Por Mariano
Jaimovich - La desaceleración de la inflación de los últimos meses pone la lupa
de los analistas en el plazo fijo tradicional, debido a que su rentabilidad pasó a ser
positiva respecto a los precios de la economía. Por lo tanto, se reabre el
debate respecto a si la tasa de interés que pagan estas inversiones
comenzó a ser la "ideal", o no, para convencer a los
ahorristas a volcarse por este instrumento en pesos en un período más
extenso.
Como dato a tener
en cuenta, el último dato de inflación oficial fue de 5,1% en
diciembre para el índice de precios al consumidor (IPC), una cifra que se
mantuvo en sintonía respecto al 4,9% de noviembre y que mostró cierta
desaceleración respecto al pico del 7,4% que tuvo en agosto del año pasado.
En cambio, desde
septiembre pasado la tasa de interés nominal del plazo fijo
tradicional se ubica en 75% anual (TNA), por lo que cada 30 días
representa una renta cercana al 6,2%. De esta manera, en los últimos dos
meses superó a la inflación.
"Si bien es algo positivo, está lejos de ser un buen
número, donde el 2022 cerró con una inflación de casi 95%, el mayor
aumento en más de tres décadas. A su vez, el futuro no es un camino exento de riesgos, donde mantener la inflación en niveles del 5%
parecer ser una tarea difícil", resume a iProfesional Roberto
Geretto, economista y portfolio manager de Fundcorp.
En este contexto,
expertos consideran que la "tasa ideal" debería
ubicarse más cerca del 6,5%.
Plazo
fijo versus inflación
Para considerar
cuál es el nivel actual de la tasa que paga el plazo fijo tradicional, se
debe analizar la proyección de inflación para todo este año. En base a ello, se
puede determinar en qué posición se encuentra la renta de las colocaciones
bancarias para el mediano plazo.
En el
último Relevamiento de Expectativas del Mercado (REM), que
confecciona el Banco Central en base a una encuesta entre economistas, se
proyecta que el incremento de precios para el 2023 se ubicará en niveles
del 99%. Esto es en base a un conjunto de supuestos como que se cumplirá el
acuerdo con el FMI y que se mantendrá al tipo de cambio oficial con la
devaluación administrada.
En tanto, un plazo
fijo minorista tradicional otorga una TNA de 75%, cifra que implica
una tasa efectiva anual (TEA), que es cuando se renueva todo el dinero
obtenido mes a mes durante un lapso de un año, del 107%.
"Este
porcentaje se ubica algo por encima de las expectativas de inflación del
2023, y también con lo esperado para los próximos 12 meses que coincide con el
año calendario", detalla Geretto a iProfesional.
Al respecto, según
este experto, el principal riesgo de un plazo fijo tradicional es el dólar
e inflación.
"Esto es porque tradicionalmente la tasa de
devaluación e inflación le han ganado a la tasa de interés. Así, a un período
más largo, son muy altos los riesgos de hacer un plazo fijo tradicional, algo
que explica por qué la mayoría de las colocaciones son a 30 días y por qué
realizar una comparación respecto al dólar e inflación
es mes a mes", explica Geretto.
En este sentido,
una opción natural para tener una garantía de cobertura contra la
inflación es el plazo fijo UVA, que en caso de un escenario en que los precios
de la economía aumenten 100% en un año, el retorno calculado medido en TEA
para este instrumento de ahorro sería del 102%, "estando algo por debajo
del plazo fijo tradicional", rescata el economista.
Tasa "ideal" para el plazo fijo tradicional
A la hora de
estimar cuál sería la tasa de interés "ideal" que debería pagar
un plazo fijo "común" en este momento para seducir a los
ahorristas, se deben tener en cuenta algunos aspectos centrales.
El dato concreto es
que una colocación bancaria hasta el momento compensa a la inflación
esperada en el corto plazo, aunque en algún mes particular pueda ganarle o
perder.
"Tanto
el dólar como la inflación presentan cierta
volatilidad y dificultad para su proyección a futuro. Por lo tanto, no
sólo un plazo fijo debe remunerar la expectativa de inflación, sino también
compensar el riesgo que se asume", subraya Geretto a iProfesional.
De ese
modo, bajo un escenario de una inflación estimada del 100%, el analista
considera que si se le agrega una prima de riesgo del 5%, la tasa del
plazo fijo, como mínimo, debería ubicarse en casi una tasa nominal anual
(TNA) del 78,67%, para obtener una TEA del 112,10%, equivalente a una renta
mensual del 6,47%.
"Esta última
cifra es el retorno equivalente a la de un plazo fijo UVA más 1% de
premio, bajo un escenario de inflación del 100%, al que se le agrega la prima
de riesgo del 5% por hacer el plazo fijo tradicional", aclara Geretto.
En resumidas
cuentas, la dinámica inflacionaria va moviendo los parámetros que se
deben tener en cuenta en todas las variables nominales de la economía, como
dólar y tasas de interés.
"Falta ofrecer
un poco más de tasa para otorgar mayores incentivos al ahorro en pesos en el
mediano plazo. Por supuesto que esto no es gratis, porque lleva a un mayor
déficit cuasi-fiscal, y además le genera un aumento en el costo para los
demandantes de crédito", concluye Geretto a iProfesional. |