Por Maia
Jastreblansky - Luego de que el dólar alcanzara un nuevo récord y en medio de
rumores, el jefe de asesores del presidente, Antonio Aracre, renunció ayer a su
cargo, tras protagonizar un enfrentamiento con el ministro de Economía, Sergio
Massa.
El funcionario dio
un portazo luego de que circulara una versión que lo ubicaba como posible
reemplazo de Massa. La Casa Rosada rechazó ese rumor, pero se generó un fuerte
entredicho en el seno del Gobierno. Aracre, disgustado por todo el episodio,
optó por dar un paso al costado.
En el Gobierno
creen que esas versiones en torno al futuro de Massa colaboraron ayer en la
disparada del precio del dólar blue, que cerró a $418. En el mercado financiero
dieron otra lectura y vinculaban la suba del dólar con la inflación y la
fragilidad política del Gobierno.
El blue llegó a
tocar un máximo de $421, aunque cerró en $418. Fueron $10 más que anteayer y
acumula una suba de $18 en dos días.
Con el dólar en
ascenso, el jefe de asesores del presidente, Antonio Aracre, renunció a su
cargo en medio de rumores sobre el futuro de la economía y enfrentado con el
ministro Sergio Massa.
El funcionario dio
un portazo luego de que circulara un rumor que lo ubicaba como posible
reemplazo de Massa en el Ministerio de Economía.
La Casa Rosada
rechazó esa versión, pero se generó un fuerte entredicho en el seno del
Gobierno por el origen de la “información off the record”, según pudo saber la
nacion de fuentes al tanto de la discusión.
Aracre, disgustado
por todo el episodio, optó por dar un paso al costado.
En el Gobierno
creen que esas versiones en torno al futuro de Massa colaboraron ayer en la
disparada del precio del dólar blue, que tocó los $418. En el mercado
financiero daban otra interpretación a la suba.
A través de sus
redes sociales, Aracre, ex-CEO de Syngenta, dijo que renunciaba justamente para
evitar mayor inestabilidad cambiaria: “A raíz de los rumores que circularon
desde anoche y a los efectos de desactivar cualquier operación tendiente a
intranquilizar los mercados le he presentado al Presidente mi renuncia
indeclinable como Jefe de Asesores de manera inmediata. “Aprovecho este medio
para agradecerle al Presidente por haberme honrado con este cargo y sabe que
puede contar conmigo para lo que necesite”, cerró en otro posteo el funcionario
que había ingreso al gabinete el 1° de febrero pasado.
El funcionario
saliente dejó saber, puertas adentro del Gobierno, que estaba “cansado de que
lo operen”.
Mientras que en
Economía apuntaban a Aracre por un presunto “plan antiinflacionario” que el
saliente funcionario le habría presentado a Fernández para intervenir en el
área económica, cerca de Aracre rechazaron que hubiera una “conspiración”
contra Massa y dijeron que el ex-CEO solo “discutió ideas” económicas con el
Presidente en un almuerzo.
En el Ministerio de
Economía ayer apuntaban que cerca del Presidente “instalaron el ruido de la
salida de Massa y la entrada de Aracre y el mercado reaccionó”. Carlos Pagni,
en Odisea Argentina, dijo el lunes: “¿Massa va a querer seguir siendo ministro
de Economía de este Gobierno o se querrá ir? En la Casa de Gobierno hay gente
que dice que Aracre calienta motores”.
La versión, que
circuló, también fue insinuada en Twitter por Jorge Asís y difundida por el
periodista de Página 12, Leandro Renou. La portavoz presidencial, Gabriela
Cerruti, salió a responder que era un “invento periodístico”.
Cerca del
empresario rechazaron que esas versiones hayan salido de él.
Como sea, hace
tiempo que Sergio Massa sostiene que hay información en off proveniente de la
Casa Rosada que busca erosionarlo, poner de relieve los indicadores adversos de
la economía y cuestionar su potencia electoral.
Semanas atrás, le
hizo un fuerte planteo al Presidente en ese sentido.
En el medio, la
inflación alcanzó el mes pasado el récord de la gestión de Alberto Fernández,
al llegar a un 7,7%, incluso por encima del peor índice de su antecesor, Martín
Guzmán. Y el dólar escaló sin freno.
En el mercado
financiero dieron una lectura diferente a la escalada: la inflación en alza y
la fragilidad política empujó a refugiarse en el dólar y empujó hacia arriba su
valor (ver aparte).
Paso breve
Aracre se había
convertido en uno de los hombres de consulta del Presidente.
El jefe de Estado
lo escuchaba para tener un termómetro del círculo rojo y porque valoraba su
manera de defender la gestión sin las pasiones partidarias.
Fernández trabaja
con sus colaboradores uno a uno, de forma radial y no en una mesa colegiada.
Pero desde que
desembarcó en la Casa Rosada, Aracre atravesó varios momentos de incomodidad y
no es la primera vez que piensa en renunciar. En estos tres meses, mantuvo
entredichos con otros laderos de Fernández por la estrategia de comunicación y
debió moderar sus apariciones mediáticas por manifestar opiniones personales
que le trajeron dolores de cabeza al Gobierno.
Por ejemplo, cuando
dijo a la naque estaba abierto a impulsar cion una reforma laboral, que
contemple “flexibilizaciones” para las nuevas contrataciones.
Luego debió aclarar
que Alberto Fernández no pensaba en un cambio de la legislación en ese sentido.
Aracre, un hombre
de negocios que quiso dar el salto a lo público, debió superar varios escollos
desde antes de ser oficializado en su cargo.
El sindicalismo
salió a cruzarlo por sus declaraciones sobre la “flexibilización y
modernización” laboral; grupos de ambientalistas repudiaron su desembarco por
su procedencia como ejecutivo de la compañía de semillas y herbicidas Syngenta
e incluso se presentó una nota a la Oficina Anticorrupción por potenciales
conflictos de interés por su perfil empresario.
Con su
incorporación, el Presidente quiso exhibir apertura a las inversiones y
refrescar su equipo, que venía de varias bajas. Fernández nunca pretendió hacer
mayores cambios en su gabinete, y la mayoría de las salidas fueron forzadas por
distintas situaciones. La de Aracre no fue la excepción.ß |