Por Emiliano Galli - El cepo al comercio exterior en la Argentina siempre tiene una vuelta de tuerca posible. Lograr los permisos y
los dólares para importar es el mayor de los incordios para las
empresas. Pero no todo termina ahí.
Porque, no alcanza con lograr las SIRA, el
permiso que requiere el Gobierno para importar bienes, o las SIRASEs,
necesarias para cancelar servicios de transporte: esa parte
"exterior" del comercio se perfecciona con los requisitos para
autorizar la comercialización de esos bienes internacionales en el mercado
interno. Entra a jugar el "comercio interior".
Es el terreno de los "reglamentos técnicos",
es decir, las clasificaciones, certificaciones obligatorias de calidad y
requisitos formales que habilitan la comercialización final y que amparan desde
la seguridad y cuidado del consumidor y del medio ambiente hasta de la
industria nacional, por derivación.
Muchas veces, las empresas se "enteran" de
nuevos reglamentos técnicos en el temerario
apartado de "Observaciones" en una SIRA.
Importaciones:
empresarios alertan por demoras de hasta 120 días
En muchos casos, las importaciones "duermen"
en el puerto, o en depósitos fiscales y zonas francas, donde corre el
"reloj" de los costos de estadía.
Los plazos de certificación que antes tardaban
alrededor de 15 días (incluso en este mismo Gobierno) ahora se extendieron
a entre 30 y 90 días.
Pero más allá de la certificación, los de mayor
gravedad son los tiempos que demoran las excepciones, que pasaron de 30 a entre
90 y 120 días.
Algunos señalan casos donde "no sólo no
aceptan una certificación, sino que tampoco la rechazan ni piden subsanación, o
piden subsanaciones por el mismo tema o contenido, y hay que repetirlas. Y el
tiempo pasa sin definiciones", explicaron.
De esta manera, los reglamentos técnicos, que no
configuran un cepo al comercio exterior en sí, terminan impactando en los
ya elevados costos del comercio exterior y de las importaciones, como por
ejemplo, de bienes de capital o máquinas en general.
Mientras hace unos meses la logística podía
planificarse más o menos fácilmente al conocerse -y cumplirse- los plazos de
certificación o de aval de excepciones, hoy no hay forma de saber cuándo se
extenderán estos permisos.
"Estimamos que también es una práctica
atada al cuidado de las reservas", explicó un especialista en comercio
exterior, tras aclarar que "si no puedo desaduanar la mercadería, no me
asignan una fecha de pago definitiva en la SIRA".
Comercio
exterior y cepo: nueva traba frena importaciones
Estos expedientes y sus correspondientes
sellos son verdaderos "frenos" de mano al ingreso final de todo
tipo de bienes al mercado argentino. Y su poder de fuego reside en la
dilación de la fluidez operativa y logística que termina generando abultados
extracostos.
Y mientras una avenida del Estado avanza en la
ventanilla única del comercio exterior (VUCE) para cumplir con el mandato de
modernización y facilitación de los trámites, otra va en sentido contrario,
manteniendo el statu quo que obliga a recorrer las mesas de entrada y a
acumular sellos para avanzar. O a retroceder y volver a empezar.
El listado de productos con requisitos por
cumplir es extenso. Seguridad eléctrica, por ejemplo, abarca un universo
amplísimo de productos, lo mismo que cualquier artefacto a gas o combustión,
así como todo tipo de producto que vaya a estar en contacto con menores, desde
juguetes a bicicletas. Y de ahí la mira se amplía a neumáticos, acero,
insumos para el agro, autopartes…
"Hay una gran cantidad de reglamentos
técnicos que están parados o que enfrentan demoras. Encontramos rechazos
infundados de expedientes tanto para importadores como para la industria",
explicó una fuente consultada al respecto, tras agregar que los plazos de
aprobación se multiplicaron de manera exponencial: lo que antes era un
"trámite previsible" de entre 15 y 30 días, ahora es una incógnita
que puede insumir entre 90 y 120 días.
La Argentina cuenta con una Dirección Nacional
de Reglamentos Técnicos, a cargo de Zulma Cardoso, que depende de la Subsecretaría
de Políticas para el Mercado Interno que maneja Gustavo Faskowicz. Ambos, bajo
la tutela de Matías Tombolini, secretario de Comercio.
Los empresarios no sólo tienen que armar los
expedientes para lograr estas certificaciones exigidas por los reglamentos
técnicos. En muchos casos, lo más engorroso es tramitar las
"excepciones" cuando existen.
Vale la pena recordar que contar con estas
certificaciones o excepciones es condición necesaria, no para importar, sino
para nacionalizar las mercaderías importadas.
Varias empresas dan cuenta de que las autoridades del
área "no dan audiencias, no responden los mails. Rechazan
expedientes por la presunción de que se trata del escaneo de una fotocopia y no
de un original, o por errores ortográficos o de forma. Tenemos trámites de
certificación iniciados el año pasado que todavía no |