Por Carlos Lamiral - Una vez más el Ministerio de Economía apelará a
la colaboración de los bancos para poder pasar vencimientos de deuda más allá
de agosto, un momento clave
para los mercados porque ahí se definen los candidatos para las próximas
elecciones presidenciales, y junto con ello, se aclara el escenario para los
inversores en moneda local. Precisamente, este lunes la Secretaría de
Finanzas pondrá sobre la mesa nueve instrumentos financieros de los cuales hay
tres que ya entran de lleno en la próxima administración. Se trata
de dos bonos que expiran en abril y septiembre de 2024 y un título que hace lo
propio en junio de 2025. Con este tipo de colocaciones el Gobierno ha logrado estirar
el horizonte de vencimientos desde los tres meses y medio promedio a ocho y
medio, algo que lucía muy difícil hace tres meses.
En el marco de la
segunda licitación del mes vencen $447.000 millones. De cubrirlos
(en el mercado se espera que así ocurra), el Gobierno ya habrá superado el
tramo mas complicado del año en término de compromisos en moneda local. Los
vencimientos más pesados en manos de tenedores privados ocurrieron hasta aquí.
A partir de junio la participación de los propios organismos del Estado cobra
protagonismo y, por ello, en el Palacio de Hacienda se espera poder refinanciar
lo que queda sin mayores problemas.
En el menú de
instrumentos que no forman parte del programa de Creadores de Mercado, Economía ofrece dos bonos vinculados al dólar, al 30
de abril de 2024 y al 30 de septiembre de 2024, y un Bono ajustable por CER (BONCER atado a la
inflación) al 18 de junio de 2025. Este
último ofrece la posibilidad a las entidades financieras de constituir encajes de depósitos y por ello
tienen una alta demanda aunque su rendimiento puede ser inferior a otras
opciones.
Por otro lado, se
pondrá a disposición de los Fondos Comunes de Inversión (FCI) una Letra de
Liquidez (LELITE) al 16 de junio que sale con una tasa del 142% efectivo anual. El resto de los
instrumentos determinarán la tasa en la licitación.
Entre los
instrumentos que integran el Programa de Creadores de Mercado (cuentan con
segunda vuelta de colocación el martes por hasta un 30% extra a lo colocado en
la primera ronda), se ofrecerán Bonos del Tesoro ajustables
por CER (BONCER) al 13 de agosto, tres Letras ajustables por CER (LECER) al
13 de agosto, 18 de septiembre y 23 de noviembre y una Letra vinculada al dólar
(LELINK) al 31 de octubre, siempre de este año.
Al igual que en la
primera convocatoria, hace una semana, la Secretaría de Finanzas (que encabeza
Eduardo Setti) no está ofreciendo Letras del Tesoro con descuento (LEDES). Este
instrumento financiero está cotizando en los mercados secundarios a tasas
efectivas del 150% y es visto como referencia para el corredor de política
monetaria del Banco Central.
Aunque en el
mercado se confía en que el Gobierno va a estar en condiciones de conseguir al
menos unos $90.000 millones por encima de los vencimientos (120% neto), también
es cierto que existe una fuerte participación de organismos del Estado en estos
llamados.
El Banco Central
les compra las tenencias a estos organismos y les provee de liquidez, que usan
para comprar nuevos bonos del Tesoro. La consultora Eco Go, que dirige
la economista Marina Dal Poggetto, sostiene que en lo que va del año los
privados han retirado unos $500.000 millones de exposición al sector público.
En el anterior llamado de mayo, en el que vencían $580.000 millones y se logró
un neto de $770.000 millones, la consultora estima que se fueron $116.000
millones de privados. También estima que la participación de privados que no
son bancos en las licitaciones no supera el 45%. Otra consultora, 1816, estima
que el total de financiamiento neto del gobierno hasta ahora ($930.000
millones) fue aportado de modo indirecto por los organismos estatales que a su
vez fueron financiados por el Banco Central. |