Por Liliana Franco - “Comenzó la casa de brujas”; “nos pegan para luego
negociar”;, son solo algunas frases que reflejan el malestar de las
grandes empresas por la falta de precisiones del gobierno respecto a qué tipo
de acuerdos quiere hacer en materia de precios. “Hace muy poco terminamos de
negociar Precios Cuidados y ahora hablan de congelar productos por cuatro
meses”, se quejan la mayoría por lo que consideran cierto grado de
improvisación. En tanto, en el Gobierno detectan subas de hasta 170% anual en
productos como el azúcar y han pedido que investigue la Comisión de Defensa de
la Competencia.
Las críticas de las empresas se concentran en los funcionarios Matías Tombolini, Secretario de Comercio y el
Subsecretario de Política y Gestión Comercial, Germán Carlos Cervantes.
Comentan que ambos funcionarios no se llevan bien y existen órdenes
contradictorias entre sí.
También se quejan de los “malos modos de Cervantes” y
afirman que este funcionario les hace recordar a los tiempos de Guillermo Moreno en la Secretaria de Comercio.
También se siente muy molestos con los escraches en las redes de los
aumentos de precios “como si las empresas fueran los causantes de
la inflación” y deslizan críticas hacia un sector protegido como es
el textil, que según el Indec, sus aumentos superan con creces a la inflación
anualizada –más de 100%- a septiembre.
En concreto, y según pudo relevar Ámbito, desde el anuncio
este lunes de Sergio Massa que anticipó
que habría un acuerdo de precios por cuatro meses (sin variaciones) y
que el control del cumplimiento se haría vía una aplicación en el celular, muy
pocas empresas fueron citadas para definir qué productos se sumarian a este
programa.
Por caso, algunas empresas comenzaron a recibir llamados de la Secretaria
de Comercio para preguntar qué productos podrían sumar al programa. A
otras les indicaron que vía mail les solicitaran qué productos quieren
que la empresa incorpore al programa. Y, otras han sido citadas
personalmente a la Secretaria.
La idea del ministro de Economía, es “acordar un sendero de precios” y rechaza que se hable de “congelamiento” pero para la
mayoría de las empresas, al ver el escrache que se lleva a cabo en redes están
haciendo dirigentes relevantes del gobierno, temen que el “acuerdo” sea más una “orden en la práctica”.
Las grandes empresas además se quejan del escrache porque caen en la
crítica “justos por pecadores”. Argumentan que los precios de los productos
industrializados al 17 de octubre subieron 6% en tanto las verduras el 12%.
Pero, en definitiva, la mayoría de las compañías se preguntan “¿cómo congelo el precio de un producto con los costos que suben
mensualmente entre un 7% a 8% mensual?
El argumento persuasivo que esgrimirán las autoridades de Comercio serán
los estudios que tienen donde demuestran han aumentado los márgenes de
ganancias. Argumento, que viene sosteniendo la propia vice
presidenta, Cristina Fernández de Kirchner, quién desde hace
tiempo cuestiona las ganancias empresarias y hoy por hoy, el principal sostén
de Massa.
Denuncias
La Secretaría de Comercio dio instrucciones a la Comisión Nacional de
Defensa de la Competencia para que inicie investigaciones por presuntas prácticas anticompetitivas con el fin
de “identificar una posible fijación de precios de productos de
consumo masivo mediante prácticas abusivas que lesionen al interés económico
general”, según información a la que tuvo acceso Ámbito. Entre las subas detectadas por el área se observa
que insumos de la industria de consumo masivo como el azúcar y el
vidrio registran aumentos interanuales de 170,1% y 103,6% (septiembre
22/septiembre21).
Las autoridades buscan determinar presuntas prácticas anticompetitivas
(Ley N° 27.442) en empresas vinculadas con la producción y comercialización de
productos de consumo masivo que hubieran aumentado precios durante el año 2022
como resultado de un abuso de su posición dominante en el
mercado. La Comisión de Defensa de la Competencia se expediría en 30 días, según señalaron fuentes oficiales.
La cartera cuenta con la información originada en el Sistema Electrónico de Publicidad de Precios Argentinos (SEPA),
creado por Resolución 12/2016. Todos los comercios que realicen venta
minorista de productos de consumo masivo están obligados a informar en forma
diaria para su difusión, los precios de venta al público de productos vigentes
en cada punto de venta.
Abarca a todos los almacenes, mercados, autoservicios, supermercados e
hipermercados, a excepción de las micro, pequeñas y medianas empresas (en este
caso, es optativa la incorporación).
Asimismo, mediante una plataforma informática de colaboración ciudadana,
los consumidores pueden acceder a la información brindada y comunicar las
eventuales inconsistencias respecto a la veracidad, claridad y oportunidad de
la información proporcionada por los comercios en el SEPA.
A partir de la información provista al SEPA, la Dirección de Evaluación
y Monitoreo de Precios (DEyMP) elabora informes que permiten un monitoreo
diario del nivel general de precios de alimentos y bebidas, perfumería y
limpieza.
Las autoridades observaron aumentos en los precios de los productos en
góndola que se encuentran por encima de la inflación
general y de otras variables que afectan a los costos de producción, como
materias primas y el tipo de cambio. Por su parte, el seguimiento que
hace la Dirección de Análisis de Cadenas de Valor de los principales insumos y
costos productivos arroja subas, para el acumulado de doce meses
hasta septiembre pasado, de 170,1% en azúcar, 103,6% en vidrio, 103,1% en trigo
, 99,0% en energía eléctrica y 95,6% en química básica.
Estas subas superan al incremento interanual del tipo de
cambio mayorista - 46,1%- como así también a los salarios 74,2% (en
este último caso, datos a agosto de 2022). |