Por Liliana Franco - “Creo que la oportunidad de hacer un acuerdo entre los acreedores y el gobierno es ahora porque es lo mejor para los dos lados”, dijo Susan Segal, titular del Consejo de las Américas, en declaraciones a Radio Con Vos al referirse a las negociaciones entre la Argentina y los acreedores externos. Esta entidad recibió virtualmente ayer al presidente Alberto Fernández para exponer sobre la situación del país frente a inversores. Al mismo tiempo, trascendió un informe de Morgan Stanley que observa avances en las negociaciones y considera que estamos “acercándonos a un acuerdo”. Segal, una amiga de la Argentina desde hace muchos años, sostuvo que el primer mandatario fue muy claro al señalar que “ésta es la última oferta”. En este contexto, indicó que “no hay nunca un acuerdo perfecto” ya que siempre se trata de concesiones mutuas que no pueden dejar a ambos lados totalmente conformes. Consideró que la propuesta argentina es “razonable” al tiempo que elogio al presidente Alberto Fernández como una persona “pragmática” y que tiene una visión diferente en el sentido de integrar a Argentina a la región. La opinión de Segal tiene el peso de su experiencia ya que se desempeñó en el sistema financiero y fue negociadora de los bonos Brady. Manifestó las dificultades adicionales que derivan de la pandemia. Explicó que el coronavirus impide que las partes se reúnan de manera presencial y tomen todo el tiempo necesario para cerrar la negociación, como solía suceder en este tipo de discusiones. Por su parte, Morgan Stanley señaló en su último informe que: “Argentina quiere evitar un incumplimiento caótico que causaría más dolor a la economía” y también indica que mantiene “su visión desde hace mucho tiempo de que Argentina está dispuesta a pagar. A pesar de la retórica reciente de los funcionarios argentinos”. Aunque estima que “el gobierno considerará la contrapropuesta de los acreedores”. Pese a que el presidente y el ministro de Economía Martín Guzmán dijeron en diversas oportunidades que “esta es la última oferta”, la diferencia es tan reducida, que en medios internacionales insisten en que habrá “acuerdo”. Incluso algunos expertos de Wall Street llegaron a calificar la actitud de los 3 grandes grupos “como caprichosa” ya que oferta argentina mejoro sustancialmente (beneficiando en 15.000 millones de dólares a los bonistas con relación al primer propuesta). “Si bien no estamos seguros de sí la contrapropuesta será aceptada tal como es, estamos pensando que todavía hay algunas negociaciones por delante, sospechamos que nos estamos acercando a un acuerdo”. Más aún, puntualiza que “Después de haber recorrido un largo y sinuoso camino para llegar a donde estamos hoy, sería sorprendente ver que las partes se vuelven inflexibles ahora. Morgan Stanley calcula que la diferencia entre la oferta argentina y las pretensiones de los acreedores es de U$S 3 como adelantó Ámbito. Esta diferencia implica que Argentina pagaría a los bonistas unos U$S500 millones adicionales tanto en 2022 como en 2023 y 1.000 millones de dólares 2026 y 2027. |