Por Carlos
Arbia - El anuncio de la recompra de deuda
pública nominada en dólares por
el ministro de Economía, Sergio Massa, ha generado mucha
polémica y en particular un rechazo muy importante de los economistas
y políticos de Juntos por el Cambio, además de algunos economistas y analistas del sector privado.
Se trata de la
recompra de un total de un 15% de bonos en circulación de valor
nominal como el Bono Global 2029 (GD 29) y el Bono Global 2030 (GD30) dos
bonos muy requeridos por los inversores porque están nominados en dólares y
tienen legislación Nueva York.
Pero esa compra
podría ser mayor, porque en el comunicado difundido por el ministerio de Economía
se aclara que el Gobierno se reservará la chance de ampliar ese margen de
acción de acuerdo a si el mercado reacciona como se espera y en el futuro
mejoran las condiciones financieras.
Lo cuestionable de
la medida es que se gastaran reservas líquidas del BCRA para esas
operaciones pero lo incuestionable de la medida es que el BCRA está autorizado
a realizar esas operaciones de compras y ventas de títulos de mercado
abierto.
¿La
recompra de deuda de Massa esconde otra jugada del Gobierno?
También algunos
analistas del mercado local se preguntan si detrás de la compra de esos títulos
no se esconde otra jugada que estaría preparando el equipo económico, como por
ejemplo, utilizar esos bonos como garantía para pedir un préstamo
tipo repo a bancos internacionales. Se trata de una idea que estaba en la
cabeza del ministro Sergio Massa, cuando asumió a principios de agosto.
Esta sería una de
las explicaciones para salir a recomprar esos títulos de deuda con ley Nueva
York, ya que esos bonos son los únicos que se pueden utilizar como
garantía para un préstamo internacional por eso el BCRA habría decidido
pagar más en el mercado por esos títulos.
Por lo tanto, con
este tipo de operaciones, el equipo económico estaría buscando tres cosas
al mismo tiempo: reducir las operaciones de dólar CCL, que presionan a la
suba al dólar paralelo que luego del anuncio bajó de 379 a 376 pesos; bajar el
riesgo país, ya que si el precio de esos bonos sube, baja la tasa interna de retorno
del bono y (aunque en este caso subió porque la noticia golpeó a los
bonos más largos); y por último, la intención de utilizar esos bonos en el
caso de lograr un préstamo con bancos internacionales.
La otra noticia
negativa es que luego del anuncio, el BCRA tuvo cuatro ruedas consecutivas
de ventas de dólares, un fenómeno que no se observaba desde el 15 de
noviembre pasado. Desde el martes pasado vendió unos 148 millones de dólares
pero en enero tiene un saldo a favor de 137 millones de dólares.
El último informe
de Consultatio Plus destaca respecto a esta recompra que "el ministro
Sergio Massa desconcertó al mercado con el anuncio de una operación de recompra
de deuda en dólares y marcó una reversión marginal en la suba de
56%, que acumulaban los bonos desde los mínimos de octubre".
En relación a las
razones de la reacción negativa el trabajo explica que "las razones de la
reacción negativa están en la desconexión entre los objetivos declarados y los
instrumentos utilizados".
Además agrega que
"una perspectiva mas amplia permite comprender que lo que el Gobierno está
haciendo no es una administración de pasivos sino generar
instrumentos para poder intervenir en los tipos de cambio paralelos, su
verdadera y legítima preocupación a la hora de anclar expectativas inflacionarias".
Este traspié no
esperado por el mercado para la deuda soberana cortó una racha de nueve subas
consecutivas. En ese aspecto hay que destacar que la reacción inicial de los
activos argentinos fue lógica. Los bonos soberanos treparon entre 2/8% el
mismo día, empujando el precio promedio ponderado a un máximo de ocho meses en
33,9 dolares.
Sin embargo, el
jueves y el viernes devolvieron buena parte de las subas, ubicando el precio
promedio ponderado en 32 dólares, frente a los 30 dólares del cierre del martes
previo al anuncio. En lo que va del año, tanto los instrumentos cortos de
legislación extranjera como su versión local encabezan ampliamente la tabla de
retorno total.
Recompra de deuda: una medida que trae calma transitoria
Con respecto a los
movimientos del dólar paralelo y el dólar CCL luego de la medida, desde Portfolio Personal Invesment
manifiestan que no están muy seguros de que esta última medida de Sergio Massa
haya apagado el incipiente recalentamiento en los dólares financieros por mucho
tiempo.
"En ese
sentido, sugerimos prudencia a la hora de abrir estrategias de carry
trade. El contado con liquidación en su versión en la bolsa
moderó su avance, pero su referencia ajustada por los agregados monetarios
como el M3 privado todavía permanece alrededor de $428", explican.
No hay dudas para
la mayoría de los analistas de mercado consultados por Iprofesional
que este programa persigue la calma del CCL como objetivo principal.
"En nuestra
opinión, era poco lógico que el Gobierno renunciara a 15,5% de sus
reservas netas pasando por una de las peores sequías de las últimas
décadas, para intentar resolver un problema que caerá en la próxima
administración.
Los antecedentes y qué podría pasar tras la recompra de deuda
Recordemos que no
es la primera vez que Argentina recurre a este tipo de operaciones. Luego de la
reestructuración de la deuda en septiembre de 2020, el Banco Central
comenzó a comprar bonos con reservas netas en el mercado secundario.
"Desde octubre de 2020 hasta noviembre de 2021, estas operaciones de
mercado abierto alcanzaron un total de u$s2.725 millones" explican desde
Portfolio Personal Invesment.
No obstante, vale
aclarar que el efecto de esta medida es probable que sea transitorio. Por
lo tanto no habría que descartar un rebote en las próximas semanas, en
especial, ante la baja estacional de la demanda de dinero en febrero, los
números poco alentadores de la inflación de alta frecuencia en enero y una
sequía que se agrava ante la falta de lluvias.
Lo novedoso es que
en el mismo momento en el que el pasado martes el ministro Sergio Massa anunciaba
ese medida, el directorio del BCRA aprobaba una suba en la tasa de pases
pasivos que otorga a los bancos del 70 al 72 % nominal anual.
La autoridad
monetaria decidió elevar la tasa de Pases Pasivos a un día 200 puntos
básicos (pbs), de 70% de TNA (TEA de 101,2%) a 72% (TEA de
105,3%), modificando el esquema de tasas por
primera vez desde mediados de septiembre.
De esta
manera, el spread con la LELIQ de 28 días (TNA de 75% y TEA de
107,35%) se redujo a 300 pbs en TNA y 205 pbs en TEA, mínimo de
la gestión Pesce (el diferencial mínimo anterior en TEA había sido 494 pbs
el 13/11/20). Considerando que, tras este retoque, el Tesoro también elevó la
tasa de interés de la LEDE corta (260 pbs).
Lo paradójico es
que hace tan solo una semana, el jueves 12 de enero antes de la publicación del
dato de inflación de diciembre, se debatía en el mercado sobre si era
momento de un recorte de tasas.
Hay que recordar
que desde que Massa asumió como ministro, al BCRA no le tembló el pulso para
aplicar fuertes ajustes de tasa para disciplinar a los inversores (800 pbs el
28/07, 950 pbs el 11/08 y 550 pbs el 15/09). Por lo tanto, no
habría que descartar una suba en la tasas de interés de las Leliq desde su
actual nivel del 75% nominal anual. |