Por Mirta Fernández - El Banco Central hilvanó este martes trece jornadas consecutivas de compra de divisas en el mercado único y libre de cambios (MULC), aunque el escenario cambiario sigue siendo crítico por la dinámica de las reservas internacionales que en la víspera cerraron en u$s 33.062 millones, el nivel más bajo de los últimos siete años. Pero más preocupante aún es el stock de reservas netas que ya son negativas por entre u$s1.500 y u$s1.800 milllones, frente a los u$s9.098 millones con los que concluyó el año pasado. Y más ácida aún la cuenta sobre las reservas netas líquidas -si se descuenta oro y DEGs- que son negativas en u$s7.376 millones, según las estimaciones del grupo en Invertir en Bolsa. Los analistas vinculan el mayor deterioro que muestran las reservas, pese a la racha compradora del BCRA en mayo, a la intervención que viene llevando adelante la entidad monetaria en el mercado de bonos para mantener contenidos a los dólares financieros por la cual se quemaron más de u$s700 millones desde el 25 de abril. En este marco, el BCRA volvió a reforzar el cepo cambiario, para achicar la demanda de divisas en el MULC, lo que se evidencia en una baja importante en el volumen operado en contado, en tanto que Economía negocia con el FMI el adelanto de los desembolsos previsto para el resto de 2023, y busca ampliar el swap con China, con el fin de reforzar las reservas. Reservas: BCRA alarga racha compradora El BCRA registró este martes un saldo positivo neto de u$s14 millones por su intervención en el mercado cambiario para abastecer la demanda, con lo cual volvió a aminorar el ritmo comprador, y es el monto más bajo de las últimas ocho rueda, desde el 11 de mayo último. Fuentes del mercado indicaron que en la jornada "se registraron pagos de energía por u$s50 millones". La entidad monetaria extendió así una racha compradora por trece jornadas seguidas, tras haber finalizado la semana pasada con compras netas por u$s304 millones. De esta manera, el BCRA acumula en mayo compras netas en alrededor de u$s196 millones, lo que supera el resultado de abril que cerró con un resultado favorable de apenas unos u$s33 millones. El operador Gustavo Quintana, de Pr Cambios, destacó que ese saldo es superior en "casi cinco veces al resultado del mes anterior". "En una semana acotada por los feriado de jueves y viernes próximo, no existen expectativas de cambios significativos en la mecánica del mercado y todo se reduce a estimar cuánto podrá comprar la autoridad monetaria teniendo en cuenta la proximidad del final de parte del programa de estímulo agroexportador que ocurrirá el 31 del mes en curso", comentó. El BCRA acumula en lo que va del año un monto de ventas netas en torno a u$s2.772millones. Dólar agro: desaceleró liquidación Los agroexportadores liquidaron este martes divisas por u$s66,017 millones a través del dólar agro, lo que evidencia una desaceleración en el ritmo frente en relación a los 94,2 millones de la jornada anterior. De esta forma, la liquidación bajo el esquema del dólar agro desde su debut el 12 de abril -cuando se registraron las primeras operaciones- alcanza a unos u$s3.202 millones. A tan solo cuatro jornadas hábiles de que finalice el dólar soja 3 que concluye a fin de mayo, el monto cosechado es inferior al objetivo del Gobierno que aspiraba a conseguir u$s5.000 millones con esta medida. En ese sentido, Andrés Reschini, analista de F2 Soluciones Financieras, consideró que "es altamente improbable que el dólar agro consiga los u$s5.000 millones de target establecido por Economía para fin de mayo" .Y es que tendrían que liquidarse por rueda unos u$s450 millones y nunca llegó a tanto. "El promedio por rueda es de u$s26 millones desde la primera liquidación y de u$s 61 millones la semana pasada", indicó. Por su parte, Salvador Vitelli, destacó que el BCRA "pudo retener pocas divisas" de las liquidadas por el campo (el 23,39% aproximadamente", y sostuvo que "la meta oficial quedó larga, no creo que puedan cumplirla". Sobre una eventual mejora en el dólar agro, Reschini dijo que "el sector, además de un tipo de cambio que no genera incentivo, sufre la baja del precio internacional por lo que tendría que ser una mejora sustancial para que el productor se anime a vender en este escenario". Reservas: llega un junio preocupante A su vez, Vitelli auguró que tras la finalización del dólar soja 3 "habrá un desplome de las liquidaciones como ya hemos visto en las dos ediciones anteriores, que cuando no hay un tipo de cambio diferencial, las operaciones bajan rotundamente". En ese marco, el experto dijo que "es muy probable que las liquidaciones bajen abruptamente, por lo que que vamos a ver un BCRA vendedor, por lo menos con presiones cambiarias, y de allí que pueda llegar a surgir otro tipo de cambio diferencial". "Creo que será clave cómo se desarrollan las ruedas de junio para ver si habrá un tipo de cambio al sector exportador, se habló mucho de un dólar maíz, en la medida que se ponga cuesta arriba la situación cambiaria, más probabilidad habrá de un tipo de cambio diferencial", acotó. Por su parte, los analistas de PPI prevén que dado que la liquidación del dólar soja comenzó a ser más fluida por factores estaciones, "es probable que el Gobierno intente darle al esquema del dólar agro un envión adicional con un mejor tipo de cambio desde el 1 de junio". Con la misma mirada, en Delphos Investment señalaron que "las experiencias anteriores muestran que en los meses siguientes a la finalización del programa de incremento exportador, los saldos en el mercado oficial vuelven a ser deficitarios, lo que augura dificultades mayores para el BCRA durante junio y julio". Se agota el poder de fuego del BCRA: ¿habrá más medidas? Por su parte, en la consultora Eco Go estimaron que "las reservas netas son negativos en u$S1.670 millones y reflejan el menor valor registrado desde la llegada del actual gobierno", y afirmaron que esta situación "pone un fuerte coto a las posibilidades de intervencion" en los dólares financieros, En PPI enfatizaron que "esta semana, será sumamente importante seguir de cerca la presencia del sector público en el mercado de deuda con el objetivo de contener la suba de los dólares financieros. Y argumentaron que "dado que las reservas netas rondan los -u$s1.500 millones, creemos que dicho sector no tiene mucho poder de acción para mantener el ritmo de esta operatoria por mucho tiempo, por lo cual será fundamental la evolución de las negociaciones entre el Gobierno y el FMI". Con la misma lectura, la consultora Equilibra sostuvo que "hacia adelante, el costo de mantener las cotizaciones financieras a raya irá en ascenso: 1) prevemos un déficit primario acrecentándose, 2) el BCRA ya paga cerca de $1billón mensual de intereses de sus pasivos remunerados, 3)vemos muy probable que el Programa de Incremento Exportador sea relanzado, ofreciendo un tipo de cambio más cercano a la cotización financiera lo que expandirá en mayor medida la base monetaria, 4) el sector privado sigue reacio a financiar al Tesoro en el mercado de deuda local, y tiene en sus manos vencimientos por unos $4 billones de acá a las PASO". Ante este panorama, en Equilibra piensan que el BCRA "intentará evitar un ajuste brusco del tipo de cambio oficial de cara a las PASO, al mismo tiempo que seguirá interviniendo en las cotizaciones financieras en el muy corto plazo" "Pero dado el bajísimo stock actual de reservas netas, la pregunta del millón es hasta cuándo le dará la nafta. No descartamos que el Ejecutivo pueda seguir desdoblando -implicitamente- el mercado oficial de cambios, o exigir el uso de dólares propios del sector privado para ciertos pagos. En cualquier caso, el ensanchamiento de la brecha luce inevitable", advirtieron. En sintonía, en FMyA también prevén que "el BCRA va a seguir interviniendo el dólar paralelo, pero seguramente no tan mecánico como las últimas semanas". La consultora subrayó que "seguimos asumiendo nuevas medidas: dólar soja 4, algún desdoblamiento, más deuda". "Medidas que limiten el flujo diario. Vemos difícil devaluación clásica a tres meses de las PASO. Asumimos avances con el FMI en el adelanto de desembolso de u$s 10.600 millones. La sorpresa positiva sería que permitan el uso de DEGs para otras cosas además de pagar deuda", recalcaron. Por su parte, la Fundación Capital remarcó que "el trimestre junio-agosto es complejo en términos de divisas, donde se deberán afrontar pagos netos por unos u$s 2.000 millones con el organismo y, además, unos u$s1.000 millones adicionales con bonistas privados". Con la misma mirada, en Delphos Investment señalaron que "las experiencias anteriores muestran que en los meses siguientes a la finalización del programa de incremento exportador, los saldos en el mercado oficial vuelven a ser deficitarios, lo que augura dificultades mayores para el BCRA durante junio y julio"
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