Por Liliana
Franco - El ministro Sergio Massa, junto a sus principales colaboradores, viaja
este martes a Washington para asistir a la reunión de otoño del Fondo Monetario
Internacional. Lleva como antecedente el último informe técnico sobre la
Argentina del que surge una explícita aprobación a lo
actuado por el nuevo equipo que comanda el Palacio de Hacienda, pero también
con numerosas advertencias y requisitos porque “la situación sigue siendo
frágil y los riesgos del programa siguen siendo muy elevados”. De la
lectura de las 109 páginas del staff report surgen
los siguientes datos:
Profundizar el programa
“Una implementación más decisiva del
programa sigue siendo esencial para reducir las incertidumbres, reconstruir la
credibilidad de las políticas y mantener el programa como ancla”. El Fondo considera que “Las políticas
macroeconómicas estrictas no solo son necesarias para asegurar los objetivos
clave del programa, sino también para moderar gradualmente la demanda interna,
abordar la alta inflación persistente y evitar un ajuste desordenado”.
En este sentido, el FMI
rescata a la nueva conducción: “Ante una crisis
cada vez más profunda, el nuevo equipo económico comenzó a adoptar medidas audaces para estabilizar la economía y
reconstruir la credibilidad de las políticas”.
También advierte que: “Incluso con un endurecimiento de las políticas
macroeconómicas, reconstruir la credibilidad de las políticas y reducir la
inflación será un desafío, especialmente dadas las
persistentes dudas sobre las diferencias persistentes sobre la dirección de las
políticas económicas dentro de la coalición gobernante”.
“La alta inflación persistente y el
menor crecimiento podrían exacerbar el descontento social y debilitar el apoyo
político al programa. Estos
riesgos podrían aumentar antes de las elecciones presidenciales de octubre
de 2023, en caso de que se intensifiquen las
presiones sobre el gasto y los salarios, y surjan dificultades para
implementar las reformas planificadas de subsidios y asistencia social y para
asegurar las tasas de renovación de la deuda interna”.
Presiones inflacionarias
Si bien el informe asume que
este año la inflación culminará en torno al 85% y que en el 2023 será de 60%,
de todas maneras advierte que:
“Las presiones subyacentes
siguen siendo fuertes (la inflación núcleo se situó en 6,8% mensual) y las
expectativas de inflación siguen sin anclarse.
Mientras tanto, la demanda de dinero real se ha contraído aún más, con la base
monetaria alcanzando el 5% del PIB, sus niveles más bajos desde 2023”.
“Se proyecta que la inflación
caerá muy gradualmente durante el resto de este año y el próximo, de alrededor de 5% para fines de 2022 a alrededor de 3,5% para
fines de 2023”. Meta para este año que está por debajo de las últimas
estimaciones del REM.
En lo que se infiere como un
programa de estabilización gradual, el organismo proyecta una inflación alta
para los próximos años: sería de 44% anual en 2024, de 40% en 2025, de 35% en
2026 y de 30% en 2027.
Dólar atrasado
El informe señala que, aunque
la tasa de devaluación oficial ha aumentado, “se mantiene por debajo de la
inflación, lo que lleva a una mayor apreciación del tipo de cambio real” que
calcula en hasta un 12% adicional desde fines de 2021.
En tanto, en relación a las
reservas, el staff advierte que: “Las reservas internacionales
netas después de excluir las líneas swap y los encajes sobre los depósitos de
divisas se ubican en torno a los US$2.000 millones (equivalentes a algo menos
de un mes de importaciones), con reservas líquidas en territorio negativo”.
Para el período del programa,
se espera que los excedentes comerciales acumulados proyectados (US$ 39 000
millones) y las entradas netas de inversiones extranjeras (US$ 27 000 millones)
compensen con creces las obligaciones de la deuda externa neta y permitan una
acumulación de reservas internacionales (definición del programa) de
aproximadamente US$ 15 000 millones.
Respecto de la deuda, el trabajo indica que ““La deuda pública de
Argentina es sostenible pero no
con alta probabilidad”.
El FMI, cuyo programa busca
garantizar el repago del préstamo, advierte que estas obligaciones de la deuda
con el organismo “seguirían siendo muy grandes en el mediano
plazo, alrededor del 6,2 % de las exportaciones, o el 11% de las reservas
brutas”.
Gastos en turismo
Uno de los puntos que remarca
el trabajo es la salida de divisas por turismo. Al respecto, el equipo
económico estaría por anunciar un dólar diferencial para encarecer los gastos
en el exterior. En este sentido, el FMI advierte: “El
déficit turístico neto hasta agosto saltó a US$2700 millones (en comparación
con US$900 millones en 2021), mientras que el déficit de servicios no
turísticos se amplió a US$5900 millones (un 130 % más que en 2021), impulsado
principalmente por las importaciones de servicios relacionados con las
importaciones de bienes”.
En el mismo sentido, pone el
foco en el fuerte crecimiento de las importaciones: “Las importaciones de
bienes no energéticos aumentaron considerablemente, reflejando en parte un
fuerte crecimiento del volumen de importaciones (16,6 %, a/a), muy
por encima del crecimiento del PIB real, ya que un tipo de cambio real más
fuerte junto con una brecha cambiaria alta y creciente se sumaron a la
inusualmente fuerte importación. elasticidad del crecimiento”.
Ajuste
El informe insiste en la
necesidad de llevar a cabo el ajuste en el gasto público que, en un año
electoral, algunos especialistas temen -e incluso el propio Fondo- sea muy
difícil:
“El ajuste subyacente se
estima en 0,9% del PIB, Las políticas que sustentan el ajuste fiscal en 2023
incluyen: (i) reducciones en los subsidios ( 0,5% del PIB), principalmente en
el sector energético, y también con algunos ahorros en los sectores de agua y
transporte; (ii) la racionalización de la asistencia social
(0,7 % del PIB), lo que refleja una reversión de los bonos de
emergencia y esfuerzos para reducir la superposición de beneficios e incentivar
la entrada al mercado laboral; y (iii) restricciones continuas en
los salarios del sector público (incluso a
través de un congelamiento en la contratación del sector público),
transferencias a provincias y empresas estatales, y adherencia a la fórmula de
indexación de pensiones.”
“Si bien se prevé que el gasto en pensiones disminuya como porcentaje del PIB en 2023, en
consonancia con la fórmula de indexación vinculada al crecimiento anterior de
los salarios y los impuestos sobre la nómina, se espera que el gasto se
recupere a mediano plazo y siga representando entre el 35 y el 40 % del total
del gasto del gobierno federal.”
Tarifas
El trabajo del staff considera
que “Si bien el esquema de segmentación representa un importante paso adelante
en la mejor focalización de los subsidios a la energía” aunque solicita
que “se podría fortalecerse aún más en el futuro”.
Para ello se propone: “Mejorar de la base de datos. La política está respaldada
por una nueva base de datos (RASE) de consumidores de energía que auto declaran
sus ingresos y activos” con el propósito de reducir “el número de
consumidores no registrados”
Otro aspecto que señala es
vincular las tarifas a los costos. “Para los usuarios que
continúan subsidiados, los aumentos en el precio de la energía podrían
vincularse a los costos en lugar de a los salarios, lo que podría conducir a
mejoras más ambiciosas en la recuperación de costos”.
Y cuestiona los actuales
techos de consumo a partir del cual se comienza a pagar sin subsidios (400 kw)
y, propone: “topes de consumo menos generosos. El techo de consumo para los
consumidores de ingresos medios es bastante generoso y podría reducirse en el
futuro, mientras que también podría introducirse un techo para los consumidores
de ingresos bajos para fomentar la eficiencia energética.”
Asimismo, considera que se
otorgan subsidios a una población muy grande: “también podría
reconsiderarse la composición de los tres grupos (es decir, la proporción de
usuarios en la categoría de bajos ingresos sigue siendo relativamente grande)”.
Acumulación de deuda interna
Respecto de la deuda interna,
el trabajo indica que “han aumentado los riesgos de vencimiento y de
divisas y ha dado lugar a una acumulación notable de amortizaciones que vencen
antes de las elecciones presidenciales (junio-agosto de 2023). Recomienda
en este sentido: “crear reservas de efectivo (incluso
aumentando la frecuencia de las emisiones a corto plazo) y reanudar la emisión de valores a más largo plazo a medida que
las condiciones permitan impulsar las renovaciones hasta 2024”.
Para lograrlo sostiene que se
necesita: “ampliar el universo de inversionistas”; implementar un plan de
endeudamiento anual bien coordinado; y desarrollar una estrategia de deuda de
mediano plazo.
Y, condiciona que el logro de
las metas de financiamiento neto en pesos (de alrededor del 2,5% del PIB
en 2023) dependerá en última instancia de la
implementación firme del plan de consolidación fiscal y la
aplicación continua y decisiva del marco mejorado de política monetaria y
cambiaria”.
El equipo del Fondo plantea
“un repunte en el financiamiento oficial y una tasa de renovación algo más
alta de la deuda interna de 130 % (frente al 125 % en la primera
revisión) para respaldar una reducción en el financiamiento
monetario del déficit fiscal (de 0,8 % del PIB en 2022 a no más de 0,6 %
del PIB en 2023).”
Continuando un concepto de
anteriores informes respecto a las tasas, señala que “las tasas de interés reales nacionales aumentarán
gradualmente del 2 % en 2022 al 4,5 % para 2028”.
Reformas pendientes
El informe plantea que se
realizarán distintos estudios para encarar reformas estructurales.
Sistema Jubilatorio
“Se está realizando un estudio
liderado por el Ministerio del Trabajo para identificar opciones de reforma del
sistema jubilatorio”. Este trabajo debe concluirse para fines de diciembre de
2022.
Impuestos
Plan para fortalecer el
cumplimiento de los ingresos impositivos (fines de 2022)
-Energía
-Estrategia para mejorar la
sostenibilidad y eficiencia del sector energético (fines de 2022);
-Reevalúo inmobiliario
-Fines de marzo de 2023.
-Programas de Ayuda social
-Evaluación a los efectos de
lograr una mejor asignación del gasto (marzo 2023)
Controles de divisas
-Una hoja de ruta para
eliminar gradualmente los controles de divisas (fin de junio 2023)
Control de la evasión
-Finalizar un análisis
integral de brechas de cumplimiento para impuestos clave y desarrollar un plan
de acción para la segmentación de la base de contribuyentes”. Este trabajo no
se cumplió a fines de agosto de 2022 y el objetivo fue restablecido a fines de
diciembre.
En temas impositivos el Fondo
admite que se está trabajando en:
-Revisar “los costosos
incentivos fiscales corporativos”;
-Fortalecer la recaudación de
impuestos sobre la propiedad,
-Mejorar los impuestos sobre
el patrimonio personal (bienes personales),
Mejorar la base de datos de la
administración tributaria al conectar los catastros provinciales y los
registros de impuestos sobre la propiedad con los números de identificación de
los contribuyentes federales, inicialmente para el Área Metropolitana del Gran
Buenos Aires”. ÁMBITO |