Por Pilar Wolffelt - Desde septiembre, el Banco Central de la
República Argentina (BCRA) no toca el rendimiento del plazo fijo
tradicional. La última
vez, lo llevó al 75% (Tasa Nominal Anual -TNA), que equivale a una
Tasa Efectiva Anual (TEA) del 107%. Hasta ese mes, venía ajustando el
rendimiento de esos instrumentos de inversión cada 30 días desde comienzo de
año, pero en octubre cesó esa política y todo
indicaría que lo mismo sucederá en noviembre, sobre todo con el dato de
inflación que publicó el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC)
para el mes pasado sobre la mesa y pese al recalentamiento de los dólares
alternativos que se dio en los últimos días.
Entre martes y miércoles, el dólar blue saltó hasta los $304 para la
compra y $308 para la venta, el MEP cotizó $308,7 y $311 y el CCL alcanzó los
$323/$326,4. Esta
tendencia comenzó el martes, con un salto inicial de $8 en el blue y el
CCL hasta los $302 y $319 respectivamente, en tanto que el MEP subió $3 ese día
hasta los $302,20, y el miércoles se reafirmó con nuevas alzas en las tres
cotizaciones. Esto rompió la pax cambiaria que el Gobierno venía manteniendo
desde agosto de este año, tras la llegada de Sergio Massa al Ministerio de
Economía. Previo a eso se había registrado una corrida cambiaria en el marco de
la crisis ocasionada por la salida de Martín Guzmán de esa misma cartera. Y los
valores actuales de los dólares alternativos no se veían desde ese
momento.
Tal como indica
a iProfesional el director de CyT Asesores Económicos, "hasta el momento,
el Gobierno logró contener los tipos de cambios paralelos con la tasa de
política monetaria, que está por encima del 6% mensual", en línea con la
inflación de los últimos meses. Explica que eso ayudó a que muchos inversores
eligieran quedarse en pesos, pero asegura que eso se está dando vuelta en este
momento, en parte por el inicio de la temporada de compra de dólares para la
temporada de verano, pero también por un
empeoramiento en la dinámica de reservas del BCRA, que viene
con serias dificultades para comprar divisas desde octubre.
En este punto, cabe recordar que el BCRA elevó por última vez la tasa
del plazo fijo luego de que se conociera el dato de inflación de agosto, que
fue del 7%. En reacción a ese número, la autoridad monetaria aplicó una suba de
550 puntos básicos en el noveno mes del año. Ahora, según el
dato oficial, el índice de precios de octubre fue del 6,3%, en línea
con lo que esperaba el
Gobierno, pero por debajo de las proyecciones de gran parte del mercado,
que estimaba que se ubicaría entre un 6,5% y un 6,7%, y todo indicaría que esta
novedad confirmaría la decisión del BCRA de no tocar las tasas. ¿Por qué?
Sucede que, según explicó el mes pasado en un comunicado al respecto el
directorio del BCRA, la entidad presta especial atención a la evolución
pasada y prospectiva del nivel general de precios y a la dinámica del
mercado de cambio para definir este tipo de decisiones. En consecuencia,
teniendo en cuenta que en el último tiempo se observa una dinámica cambiaria calma
(más allá del salto
que se vio en los dólares alternativos este martes) y
que el rendimiento mensual del plazo fijo tradicional está en este momento
en el 6,25%, alineado con la inflación del mes, el Central considera que no es
pertinente hacer un nuevo ajuste este mes.
En consecuencia, lo más probable es que todas las tasas de la economía
permanezcan como hasta ahora:
Plazo fijo: las razones por las que el BCRA
no subirá la tasa
"Con una
inflación de alrededor de 6%, si bien sigue siendo un dato elevado, es más
entendible y lógico que no suba la tasa del plazo fijo que si hubiera
estado más cerca del 7%", evalúa al respecto el economista de Invecq Juan Pablo
Albornoz.
Y es que según explica Lorenzo Sigaut Gravina, economista de
Equilibra, en el 6,25% mensual, la tasa de política monetaria está
alineada con el dato de inflación de los últimos dos meses, que fue del 6,2% en
septiembre y del 6,3% en octubre. "El mes pasado, el BCRA mantuvo neutra
la tasa y el índice de este mes está justo como para no innovar", dice al
respecto.
Así, lo que es innegable es que hubo una mejora: mientras antes de
septiembre venían en un terreno negativo los rendimientos de los instrumentos
en pesos, ahora están en un terreno neutro.
Además, un hecho no menor en este sentido es que la TEA actual del
107% está en sintonía con la proyección anual de inflación del Relevamiento de
Expectativa de Mercado (REM), que es del 100%. Y, por otro lado, la núcleo en
septiembre y octubre dio 5,5% y Sigaut Gravina señala que "esto indicaría
que las presiones inflacionarias de fondo podrían estar más contenidas en el
último tiempo".
Tasa del plazo fijo: por qué el mercado cree
que debería subirla
Pero, para
Sebastián Menescaldi, economista de EcoGo, un dato llamativo es que el
ritmo de devaluación (crawling-peg) del dólar oficial se viene acelerando en el
último tiempo por encima del 6%. Así, según
su opinión, hubiera sido esperable que el BCRA llevara este mes la tasa un
poco más arriba del nivel actual, tan solo hasta el 76% para acomodarla en
ese sentido.
En igual sentido, Sigaut Gravina reconoce que, si el BCRA quisiera demostrar
que quiere atacar con mayor fuerza la inflación, podría subirla unos puntos y
ser más agresivo en ese sentido. Y es que, según apunta Albornoz, en un
contexto en el que la dinámica fiscal se agrava, como suele suceder en
diciembre cuando el gasto suele expandirse principalmente por el pago de
aguinaldo, podría ser una mala señal no subir la tasa.
Si bien muchos analistas de la City advierten constantemente
sobre el riesgo del incremento del déficit cuasi-fiscal, que viene atado a
la suba de tasa porque se incrementan los intereses de las letras de liquidez
que se encuentran en manos de los bancos y eso le insume un mayor costo al
BCRA, para Albornoz no es un tema tan grave y resalta que es
prioritario para el Gobierno seguir quitando presión de los tipos de cambio
alternativos y combatiendo la inflación con una política fuerte de tasas.
No obstante, por lo pronto, el Gobierno tendría decidido no avanzar en
ese camino y opta por ofrecerle al mercado un rendimiento neutro del plazo
fijo, que, según se viene viendo hasta ahora y, más allá del sacudón
que tuvo el blue y los dólares financieros en los últimos días, le
venía dando resultado para mantener la pax
cambiaria hasta ahora. |