Avanza, aunque sin
mostrar efectos, la recompra de deuda
Por Javier Blanco -
El Banco Central (BCRA) usó hasta ayer poco más de un cuarto del cupo de
dólares que el Gobierno le habilitó para llevar adelante el programa de
recompra de deuda.
Se trata del
programa, lanzado la semana pasada, con el que intenta evitar que la brecha
abierta entre la cotización del tipo de cambio oficial y la de los denominados
dólares financieros (legales) deje de ampliarse o lograr que caiga, algo –esto
último– que no está sucediendo.
Según datos
confiables a los que accedió la nacion de distintas fuentes, ya utilizó algo
menos de US$260 millones al cabo de las primeras cuatro ruedas en que dicho
plan se puso en vigencia, lo que habla de un promedio de recompra efectiva por
US$65 millones/día, inferior a los US$90 millones utilizados el primer día.
Aunque la operación
fue anunciada por el ministro de Economía, Sergio Massa, con el objetivo de
“mejorar el perfil de deuda y seguir bajando el riesgo país”, al estar muy
enfocado en los bonos globales de corto vencimiento (entre los que mencionó los
que caducan en los años 2029 y 2030) en el mercado interpretaron que buscaba
cortar la escalada del dólar bolsa o MEP –aquel al que acuden quienes buscan
cambiar moneda con otros inversores locales– y del contado con liquidación
(CCL), al que recurren las empresas que necesitan sacar divisas del país para
hacer pagos o remesas, por el efecto inflacionario que podría sumar, ahora que
el acceso al mercado cambiario oficial para los importadores quedó más
restringido tras la imposición del nuevo Sistema de Importaciones de la
República Argentina (SIRA).
“Es una jugada que
se entiende poco desde el punto de vista de la administración de los pasivos,
ya que se están recomprando bonos que pagan tasas bajas, vencen dentro de
algunos años y no generan compromisos de deuda importantes en lo inmediato. Así
que la sensación es que en realidad buscan contener la brecha cambiaria sin
salirse de las restricciones que impone el acuerdo con el FMI, que prohíbe al
BCRA la intervención sobre el tipo de cambio implícito en los activos
financieros”, habían explicado los analista de Facimex Valores tras el anuncio.
Esa lectura pareció
quedar confirmada por el “visto bueno” que la operación habría tenido de ese
organismo internacional, según dejaron trascender desde el Ministerio de
Economía tras reconocer que se había consultado a los técnicos que siguen el
“caso argentino” antes de lanzar la medida.
Según la versión,
la avalaron, aunque advirtieron que, al tratarse de una iniciativa aislada y de
poco volumen, no podían esperarse resultados contundentes, aunque podría ser
más positiva “en el marco de un plan más profundo vinculado al futuro de la
política cambiaria”.
Por lo pronto,
desde el lanzamiento del programa, que arrancó con fuerza el jueves pasado,
pero se fue desinflando con el correr de los días (el monto de recompras fue
muy bajo el viernes y lunes, confesaron fuentes del mercado, y apenas repuntó
algo ayer), el impacto que tuvo sobre la brecha podría decirse que resultó
nulo.
En el mercado creen
que parte de ello deriva de las investigaciones iniciadas por la Comisión
Nacional de Valores (CNV) para tratar de determinar si hubo quienes sacaron
provecho del uso de “información privilegiada” para operar en las horas previas
al anuncio y liquidar esas tenencias horas después, para capturar las
diferencias provocadas por el impacto que el anuncio de la medida tuvo en las
cotizaciones de esos activos en las primeras horas posteriores de operaciones.
Por lo pronto, la
brecha cambiaria “legal”, que estaba entre el 85% y 86,15% el día previo al
anuncio, resultó ayer ubicada entre el 90% y 94%, aunque sobre el final de la
rueda hubo fuertes transacciones con el GD30 para bajar algo tanto al dólar MEP
(quedó a $353,85) como al CCL (cerró a $360,80), según explicaron a La Nación
distintos operadores. |