Las cinco provincias más afectadas por los cierres fueron Chubut, con una tasa del 34%; Córdoba, con un 25,4%; Neuquén, con un 25,2%; Tierra del Fuego, con un 21,2%, y Santa Cruz, con un 18,8%.
Así surge del relevamiento realizado por CAME entre el 1° y el 18 de diciembre en 39 ciudades. Con un equipo de 33 encuestadores, se relevaron 82.629 comercios en 1500 calles. De ellos, 12.843 estaban cerrados y vacíos. Las más perjudicadas fueron las galerías comerciales, donde la tasa de cierre alcanzó al 23%.
Otro dato que surge del informe es que, en el promedio país, cerraron 9 locales por cuadra y la Patagonia resultó la región más afectada, con un 22,7% de locales cerrados. En cambio, el noroeste argentino fue la zona menos perjudicada, con un 11,5%.
Siempre según el informe de CAME, si se proyectan los datos del relevamiento a todo el país, habría un total de 90.700 locales vacíos y 41.200 pymes que cerraron y que empleaban a 185.300 personas.
Pero no todas esas pymes darán de baja su CUIT, sino que un porcentaje reaparecerá en la misma u otra actividad.
Por otro lado, si bien no pudieron cuantificar el fenómeno, explicaron que en las ciudades medianas y chicas, donde la gente se conoce, muchos locales y pymes cerraron y pasaron a la informalidad. Es decir que comenzaron a vender en sus casas o por redes sociales, aprovechando que sus clientes y la comunidad los conoce