Por Alejandro Rebossio - Ya hay dos grupos de fondos de
inversión extranjeros acreedores de la Argentina que han rechazado la propuesta
de reestructuración de la deuda que presentó el viernes pasado en Estados
Unidos el ministro de Economía, Martín Guzmán. La pregunta es ahora qué pasa.
La respuesta en la Casa Rosada es que sí hay margen de negociación, esto recién
arranca.
En el Ministerio de Economía afirman que ya están presentados las líneas
generales de esta propuesta de pagos, pero en los márgenes pueda haber espacio
para la negociación. Puede ofrecerse más pero dentro de los estrictos límites
de sostenibilidad de la deuda que fijó el FMI, en un guiño a Alberto Fernández.
No va a haber un cambio drástico de la oferta pero sí a esta la posibilidad de
que el Gobierno mejore un poco la propuesta de pagos a los bonistas, de manera
tal de convencerlos de su aceptación.
"No te vas a bajar del ring tras la primera piña",
dicen en Economía. Era previsible el rechazo, aseguran.
A diferencia de lo que fue la reestructuración de deudas de 2005, cuando los
tenedores de la deudas estaban muy atomizados, esta vez la deuda algo más
concentrada en fondos de inversión que su momento apostaron por el gobierno de
Mauricio Macri y después terminaron por él mismo condenados a una
reestructuración. Hasta el 22 de mayo, fecha en que debe hacerse un pago de
deuda con legislación extranjera, hay tiempo para evitar en default y convencer
a esos bonistas. Incluso puede mejorarse la oferta durante las tres semanas que
dure el periodo para aceptar el canje de deuda.
Ya de por sí la propuesta había sido mejor de la esperada por los acreedores
pero ellos piensan y saben que hay un margen de negociaciones y siguen tirando
de la cuerda. Veremos hasta dónde se llega y cómo se soluciona una quita que
aparentemente superaría al 65% y que los acreedores aceptan que sea del 50%. Es
un margen que difícilmente se pueda eliminar pero seguro se activará. No
sabemos si lo suficiente para acordar.
Pero algunos analistas consideran que no basta con prometer más pagos de la
deuda sino que debe explicarse el plan económico necesario para afrontar esos
desembolsos. "Hay margen para negociar pero es importante tener el modelo
de sostenibilidad de la Argentina, y no el mismo del FMI, que fue el que puso
al país al borde del default. La sustentabilidad tiene que ser completa,
incluyendo cómo se va a tratar toda la deuda", opina José Barrionuevo, ex
negociador privado de la deuda en 2005 y actual CEO de la consultora BrightHill
Capital en Nueva York. Es que también debe renegociar los bonos con legislación
local y la deuda con el FMI y el Club de París (grupo de países ricos).
"La parte más importante son las políticas fiscales y monetarias
consistentes que nos aseguran llegar al escenario planteado, especialmente ante
las enormes presiones en 2020 por la pandemia", completa
Barrionuevo.
|