Por Mariano Cuparo Ortiz - La industria siguió su recuperación durante diciembre, nuevamente de la mano del fuerte rebote en el sector de la construcción, de la maquinaria productiva y de la mayor demanda de aparatos de línea blanca y de autos, en parte como producto de la brecha cambiaria y las consecuentes expectativas de devaluación. En el último mes del año el sector fabril anotó una recuperación de 6,1% interanual, según los números del Índice Adelantado de Actividad Industrial CEP-Cammesa. En enero, además, volvió a pegar un nuevo salto. El Índice Adelantado CEP-Cammesa es una reponderación, realizada por el Centro de Estudios para la Producción (CEP XXI), del Ministerio de Desarrollo Productivo, de los números de consumo energético de las fábricas. Se trata de un indicador clave para predecir los niveles de actividad industrial. La mejora de 6,1% de diciembre implicaría, si se verifica en los datos del Indec que se publicarán en la primera semana de febrero, una mejora sustancial respecto al ritmo que venía trayendo la recuperación industrial. Además, para enero el Índice ya relevó una mejora de 15,5% interanual. El número es extraordinario. En ese sentido, cabe destacar que la comparación de enero 2021 contra enero 2020 tiene cierta incidencia del factor estacional. Es algo que suele ocurrir durante los primeros dos meses de cada año, ya que las empresas otorgan vacaciones o hacen paradas técnicas. Y a veces lo hacen en forma diferencial respecto al año previo. Así, todo indica que en enero del 2021 hubo menos vacaciones. Las plantas tendieron a no parar y la pregunta es si eso se compensará en febrero. La dificultad se resolverá cuando aparezcan los números del próximo mes y se pueda promediar el primer bimestre. El precio del dólar blue aporta demanda Diciembre también mostró cierta particularidad del factor estacional, en concreto en el sector automóviles, que fue uno de los tres que traccionaron a la industria al cierre del año. En diciembre del 2019 hubo más receso vacacional en ese rubro, tal como reconoció el CEP XXI. Por eso, esta vez el CEP XXI no publicó la variación desestacionalizada respecto a noviembre, aunque estuvo por encima del 1%. Aun así, se destaca la diferencia entre la variación interanual de 4,5% que mostró la industria en noviembre, según los datos del Indec, y el 6,1% que proyecta el consumo energético. Las claves volvieron a ser la construcción, la maquinaria productiva (traccionada por el agro, la propia construcción y la propia industria), los artefactos de línea blanca y los automóviles, donde la dinámica del dólar paralelo aporta algo de demanda, por la expectativa de devaluación. Todos ellos traccionan sobre otros rubros como la siderurgia. La dinámica es parecida a la que se vino observando en los meses previos, tal los números publicados por el Indec. De hecho, los que más crecieron en su demanda de energía eléctrica fueron la siderurgia, la metalmecánica y las automotrices. Entre las tres, tal como destacó el CEP XXI, explican el 25% del PBI industrial. |