Por María José Lucesole, La Cámpora
- El enfrentamiento entre Alberto Fernández y Cristina Kirchner vuelve a escalar.
El Presidente ya avisó que no concederá el aumento salarial de suma fija que el
viernes le exigió su vice en un acto de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM).
“No va a haber suma fija, no va a haber decreto; a lo sumo puede haber
algún bono para algún sector particular”, dijeron a la nacion fuentes de la
Casa Rosada.
Tras las críticas de Cristina Kirchner, su hijo Máximo le dedicó ayer un
durísimo discurso al Presidente. Lo llamó a desistir del proyecto de
reelección, al que calificó como “una aventura personal”. Y enfatizó: “La
política es responsabilidad, no es poner cara de víctima y de ‘yo no fui’”.
LA PLATA.– La campaña pública contra la reelección de Alberto Fernández
comenzó ayer desde el PJ bonaerense, bajo la conducción de Máximo Kirchner,
quien dejó claro que el partido dominante del Frente de Todos y no solo La
Cámpora responden solamente al liderazgo de la vicepresidenta Cristina
Fernández de Kirchner.
“Cristina presidenta” fue el coro de los congresales peronistas de la
provincia de Buenos Aires, reunidos en Mar del Plata.
“Gobernar no es una actitud individual, es del conjunto”, dijo en ese
marco el diputado en un claro mensaje al presidente Alberto Fernández. “No
puede volver a pasar otra vez en un frente como el nuestro que aquellos que se
valen de construcciones colectivas, una vez que llegan, inician una aventura
personal. El poder no es para poner cara de víctima y yo no fui”, fustigó en
referencia al proyecto reeleccionista de Fernández.
El líder de La Cámpora habló como opositor al proyecto oficial y le
reclamó a Fernández: “No distraerte cuando sos presidente. Concentrarte en los
problemas de la sociedad. Tengo la esperanza de que se den cuenta de que, así
como Cristina hizo todo lo que tenía que hacer en 2019 para salir del oprobio,
dejen de jugar a los tristes y a los ofendidos. Salgamos de esta situación.
Discutamos. Ofrezcamos la posibilidad de volver a soñar, por Perón, Néstor,
para adelante”.
Máximo Kirchner no fue el único orador en el congreso del PJ bonaerense.
La puesta en escena no sólo dio visibilidad al líder de La Cámpora. Más aún, la
agrupación buscó instalar a una compañera de fórmula de Axel Kicillof para las
próximas elecciones. Fernanda Raverta fue anfitriona en General Pueyrredón. Y
fue la mujer que habló antes que Máximo.
El gesto no fue casual. Hay dos nombres de mujeres en pugna que empiezan
a sonar para reemplazar a Verónica Magario, como parte de una negociación que
selle la unidad entre Kicillof, La Cámpora y los intendentes: la propia Raverta
-titular de la Anses- y Mariel Fernández, la intendenta de Moreno. La segunda
es la candidata de los alcaldes del Gran Buenos Aires y la actual
vicepresidenta segunda del partido, un cargo que ostenta detrás de Magario.
Las dos mujeres participaron del congreso partidario junto a Máximo
Kirchner. Las dos se subieron al escenario. Pero solo Raverta se paró y habló
antes que Máximo: la lectura de los intendentes es que, más allá de la
formalidad de los balances y la reelección de Fernando Espinoza como presidente
del congreso, el acto “fue para darle espacio a Máximo y posicionarla a Raverta
como vice del año que viene”, deslizó uno de los jefes comunales presentes a la
nacion.
En cambio, un funcionario de La Cámpora negó la versión y aseguró que
Raverta será candidata a intendenta de General Pueyrredón, con el objetivo de
enfrentar al actual jefe comunal, el cambiemita Guillermo Montenegro.
La cita comenzó con un almuerzo de algunos de los miembros del congreso
en el tradicional Hotel Provincial marplatense. Allí estuvo también el gobernador
Axel Kicillof, que no es parte del órgano partidario.
Luego el Congreso tuvo lugar en el Club Once Unidos, en el barrio Parque
Luro, en un estadio con capacidad para 2000 personas en las tribunas y algo más
del doble si se suma el campo de juego, donde históricamente jugó Quilmes de
Mar del Plata en la Liga de Básquet.
El titular del PJ bonaerense ensayó desde este escenario un discurso
duro con el Presidente. “Nosotros tenemos nuestras responsabilidades”, dijo en
tono de autocrítica a la alianza gobernante. “Claro que tenemos nuestras
responsabilidades. Tenemos que estar muy atentos”, advirtió.
“Hay que tener responsabilidad”, pidió Máximo Kirchner. “No puede volver
a pasar que aquellos que llegan al poder inician una aventura personal”,
remarcó. El kirchnerismo viene reclamando al Presidente que convoque a una mesa
política para resolver las diferencias de cara a 2023.
“A mí me llena de tristeza cómo está el país. Por delante tenemos un
desafío enorme”, reconoció en un pasaje de su discurso. Y aguijoneó: “Por ahí
están los ministros Katopodis (de Infraestructura), Ferraresi (renunciado
ministro de Desarrollo Territorial y Hábitat)”, dijo para que no pasara
inadvertida la presencia de dirigentes que hasta hace no mucho tiempo se
enrolaban en el “albertismo”. |