PEKÍN.– El ministro de Economía, Sergio Massa, cerró un acuerdo con el
Banco Popular de China (PBOC) para renovar por tres años el swap que tiene con ese
país –vencía en agosto– y además amplió los fondos de “libre disponibilidad”.
A partir de ahora, podría usar los US$ 5000 millones que ya tenía en las
cuentas del Banco Central (BCRA), supuestamente intactos, y, luego, sumar el
uso de otros US$ 5000 millones, precisaron fuentes del Palacio de Hacienda. Para
acceder a la ampliación, el país primero tendrá que hacer uso del primer tramo
de libre disponibilidad y así, con acuerdo de ambas partes, podrá acceder al
segundo por el mismo monto. China prefiere que esos fondos se utilicen para
financiar el comercio que la Argentina tiene con ese país. De hecho, la
comitiva que acompaña a Massa dio señales para empujar al yuan como moneda en
el comercio. Las fuentes oficiales dijeron que el BCRA está trabajando en un
mercado de futuros para la moneda china. La internacionalización del yuan es un
objetivo geopolítico de China en su pelea global con EE.UU. y el dólar. Consultados
por La Nación sobre si es posible o no usar esos yuanes para comprar dólares,
tanto en el Banco Central (BCRA) como en el Ministerio de Economía aseguraron
que ese aval está en el contrato. Sin embargo, especialistas que conocen el
BCRA desde adentro desconfían. “Te tienen que autorizar convertir yuanes a
dólares. No es automático. La conversión la hacen en Hong Kong. No pueden
contar la tasa que pagan porque nunca se lo dieron”, cuestionó una fuente, que
recordó que Federico Sturzenegger, durante su gestión en el BCRA en el gobierno
de Mauricio Macri, compró US$ 3500 millones el 16 de diciembre de 2015 y que
los devolvió tres meses después sin usar ninguno de los dólares.
“Creo que lo que lograron es que los dejen decir
que se amplió a US$10.000 millones el monto que pueden usar. La forma en que se
puede usar no creo que haya cambiado. Es de a poco para pagar importaciones de
China”, agregó
otro hombre que también pasó por la entidad monetaria.
“Llegamos con una pistola calibre 22 y nos vamos con una 45 con cargador
completo”, exageraron en la comitiva que acompaña al ministro de Economía, sobre
todo teniendo en cuenta la frágil situación de las reservas del BCRA. “Esto
nos da estabilidad macro y sirve para proteger las reservas”, agregaron.
La posibilidad de usar el swap de monedas de China está atado a que no
se caiga el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI). Ese país tiene
una silla importante en el directorio del organismo. “Estamos avanzando con
el Fondo”, dijeron en esta ciudad, cerca de Massa, que por estas horas iba
a encarar una videoconferencia para tratar la reconfiguración del Programa de
Facilidades Extendidas (EFF, según las siglas en inglés). Es probable,
agregaron las fuentes, que en 10 días Massa viaje a Washington.
En la capital de EE.UU. está esperando la aprobación de un front loading
–adelanto de fondos– con habilitación para la intervención parcial en el
mercado cambiario. Massa pide poder usar el 60% de los fondos que se adelanten;
el Fondo habilitaría el 20%. Además, según se supo en esta ciudad, está
negociando la posibilidad de “reforzar las partidas presupuestarias” con
el objetivo de mantener con vida la actividad en el proceso electoral y en
medio de la fuerte sequía que afectó al campo- El presidente del BCRA, Miguel
Pesce, fue el encargado de firmar la renovación anticipada del swap por 130.000
millones de yuanes (unos US$ 19.000 millones, según la cotización) por el plazo
de tres años.
“Asimismo, se inició el procedimiento de ampliación
del monto de uso por otros 35.000 millones de yuanes (US$5000 millones). Dicha
ampliación operará una vez que se agote el primer tramo de ampliación de uso
para el intercambio comercial entre ambos países y por acuerdo de las partes.
De esa forma, se aumenta de 35.000 millones de RMB (renminbi) a 70.000 millones
de RMB la capacidad de uso”, se indicó.
La suscripción fue concretada por el presidente del BCRA luego del
encuentro con el presidente del PBOC, Yi Gang, en la sede del banco en Pekín.
Massa le regaló, como sucedió con otros funcionarios chinos, una camiseta de la
Argentina. No solo por la Copa del Mundo obtenida, sino porque el 15 de junio
la selección jugará en esta ciudad. Estuvieron allí el ministro de Economía; el
embajador argentino en Pekín, Sabino Vaca Narvaja, y el secretario de Asuntos
Económicos y Financieros Internacionales, Marco Lavagna.
El primer acuerdo entre ambos bancos centrales fue establecido en 2009.
Aquel no permitía la intervención en el mercado cambiario y se firmó,
cuestionaron, con superávit con China. En 2014 fue firmado un segundo acuerdo,
que sí permitía la intervención (comprar dólares con yuanes), que fue renovado
en 2017 y complementado a fines de 2018 con un convenio suplementario. En
agosto de 2020 se firmó el acuerdo que ahora se renueva y que se amplía,
dijeron fuentes oficiales en Pekín.
“Necesitamos hacer un buen uso de los instrumentos. Es la mejor forma de
crear confianza”, dijeron, y agregaron: “La posibilidad de activar (el segundo
tramo de libre disponibilidad) es que no se haya hecho un mal uso”. Esto
implica que el gobierno chino prefiere que los yuanes se usen en el comercio
exterior. Los yuanes, el primer tramo de US$ 5000 millones, están
depositados en una cuenta del BCRA. Todavía no se recurrió a esos fondos. “Si
usamos los yuanes para el comercio, no usamos dólares”, dijeron en la
comitiva oficial. Contaron que ya hay US$ 1470 millones de SIRA (permisos de
importación) aprobadas. Ratificaron, no obstante, y ante la duda del mercado,
que pueden cambiar esos yuanes por cualquier moneda.
Ante la consulta de los medios presentes en esta ciudad, fuentes
cercanas a Economía y al BCRA repitieron dos cosas. La primera, que la tasa de
interés del swap es menor a la que se paga por el préstamo del FMI. La segunda,
que no dirán cuál es el costo de financiamiento. “Es confidencial”, justificaron.
“Son los verdaderos dólares líquidos que van a permitir pasar este año“,
confiaron sobre el swap fuentes oficiales que siguieron la negociación. “El
PBOC te desembolsa yuanes y vos los cambiás en el mercado por dólares. Vas
cambiando cuando necesitás, y algo usás en yuanes para el comercio bilateral.
Es más parecido a un descubierto en cuenta corriente que a un préstamo
tradicional”, explicaron
cerca del BCRA. |