En un nuevo informe
anual, la Comisión Económica para América
Latina y el Caribe (CEPAL) empeoró
el pronóstico de crecimiento para la Argentina con una caída del 3%
frente al -2% que había pronosticado en abril de este mismo año. Sin embargo,
para 2024 prevé una baja más moderada del 1,6%.
La situación
económica se aleja de la proyección oficial que había quedado plasmada en el
Presupuesto presentado el año pasado, que apuntaba a un crecimiento del PBI del
2%. En ese entonces, la CEPAL había mencionado la histórica sequía que afectó
al sector agropecuario, la inflación y los tironeos políticos como factores
principales.
El organismo dio a
conocer hoy su informe anual Estudio Económico de América
Latina y el Caribe, 2023. En él prevé que las economías de la región
mantendrán este año y el próximo bajos niveles de crecimiento, afectadas por
un panorama económico mundial negativo y regional muy
complejo.
Según el informe
-uno de los principales reportes económicos de la institución, que se publica
desde sus inicios en 1948- para 2023 se espera un crecimiento
del PIB promedio regional de 1,7%. En tanto, para 2024 se proyecta un
leve descenso en la tasa de crecimiento que llevaría al producto interno bruto
regional a aumentar un 1,5%.
De acuerdo con el
organismo regional de las Naciones Unidas, la dinámica de la economía mundial se mantiene en una senda de bajo
crecimiento económico y del comercio global. A pesar de las caídas en la tasa de inflación probablemente los países
desarrollados seguirán con sus políticas monetarias contractivas, por lo que no
cabe esperar una baja significativa en las tasas de interés externas
durante este año, y los costos de financiamiento para nuestros países seguirán
altos.
La deuda pública de
los países de la región, si bien ha bajado, permanece en niveles elevados
respecto al PIB, lo que, junto al aumento de las tasas de interés externas e
internas y a una caída esperada de los ingresos tributarios producto del menor
crecimiento, lleva a un limitado espacio fiscal para el conjunto de la región.
Además, se anticipa un menor dinamismo en la creación de empleo, y crecientes
demandas sociales.
El crecimiento
en la región
Para 2023, la CEPAL proyecta que todas las subregiones exhibirán un menor crecimiento respecto de 2022: América del Sur
crecería un 1,2% (3,7% en 2022), el grupo conformado por Centroamérica y México
un 3,0% (3,4% en 2022), y el Caribe (sin incluir Guyana) un 4,2% (6,3% en
2022).
Las proyecciones
para 2024 indican que se mantendría el bajo dinamismo económico en
la región. Se prevé que el contexto internacional continúe siendo poco
favorable, con un crecimiento del PIB y el comercio mundiales muy por debajo de
los promedios históricos. A su vez, en el ámbito interno se mantendrá el
reducido espacio de política fiscal, aunque la reducción en la inflación en
la región abre más espacio para la política monetaria en los países. Ante estas
circunstancias, se proyecta para 2024 un crecimiento promedio del 1,2%
para América del Sur, 2,1% para Centroamérica y México,
y 2,8% para el Caribe (sin incluir Guyana). |