Por Salvador
Vitelli - Con el correr de los días de julio se comenzaron a notar
ciertos desfasajes entre lo que el Banco
Central de la República Argentina informaba a prensa sobre su intervención en
el mercado de cambios, para
lo que luego se confirmaba por el mismo Banco Central.
La duda estaba
planteada en el mercado, pero no se sabía a ciencia cierta qué estaba pasando realmente, porque
la autoridad monetaria mal informaba su intervención, y
principalmente con números favorables para la entidad en los comunicados de
prensa.
Desde aquí se
intentará dar una descripción de lo que sucede y cómo analizar los futuros comunicados
del Banco Central.
El origen del problema
El 28 de junio
presenciamos el primer gran desvío de lo que sería una consecución de
datos confusos que generaban incertidumbre sobre cómo estaba resultando el
escenario cambiario para el Banco Central, y qué escenario se estaba
sucediendo.
A partir de allí los errores comenzaron a ser no solo más
frecuentes, sino que también hubo -acumulando por el
momento-, subestimaciones de intervención por u$s835 milllones.
¿Por qué se da esta
diferencia? Surge básicamente por una modificación, sin anuncio previo, en la
manera de comunicar las intervenciones del Banco Central en el mercado de
cambios, ya que anteriormente se informaba el dato a prensa de manera
unificada. Es decir, ya sea si se vendiera dólares o yuanes, se neteaba el
dato y se lo explayaba condensado en un monto en dólares.
Pero la
"yuanización" paulatina del mercado de cambios hizo que las
intervenciones de la autoridad monetaria pasen a realizarse
principalmente en dos monedas, dólares y yuanes. Hasta el momento, el
Banco Central ha utilizado yuanes por unos u$s3.600 millones (entre
intervención cambiaria y pago al Fondo Monetario
Internacional), de los cuales tiene aprobados para libre disponibilidad
u$s5.000 millones, y otro tramo autorizado para su uso (que no es lo mismo que conversión) por otros u$s5.000 millones. Además, el swap chino
es por u$s18.000 millones.
¿Qué significan
dichos números? Que desde mayo hasta el momento, se ha hecho uso por:
-72% de monto
autorizado de libre disponibilidad.
-36% del monto
autorizado hasta el momento.
-20% del monto
total del swap.
Solo en lo que va de julio, se han vendido yuanes por
u$s910 millones en intervención cambiaria, mientras que, si se analiza
solo el dato de dólares, el Banco Central resulta vendedor en u$s47
millones. Tamaña diferencia denota una clara voluntad del Banco
Central de liberar yuanes (a
costa de asumir deuda con el país asiático) en lugar de desprenderse de los tan
preciados dólares.
Por ende, para
poder analizar en correctos términos la intervención que debe hacer la
autoridad monetaria en el mercado de cambios para atender la demanda de
divisas, ya no solo se debe incluir el dato de dólares, sino ahora también el
de yuanes.
Allí se encontrará
la respuesta de cuánto le está costando al Banco Central mantener un tipo
de cambio como el actual, y al mismo tiempo, una breve mirada sobre
cómo se le está dando un rol interesante a
los yuanes en el mercado de cambios.
Yuanización del mercado de cambios
Se está asistiendo
a un desplazamiento de las operaciones realizadas en dólares, para
reemplazarlas por yuanes. ¿Por qué? Justamente porque dólares son los que
escasean -y mucho-. Las reservas netas se encuentran en torno a los
u$s7.300 millones negativas, y el Banco Central no para de desprenderse de
divisas todos los días.
Allí viene a ofrecer un "rescate" el Banco Popular
de China, bajo intereses propios lógicamente, ofreciendo un préstamo de divisas
cuyos términos se sitúan en una espesa nebulosa de sub-información, pero
que de todos modos permite dar cierto alivio temporal a la situación
actual a costa de empeorarla a futuro,
o por lo menos contraer un empréstito cuya devolución desconocemos si será
factible o conveniente económicamente.
Por ende, si bien
el escenario de dólares en julio no viene exageradamente mal, sí lo hace si se
analiza en términos netos, sumando la intervención vía la moneda asiática. En
tan solo 10 ruedas transcurridas de julio, se han vendido neto u$s950
millones, a pocos dólares de superar lo máximo vendido en el séptimo mes de
cada año con cepo.
Al mismo tiempo, de
manera implícita se fomentan importaciones desde China mediante estas
operaciones a sabiendas que, por el momento, la adjudicación de divisas al
menos es algo más flexible que si fuese en dólares. Recordemos que
el déficit comercial del presente año con el país asiático (en bienes)
acumulado hasta mayo fue de u$s3.150 millones.
En
definitiva, China le estaría financiando a Argentina sus exportaciones, o
bien Argentina solicitando un préstamo a China para poder importar desde allí.
Pero como cualquier empréstito, dicho obligación vencerá y Argentina deberá
pagar. ¿Cómo? Probablemente con dólares.
Mientras tanto,
aquí no solo se subestiman las ventas de divisas sino también las
consecuencias de financiar las mismas. |