Domingo 18 - Por Santiago Reina - Si bien el Banco Central (BCRA) viene planchando cada vez más el tipo de cambio oficial desde febrero, el deseo de cobertura en dólares sigue firme en un país con un amplio historial de crisis cambiarias, poca cantidad de reservas y escasas opciones atractivas para invertir en moneda local. En el marco de las restricciones para la compra de dólares tanto en el mercado oficial como en el segmento bursátil, los especialistas que dialogaron con Ámbito marcaron a las Obligaciones Negociables (ON) como el instrumento predilecto para invertir en “billete verde”. Las ON son títulos de deuda de empresas que suelen contar con algún tipo de garantía y una evaluación por parte de calificadoras de riesgo, por lo cual el inversor puede conocer de antemano las posibilidades de cobro del activo que está comprando. Los bonos emitidos en moneda estadounidense actualmente cuentan con una mayor liquidez que aquellos lanzados en pesos. “Los bonos corporativos en moneda dura son un gran instrumento de inversión para aquellas personas que quieran resguardar su capital y contar con un flujo certero en dicha moneda. En general estos bonos ofrecen un flujo trimestral de pago de interés y devolución de capital al vencimiento”, resaltó en diálogo con Ámbito Nicolás Lo Valvo, Sr. Analyst Investment Ideas en Balanz. Con la misma tónica, Francisco Odone, gerente de Inversiones de Quinquela Fondos, afirmó en conversaciones con este medio que "el mercado de ON en Argentina se ha vuelto atractivo en los últimos meses ya que ofrece rendimientos superiores a los comparables de la región y el riesgo de crédito está acotado por el bajo endeudamiento de las empresas". A la hora de armar la cartera, un informe de InvertirOnline (IOL) sugiere, en primera instancia, diversificar entre distintas ON “para mejorar la relación riesgo-retorno” y verificar la liquidez del instrumento “para tener salida en caso de no querer mantener el título hasta el vencimiento”. Paralelamente, la sociedad de bolsa recomienda que la inversión tenga una Tasa Interna a de Retorno (TIR) promedio superior al 6%. Vale remarcar que cuando el precio de un título baja en el mercado secundario, esto implica una mayor TIR suponiendo que la empresa abone todos sus compromisos al vencimiento. A pesar de las bondades de este instrumento, cabe recordar que entre mediados de septiembre y fines de febrero las empresas con vencimientos de deuda superior al $1 millón mensual solo pudieron acceder al mercado oficial de cambios por el 40% de sus obligaciones, debiendo reestructurar o cancelar con dólares propios el 60% restante por orden del BCRA. A partir de marzo, en un contexto de recomposición parcial de las reservas, la autoridad monetaria flexibilizó la medida, que ahora afecta a abarca a aquellos vencimientos superiores a los $2 millones y no afecta a las firmas que ya reestructuraron sus pasivos en 2020. Al respecto, Odone sostuvo que las empresas que tuvieron que refinanciar vencimientos "lo hicieron sin generar recortes de capital ni modificaciones sustantivas en las condiciones de emisión" y que "eso les permitió mantener una demanda sostenida y niveles de retorno menores a los del riesgo soberano en moneda extranjera". “Si bien ninguna empresa del conjunto de 40 alcanzadas tuvo dificultades para cumplir con lo determinado por la medida descrita, esta regulación de la máxima autoridad monetaria sienta un precedente de aquí en adelante. Esto implica un riesgo adicional al invertir en ONs, al margen de los riesgos propios inherentes a las características de este instrumento financiero”, advirtieron desde IOL. Teniendo en cuenta ese potencial riesgo, InvertirOnline muestra preferencia por los títulos que vencen entre 2022 y 2024 ya que los que vencen en 2021 están sujetos a posibles reestructuraciones por la normativa del BCRA mientras que los que caducan a partir de 2025 podrían verse afectados por nuevas restricciones para el acceso al mercado de cambios debido a los abultados vencimientos anuales de deuda en dólares que el Estado Nacional debe afrontar desde esa fecha. En función de las recomendaciones expuestas, IOL recomienda una cartera compuesta por cuatro ON: Arcor (RCC9), Vista Oil&Gas (VSC3), Capex (CAC2) y IRCP (RPC2). “Esta selección de ONs conjuga exposición a distintos negocios, vencimiento de las mismas entre 2023 y 2024, una TIR promedio en torno al 7% (suponiendo que se invierte el mismo monto de dinero en cada una de ellas) y con 3 de 4 con ley extranjera (lo que significa una mayor seguridad jurídica con respecto a aquellas de ley local)”, detallaron. Por su parte, Lo Valvo diferenció distintas opciones de inversión en función del perfil del inversor. “Para perfiles más moderados destacamos el bono de Pan American Energy 2027, que tiene un rendimiento del 5,5%. Luego, para perfiles moderados sugerimos tomar posición en créditos cómo Pampa 2023 o Telecom 2025 con rendimientos cercanos al 7%. Y por último, para quienes tengan un poco más de aversión al riesgo, recomendamos el bono de IRSA 2023 o Compañía General de Combustibles 2025 con rendimientos en torno al 9,5%”, expresó el analista. El experto acotó que para aquellos interesados en las ON, en Balanz tienen a disposición el fondo de inversión Balanz Ahorro en Dólares, que le permite a pequeños inversores acceder a bonos corporativos a los cuales no hubiesen podido acceder de manera directa por tema de láminas mínimas y volumen de operación. El rendimiento esperado del mismo se encuentra en torno al 7% con un mínimo de inversión requerido de solo u$s100. Mientras tanto, desde Quinquela Fondos ofrecen el fondo Quinquela Infraestructura, que destina el 60% de su patrimonio a instrumentos de deuda privada en dólares, con un rendimiento teórico del 8,5%. Las principales tenencias de ON del fondo corresponden a empresas del sector petróleo y energía. Las Obligaciones Negociables nominadas en dólares también pueden adquirirse con pesos. El inversor solo debe prestar atención a que los activos que se negocian en pesos tienen la letra “O” al final del ticker mientras que las que se negocian en dólares tienen la letra “D”. En el mercado secundario, las ON se compran como cualquier otro bono o acción. Para esto, los inversores deberán tener abierta una cuenta custodia, ya sea en un banco comercial o en una sociedad de bolsa. En el caso de las nuevas ON, existe un período de difusión en el cual los inversores pueden acceder a las características del instrumento previo a la licitación. En la licitación se debe respetar el monto de compra mínimo y la moneda de suscripción dispuesta para el instrumento mientras que la liquidación puede ser inmediata o puede efectivizarse unos días después de la licitación. |