Por Gustavo Ybarra
- Sigilosamente, el Gobierno envió al Senado un paquete de pliegos que busca
ubicar a funcionarios y dirigentes de fuertes vínculos con el kirchnerismo en
cargos claves del Poder Judicial.
En la nómina de
candidatos se destacan María Laura Manin, una funcionaria de estrecho vínculo
con el ministro del Interior, Eduardo de Pedro. Fue propuesta para ocupar la
estratégica Sala de Defensa de la Competencia de la Cámara Nacional Civil y
Comercial. Se trata de un juzgado con incidencia directa en la actividad
empresaria.
Sin embargo, no es
el único nombre de la veintena de propuestas que mueve el interés el
kirchnerismo. También aparece postulado Juan Rafael Stinco, un abogado de
fuertes vínculos con el gobernador Axel Kicillof. Quieren que ocupe un juzgado
del fuero en lo contencioso administrativo, puesto clave para la resolución de
conflictos del Estado nacional.
En sigilo, el
Gobierno envió al Senado un paquete de pliegos que busca ubicar a funcionarios
y dirigentes de fuertes vínculos con el kirchnerismo en cargos claves en el
Poder Judicial, entre los que se destacan la nominación de María Laura Manín,
de estrecho vínculo con el ministro del Interior, Eduardo de Pedro, en la
estratégica Sala de Defensa de la Competencia de la Cámara Nacional Civil y
Comercial.
No es el único
nombre que muestra el interés y el apuro del kirchnerismo por seguir
colonizando el Poder Judicial antes del próximo recambio presidencial. Así,
también aparece postulado Juan Rafael Stinco, un abogado de fuertes vínculos
con el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, para un juzgado del fuero
contencioso administrativo, puesto clave para la resolución de conflictos que
tienen al Estado nacional como protagonista.
Los pliegos fueron
enviados hace dos semanas a la Cámara alta. Pero como el Senado no ha sesionado
desde entonces no tienen estado parlamentario, lo que impide que la Comisión de
Acuerdos pueda poner en marcha el proceso para su tratamiento, que debería
comenzar con la convocatoria, publicación de edictos en diarios de circulación
nacional mediante, a la audiencia pública en la que los candidatos deben
defender sus nominaciones.
Por esa razón, el
oficialismo busca por estas horas armar una sesión para la última semana de mayo
para que los pliegos puedan tomar estado parlamentario y, así, apurar su
tratamiento para tratar de darles acuerdo antes de que las elecciones
nacionales configuren un nuevo escenario político en el Senado que, según las
encuestas, podría complicar aún más la endeble situación en la que quedó el
Frente de Todos, perdió su mayoría tras la partida de la bancada de cuatro
senadores para conformar, junto con la peronista cordobesa Alejandra Vigo, el
bloque Unidad Federal.
Manín es una de las
funcionarias de mayor confianza de De Pedro y aspira a ocupar una vocalía en la
sala de Defensa de la Competencia, tribunal de papel clave a la hora de aplicar
sanciones en casos de prácticas monopólicas y a la hora de resolver fusiones
entre compañías.
El papel de la
funcionaria en el concurso no fue el más destacado, terminó undécima, pero la
estratégica nominación de varios postulantes con mejor nota a otros juzgados,
para los que también habían concursado, le permitió al Poder Ejecutivo enviar
su pliego al Senado. El cambio de fichas la favoreció.
La funcionaria es
hermana de María Soledad Manin, que encabeza el Ente Nacional Regulador de la
Electricidad (ENRE), organismo controlado por el ala kirchnerista del Frente de
Todos. Ambas son hijas de Manuel Manín, dirigente peronista que fue intendente
de Lobos entre 1991 y 1995.
Más nominaciones
En una jugada que
desconcierta a la oposición, el Gobierno nominó para otra de las vocalías del
tribunal de Defensa de la Competencia a Humberto Carlos Guardia Mendonca, un
abogado que cuenta con antecedentes en la materia.
De hecho, fue
vicepresidente de la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia, órgano que
depende del Poder Ejecutivo, y firmó el dictamen que avaló la fusión de
Cablevisión y Multicanal, durante el gobierno de Néstor Kirchner.
Aquella decisión se
convirtió, con el tiempo, en unos de los caballitos de batalla de Cristina
Kirchner para cuestionar el poderío del Grupo Clarín. Además de Guardia
Mendonca, aquella operación obtuvo la luz verde de Diego Pablo Povolo.
Ambos dejaron en
minoría al entonces presidente del organismo, José Sbatella, que votó en
disidencia.
En el caso de
Stinco, que está postulado para el Juzgado Nacional en lo Contencioso
Administrativo Nº 7 con asiento en la Capital Federal, sus vínculos con
Kicillof vienen de la época en la que el actual gobernador era ministro de
Economía de Cristina Kirchner. Fue su asesor en el directorio de YPF. También
integró el directorio de la Autoridad Cuenca Matanza-Riachuelo (Acumar).
Stinco es, además,
protagonista de un hecho poco común. Está por superar su segundo acuerdo en
poco más de dos años, ya que en 2021 fue designado juez civil y comercial por
el Senado. Ahora, tendrá que enfrentar a los legisladores de la Comisión de
Acuerdos en persona, ya que su anterior audiencia fue por videoconferencia como
consecuencia de la pandemia de coronavirus.
Otro caso que se
destaca entre los últimos pliegos remitidos por el Gobierno es el de Juan Tomás
Rodríguez Ponte, nominado para el Juzgado Federal 2 de Lomas de Zamora.
Rodríguez Ponte era
el titular de la Dirección de Asistencia Judicial en Delitos Complejos y Crimen
Organizado del Poder Judicial (Dajudeco) cuando se filtró el famoso audio de la
conversación entre Cristina Kirchner y Oscar Parrilli.
El ahora postulante
a juez federal negó siempre que el organismo a su cargo haya sido el
responsable de la filtración de aquella conversación privada. Rodríguez Ponte
también fue secretario interino en el juzgado de Ariel Lijo y es hijo de José
Rodríguez Ponte, un dirigente radical que en 2015 asumió como intendente de
General Lavalle (Buenos Aires).ß
El oficialismo
busca que Manin, de estrecha confianza de De Pedro, sea designada en Defensa de
la Competencia |