Por Solange Rial - En un golpe de timón en las últimas horas
antes del cierre de listas, Unión por la Patria consiguió
un conceso de mayorías y decidió que Sergio Massa sea el precandidato a
presidente del espacio. Pero el ministro de Economía no piensa
renunciar durante la campaña y estar al frente del Palacio de Hacienda le
supone una lista compleja de desafíos a sortear: concretar un nuevo acuerdo con el Fondo
Monetario Internacional que
permita mantener las reservas, moderar la inflación, y sostener la actividad
industrial.
Cabe resaltar
que durante mayo el IPC desaceleró al 7,8% desde el
exorbitante 8,4% del mes previo y ahora resta esperar qué sucederá durante
junio. Paralelamente, el Gobierno debía pagar
vencimientos al FMI por u$s2700 millones la semana pasada pero solicitó
unificarlos y cancelarlos a fin de mes, plazo que vence este viernes. Y
en cuanto a la actividad, el EMAE registró en mayo un
incremento de 0,3% frente a abril en la medición desestacionalizada
pero se estima que, en los meses siguientes, este indicador tenderá a
estancarse.
Primer desafío:
FMI
Consultado
por Ámbito, Claudio Caprarulo, director en
Analytica, opinó que "el escenario base es lograr un aval
institucional al incumplimiento de las metas de este año para eliminar la
posibilidad de un default, en el mejor escenario consigue
un desembolso superior a los vencimientos que permita robustecer las reservas
internacionales y reducir las expectativas de devaluación".
Por su parte, Camilo Tiscornia, director de C&T Asesores Económicos,
también consultado por este medio, consideró que "el desafío más
importante es con el FMI porque en la medida que se le pague, que la intención
del gobierno siempre fue pagarle, las reservas van a caer mucho". Al
respecto dijo que "es clave lo que se pueda acordar con el fondo
para obtener el desembolso prometido para estabilizar las reservas. Y,
eventualmente conseguir algo más, pero no tengo muy en claro que puedan
conseguir algo más con que Massa sea candidato".
Según
especulaciones, el desembolso llegaría hasta los u$s10.000 millones aunque,
en las últimas semanas, se especuló con que finalmente se concretaría pero dos
tramos. Por su parte, el lunes el viceministro de Economía, Gabriel
Rubinstein, afirmó que "esta semana habrá grandes avances con el Fondo
Monetario Internacional al salir de la reunión de gabinete económico que
el ministro Sergio Massa encabezó en el Palacio de Hacienda.
Segundo desafío:
inflación
Según el IPC GBA
Ecolatina, en junio se habría sostenido la moderación inflacionaria. "Este
dato se verificó en la segunda quincena de mayo. En la medición de la primera
quincena de junio la cifra nos marcó un 7,4% mensual pero para finales de junio estamos esperando un número cercano al 7%",
le dijo a este medio, Santiago Manoukian, jefe de
Research en Ecolatina, pero aclaró que no prevén que esta tendencia se
sostenga el resto del año.
"En un marco
del régimen inflacionario actual que no se consolida en pisos más elevados sino
que es inestable y que carece de anclas, las fluctuaciones son parte de
la naturaleza de un proceso que no es uniforme en el tiempo",
amplió Monoukian y añadió: "La arraigada inercia inflacionaria que estamos
viviendo se ve alimentada por una mayor indexación y acortamiento en el plazo
de los contratos con un tipo de cambio oficial que tiene que
moverse en línea con la inflación para no generar un mayor atraso cambiario".
En cuando a los
salarios, el economista explicó que van a seguir ejerciendo presión para
recuperar el terreno perdido. "Sobre
la base de la falta de credibilidad en el equipo económico para gestionar
expectativas, las tensiones sobre la brecha cambiaria en un marco de exiguas
reservas internacionales y la elevada incertidumbre electoral van a mantener el
proceso inflacionario en lo que resta del mandato. Difícilmente
este año pueda perforar el 135% anual", cerró Monoukian.
Para Caprarulo,
"la clave está en el tipo de cambio oficial y los paralelos. Si consigue evitar otro salto en ambas cotizaciones puede
estabilizar el aumento de precios entorno al 8% mensual hasta diciembre. Un
escenario claramente malo pero que hoy no es claro que sea el peor".
"La inflación
está atada al tipo de cambio y es una de las cosas que más va a insistir el
FMI. Está muy atrasado y la intervención del Gobierno en los distintos tipos de
cambio es un tema central", le dijo a este medio Tiscornia. "Los resultados en la inflación van a estar condicionados a
lo que Sergio Massa acuerde con el FMI en materia cambiaria",
amplió.
"La inflación
tiene un piso bastante alto; hoy en día el tipo de
cambio oficial se está moviendo arriba del 7% y faltando dólares parece muy
difícil que lo puedan atrasar mucho más para tratar de contener la
inflación (que no va a estar muy lejos de ese valor). Además, hay mucha emisión
monetaria para financiar el déficit fiscal", cerró.
Tercer desafío:
actividad
Por el fuerte
impacto de la sequía, desde el Gobierno proyectan que se
perderán exportaciones por más de u$s20.000 millones y esto tendrá su impacto
directo en la actividad económica.
"El gran merito de Massa es haber evitado hasta ahora una fuerte
recesión a pesar de la falta de dólares que generó la sequía. Para
eso llevó al límite las variables económicas, para el segundo semestre vamos
a ver una desaceleración en el nivel de actividad entonces la clave
estará en que el gobierno la administre para que la perdida de puestos de
trabajo sea la menor posible", opinó Caprarulo.
Por su parte,
Monoukian, aseguró que para fin de año proyectan en la
consultora una recesión determinada por el impacto directo e indirecto de la
cosecha por la sequía. "Directo en el sector agrícola e
indirecto por las actividades que están asociadas y por la menor provisión de divisas que genera el sector exportador y
que permite que puedan importar otros sectores como la industria y el comercio"
amplió. Como consecuencia, estiman que el gobierno continuará
con las restricciones a las exportaciones y eso tiene su correlato en la
actividad.
Sin embargo, desde
Ecolatina, sostienen que habrá sectores que tendrán una
performance superior al promedio como el sector automotriz, oil and gas,
y que, además, el consumo "muestra una mayor resistencia a la esperada por
una propensión marginal a consumir que es muy elevada pero que tiene como
contracara una tasa de ahorro muy baja".
Por último,
Tiscornia, coincidió en que la sequía "fue muy
fuerte" y que se va observar en los datos del segundo semestre. "El
primer trimestre mostró una recuperación del PBI llamativa, pero el segundo
trimestre va a ser bastante malo. Desde el punto de vista
de la macroeconomía está bastante jugado el año. No tienen mucho
margen para bajar las tasas de interés ni para expandir. El fondo va a pedir
algo en la parte fiscal y es probable que se plantee un ajuste a fin de
año", cerró. |