Por Juan Gasalla - La Reserva
Federal de los EEUU (Fed), resolvió este miércoles un
moderado incremento de la tasa de referencia en un cuarto de
punto porcentual o 25 puntos básicos, a un nuevo rango de 5%-5,25%
anual, el más alto desde octubre de 2007. No obstante, esta suba de 0,25%, la
misma proporción que en la reunión anterior del Comité, evidencia una
moderación tras subir la tasa en medio punto en diciembre, y en 0,75% por
cuatro reuniones consecutivas en 2022.
-Fortaleza de la
actividad. Es sabido que un incremento del costo del dinero se traduce en
un condicionante recesivo para la actividad económica, pues se endurece el
crédito y se desincentiva la inversión. También perjudica al consumo, pues
incrementa la conveniencia del ahorro antes que la demanda por bienes y
servicios. Que la Fed haya decidido subir la tasa puede interpretarse como la
señal de que la actividad económica en los EEUU sigue lo suficientemente firme
como para no apartarse del objetivo de reducir la inflación sin resentir tanto
al crecimiento. Habida cuenta del peso de los EEUU en la economía global,
su crecimiento es determinante para sostener la demanda global de la
que también depende la economía argentina.
En su comunicado,
la Fed no garantizó que mantenga las tasas estables en su próxima reunión de
junio y señaló que “la inflación sigue siendo alta”, pero consideró que
el empleo sigue “creciendo a un ritmo robusto”. Hay que subrayar que la
tasa de interés oficial de la Reserva Federal es prácticamente la misma que en
vísperas de la desestabilizadora crisis financiera de hace 16 años, y se sitúa
en el nivel que la mayoría de sus miembros estimaron en marzo que
sería “suficientemente restrictivo” para que la inflación vuelva a su
objetivo.
Actualmente el
nivel de inflación en los EEUU sigue siendo más del doble del objetivo de la
Fed
-¿Se acerca el fin
del sendero alcista de tasas? La Fed podría estar sentando las bases
para acercarse al final de su ciclo de aumento de tasas. En el comunicado
de política monetaria que acompañó la decisión se eliminó la referencia a que
el Comité Federal de Mercado Abierto, encargado de fijar los tipos de interés,
aún “prevé que podría ser apropiado un endurecimiento adicional de la política
monetaria con el fin de lograr una orientación de la política monetaria lo
suficientemente restrictiva como para devolver la inflación al
2% con el tiempo”.
En su lugar, la Fed
insertó una texto con más matices, que recuerda al lenguaje usado cuando detuvo
las subidas de tasas en 2006, y que dice que “para determinar hasta qué punto
puede ser apropiado un endurecimiento adicional de la política monetaria”, los
funcionarios estudiarán cómo se comportan la economía, la inflación y los
mercados financieros en las próximas semanas y meses.
La decisión
unánime de la Fed elevó la tasa de interés de referencia a un día del banco
central estadounidense al rango del 5% a 5,25%
-Distensión tras la
crisis bancaria. Los agentes bursátiles de todo el mundo temieron en los
últimos dos meses a la eventual irrupción de un nuevo “cisne negro”, debido a
que la violenta salida de depósitos de algunos bancos, de los cuales
el Silicon Valley Bank y el Credit Suisse fueron la “punta
del iceberg”, profundizó la inestabilidad financiera y revivió los fantasmas
acerca de la posibilidad de una crisis sistémica como la que produjo la quiebra
de Lehman Brothers en 2007.
Al no haberse
apartado del sendero de suba de tasas, la Fed brindó una señal acerca de que la
turbulencia en el sector financiero no tendría profundidad suficiente para
producir una nueva crisis, con impacto asegurado para la Argentina de
extenderse a los mercados internacionales. Basta recordar que por la crisis
iniciada por el colapso de las hipotecas “sub prime” en los EEUU el PBI
argentino se hundió un 5,9% en el año 2009.
Los riesgos en
torno a las recientes quiebras de varios bancos estadounidenses y el
enfrentamiento por el límite de la deuda entre los republicanos en el Congreso
y el presidente demócrata Joe Biden se sumaron a la sensación
de cautela de la Fed a la hora de intentar endurecer aún más las
condiciones financieras.
La Fed podría
hacer una pausa para dar tiempo a evaluar las consecuencias de las recientes
quiebras bancarias
“La restricción al
crédito motivada por la crisis bancaria va a generar un tightening (”apretón”
monetario) que no hace falta que tenga la mano directa de la Reserva Federal”,
sintetizó Germán Fermo, head of research del Grupo IEB (Invertir en
Bolsa).
-Expectativa por un
rebote en los mercados. Las caídas bursátiles encabezadas por Wall Street
tienden a golpear a la valuación de los activos emergentes aún con más fuerza,
lo que se llama el “high beta” o alto riesgo de acciones y bonos de estas
economías. Esta volatilidad se potencia para la Argentina y en caso de una
recuperación para los mercados, el impulso podría ser beneficioso para los
papeles locales que también cotizan en el exterior.
El analista
técnico Ruben Ullúa explicó que “hemos visto en el mercado cierta
debilidad, expectante con la decisión de la Fed, por más que ya se descontaba
una nueva subida de la tasa de referencia. El mercado está expectante a los
eventos que se están sucediendo con algunos bancos y eso genera cierta alerta
si la Fed no empieza a mostrar algunas señales de que va a aminorar la marcha
de la suba de las tasas de referencia e incluso a la posibilidad de que empiece
a generar ajustes en la tasa”.
La Fed
implementó la décima alza consecutiva de las tasas de referencia desde marzo de
2022
“El mercado se
empieza a poner un poco nervioso, sin embargo, técnicamente, no hay grandes
variaciones, independientemente de tantas idas y vueltas en todos estos eventos
que se han ido sucediendo, y eso en alguna forma nos mantiene optimistas,
porque cuando existe un mercado donde las noticias no son positivas y de
repente nos encontramos con que el mercado reacciona un poco a las noticias,
pero no termina acentuándose esa reacción como una tendencia, eso es favorable,
porque de algún modo está diciendo que la fuerza vendedora no está apareciendo
y eso termina siendo interesante para que luego el mercado pueda retomar el
alza con mayor firmeza”, agregó Ullúa.
-Precios más
sostenidos para las materias primas. La caída de las Bolsas globales llevó
a la Reserva Federal de los EEUU a replantearse su plan de mantener el alto
ritmo de alza de tasas de referencia. Esto puede traer consecuencias
positivas en materia financiera para la Argentina en un corto plazo, pues
una Fed menos agresiva -y tolerante a la actual inflación de 5% anual en los
EEUU en marzo- habilitaría la liberación de fondos que podrían volcarse a
acciones y bonos en Wall Street, para apuntalar los valores de mercado.
Los títulos argentinos deberían captar parte de ese posible rebote de la renta
fija y la variable, que también podría trasladarse a commodities que
la Argentina exporta. |