Por Melisa Reinhold
- Cuando faltan 10 ruedas hábiles antes de las elecciones presidenciales, se
profundizó la huida del peso de ahorristas e inversores, y los dólares libres
se dispararon ayer y marcaron nuevos récords. El blue se vendió a $843 en el
microcentro porteño, con un avance diario de $33, mientras que en la semana
acumula un alza de $43. Así, alcanzó el valor nominal más alto del que se tenga
registro.
En tanto, el dólar
contado con liquidación (CCL) “libre” se disparó $67 hasta llegar a los $904,99
y está cerca de alcanzar “valores de crisis”. El MEP cerró a $747,68.
El “plan platita”,
las tasas poco atractivas y la incertidumbre preelectoral son algunas de las
causas, según los analistas.
El descontrol del
mercado cambiario y la situación de la economía en general fueron, ayer, el eje
de las preocupaciones centrales entre los empresarios que participan en el
Coloquio de IDEA.
A tan solo 10
ruedas hábiles antes de las elecciones presidenciales, los dólares libres se
dispararon hasta $67 y marcaron nuevos récords en términos nominales. El
nerviosismo de la previa electoral se ve reflejado en las distintas
cotizaciones, que son presionadas por una mayor demanda de los ahorristas,
sobre todo en un contexto donde las calles se vieron inundadas de pesos tras los
anuncios económicos del Gobierno y ante una inflación que se mueve a una
velocidad de dos dígitos mensuales.
En la tercera rueda
de la semana, el dólar blue se vendió a $843 entre los arbolitos y las cuevas
de la ciudad de Buenos Aires. Significó un avance diario de $33 ( 4%), mientras
que en la semana ya acumula un alza de $43 ( 5,3%). Así, alcanzó el valor
nominal más alto del que se tenga registro.
Para el analista
financiero Christian Buteler, hay media docena de factores que explican las
subas de los últimos días. En parte, los ahorristas están dolarizando carteras
de cara a las elecciones. Otro tanto influyó que el Banco Central (BCRA) no
haya subido las tasas de interés, pese a que la inflación esperada para
septiembre y octubre se encuentra arriba del 10% (ver página 17). También hay
dudas sobre la deuda en pesos y la “bola de Leliq”, pero ningún candidato “da
claridad” sobre el tema.
“A eso hay que
sumarle el ‘plan platita’. Esto no quiere decir que la gente recibe los pesos y
se va corriendo a comprar dólares porque probablemente los tengan que gastar
para subsistir diariamente. Pero el dinero entra en el circuito del consumo y,
en algunas partes de la cadena, va hacia la dolarización. Los tres candidatos
principales deberían trabajar en conjunto a los efectos de darle más
certidumbre al mercado y evitar que esta dolarización se siga espiralizando.
Porque después de saltos así se observa un traslado a precios, y ya estamos en
niveles de inflación muy altos”, advirtió.
Los tipos de cambio
financieros también presentaron grandes subas. El dólar contado con liquidación
(CCL) “libre” se disparó $67 hasta alcanzar los $904,99 ( 8%). Este salto se
dio a pesar de la entrada en vigencia del dólar Vaca Muerta, la prórroga del
dólar soja 4 y el próximo dólar pyme (ver aparte), medidas que buscan sumar
oferta de dólares al CCL y así intentar calmar la plaza cambiaria.
De esta manera, el
contado con liqui está cerca de alcanzar, en términos reales, “valores de
crisis”. Por caso, los $800 que marcó a finales de agosto serían unos $908 de
hoy debido a la fuerte inflación que se registró en las últimas semanas. De
repetirse la crisis de julio del año pasado, el CCL se ubicaría en torno de los
$885. Mientras que los $195 que había alcanzado en octubre de 2020 equivaldrían
hoy a $930, según estimaciones de Portfolio Personal de Inversiones (PPI).
Para Fernando
Marull, economista de FMyA, la disparada de los dólares también se explica por
un panorama global “muy feo”. Ayer, las principales monedas latinoamericanas se
devaluaron frente al dólar. El panorama se completa con la habitual
dolarización preelectoral y las dudas que surgen alrededor de la deuda en
pesos, propio de la incertidumbre ante el escenario político.
Por otra parte, el
dólar MEP cerró la jornada en los $747,68. Fueron $27 más frente al cierre
anterior ( 3,8%), incluso a pesar de que el Banco Central intentó ponerle un
freno al alza mediante intervenciones en el mercado de bonos. El martes pasado,
según estimaciones de PPI, habría destinado US$87,5 millones a esta maniobra.
Una cifra que también se habría repetido ayer.
Sin sorpresas, el
dólar mayorista continuó fijo en los $350. Permanece en ese valor desde el
lunes posterior a las PASO, cuando el Banco Central convalidó una devaluación
del 17,9%, y desde el Gobierno aseguran que se mantendrá así hasta mediados de
noviembre. De esta manera, la brecha frente al blue es del 140%; frente al CCL,
se ensancha a un 158%.
“El tipo de cambio
real multilateral (TCRM), índice que compara al peso con las monedas de los
principales socios comerciales del país, había tocado máximos desde junio de
2021. Sin embargo, producto de la aceleración de la inflación y el tipo de
cambio fijado en $350, el efecto de la devaluación se consumió en un mes y
medio”, advirtió Ignacio Morales, analista financiero de Wise Capital.
Bonos y acciones
La Bolsa porteña
operó ayer en las 593.739 unidades, un alza del 5,8% frente al cierre anterior.
No obstante, al ajustar por el contado con liqui, el S&P Merval se
posicionó en los 656 puntos. En dólares, fue el valor más bajo desde comienzos
de mayo de este año.
Al observar el
panel principal, las acciones fueron impulsadas por la disparada de los tipos
de cambio financieros. La rueda fue liderada por Transportadora de Gas del Sur
( 10,1%), el BBVA ( 8,2%), Ternium ( 7,7%), Loma Negra ( 7,2%), el Banco Macro
( 7,1%), Cresud ( 7%) y Central Puerto ( 6,7%).
En tanto, los bonos
del último canje de deuda que operan en el exterior transitaron la rueda en
terreno negativo. Los Bonares se hundieron hasta un 2,51% (AL41D) y los
Globales, un 2,91% (GD29D).
En consecuencia, el
riesgo país trepó 62 unidades y se ubicó en los 2699 puntos básicos ( 2,35%).
Fue el valor más alto desde octubre del año pasado. |