enero y septiembre, lo que implicaría un recorte
de 13% en términos reales.
“Dentro del mismo,
la partida más relevante es el Fondo Fiduciario del Sistema de Infraestructura
del Transporte (FFSIT) que tiene como finalidad el financiamiento de la
cobertura de los subsidios al autotransporte de pasajeros y crece 109,2%
anual en términos nominales (3,6% real)”, explicó ese documento.
Para la empresa
pública Operador Ferroviario la cuenta de transferencias
creció 75% nominal, lo que implica una caída de
casi 14% real. Al excluir a Aerolíneas Argentinas de esa cuenta, la
cuenta de subsidios al transporte muestra un avance nominal de 98% en
los primeros nueve meses del año, lo que implicaría un recorte de 3%
anual. |