Sin detalles, el Gobierno habló de “grandes avances” con el Fondo

Por Francisco Jueguen - En su estreno con el doble traje de ministro de Economía y candidato presidencial por el oficialismo, Sergio Massa eligió mostrarse ayer por la mañana en plena gestión, con todo su equipo y en una reunión ampliada en el Palacio de Hacienda. A la salida, el viceministro Gabriel Rubinstein fue el encargado de dejar algunas pistas sobre lo que se venía adelantando la semana pasada: que el acuerdo por la quinta revisión del programa de facilidades extendidas (EFF, por las siglas en inglés) estaría por cerrarse en los próximos días.

“Esta semana habrá grandes avances con el Fondo”, aseguró el economista. Sin embargo, no hubo detalles sobre el supuesto anticipo de US$1900 millones que iba a pagarse ayer ni sobre un posible viaje del equipo económico a Washington. Tampoco precisiones sobre si finalmente un staff level agreement –lo que busca Massa con el Fondo– finalmente sumará o no desembolsos de dólares que logren sostener la estabilidad cambiaria durante las elecciones y, lo que es igual de importante, cuáles serán las condiciones que impondrá el FMI.

consultó ayer al organismo la nacion sobre el supuesto pago del anticipo que habían prometido cerca del ministro como un “gesto” al directorio. En el Fondo no respondieron las preguntas. La semana pasada, Economía consolidó vencimientos de deuda por US$2700 millones al próximo viernes. Cerca de Massa prometían pagar US$1900 millones antes de ese día. “Empezamos el trámite”, dijeron ayer a este medio.

“Vamos a avanzar en todo lo que es la finalización del acuerdo. Y el ministro muy probablemente dará una conferencia cuando se concrete”, agregó ayer Rubinstein.

El secretario de Finanzas, Eduardo Setti, afirmó, en tanto, que esta semana seguirán trabajando para llegar a un acuerdo con el FMI y aseguró que la precandidatura presidencial de Massa es bien recibida en el mercado y en el organismo internacional. “El viaje no lo tenemos definido. Se estuvo trabajando todo el fin de semana, hasta anoche [por anteanoche], y fue muy importante, hay mucho optimismo”, señaló el funcionario. Setti agregó que “el Fondo ve con muy buenos ojos al ministro candidato”, y sostuvo que “si se cierra el acuerdo van a ir arreglándose distintas variables de la macroeconomía”. El secretario de Finanzas dijo que “esta semana será muy importante, se va a seguir trabajando con el Fondo Monetario y somos muy optimistas”.

“Esperamos cerrar un buen acuerdo con el Fondo Monetario que traiga alivio”, remarcó Setti, y aseguró que, tras la designación de Massa como precandidato a presidente, en el equipo económico están “tranquilos, enfocados en la gestión”. Luego agregó: “Creo que eso el mercado lo palpita muy bien”.

El director general de Aduanas, Guillermo Michel, aseguró que hubo un momento en que, desde la gestión se empezó a “encaminar la estabilización de la economía”, pero sostuvo que luego sobrevino “la sequía, que afectó ese desarrollo”. El Gobierno culpa a la falta de agua por el salto que tuvo la inflación interanual desde julio pasado, cuando rondaba el 70%, al 114% que mostró en el último IPC del Indec.

Luego cuestionó a la oposición: indicó que “con la mitad del problema de la sequía, el gobierno anterior “tomó irresponsablemente” un préstamo de US$44.000 millones con el FMI. “No vamos a endeudar a los argentinos ni a sus hijos. Vamos a trabajar de manera responsable con las divisas. Nuestro trabajo es estabilizar la economía y lo estamos haciendo”, remarcó, pese a que la deuda, según datos oficiales, sigue creciendo y casi alcanzó los US$400.000 millones. Mucho de ese pasivo en pesos está ajustado a la inflación o la devaluación.

El Ministerio de Economía viene negociando desde hace meses la posibilidad de un adelanto de desembolsos de hasta US$12.400 millones, lo que incluiría US$10.600 millones de junio a diciembre y US$1800 millones de 2024, según fuentes de Economía. Las mismas fuentes indicaron que se haría en dos tramos, uno en junio y otro en septiembre. Esos dólares, aclararon, podrían usarse para intervenir en el mercado cambiario (más allá de pagar la propia deuda del Fondo) de acuerdo con “márgenes” que no fueron especificados.

Para que, en medio de una fuerte sequía que dejó sin reservas el Banco Central (BCRA), un importante impulso dolarizador por los comicios y con una fuerte brecha cambiaria, el FMI no pierda en intervenciones sus dólares, en Economía sugirieron la posibilidad de una devaluación fiscal (la suba de impuestos a bienes y servicios importados). Se busca, de esta manera, evitar una devaluación brusca, algo que Massa acordó no hacer con la vicepresidenta Cristina Kirchner. Además, el Fondo reajustará sus metas de déficit fiscal, emisión monetaria y acumulación de reservas.