La secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca comunicó las pautas
operatorias para el cierre del Programa de Incremento Exportador (PIE) que
establece un tipo de cambio diferencial de $200 por dólar para el complejo
sojero por septiembre y ratificó la conclusión de este esquema para este
viernes a las 15 horas.
La cartera dependiente del Ministerio de Economía, detalló
las "pautas operatorias estrictas" para la última semana de
vigencia del PIE, que concluirá con récord de liquidación de divisas y
volumen de mercadería negociada.
Entre los principales puntos, el escrito establece que las liquidaciones
Primarias de Granos y las liquidaciones Secundarias de Granos cuya fecha de
"fijación de la operación" esté comprendida entre la fecha de entrada
de vigencia del Decreto 576/22 (5 de septiembre) y el 30 de septiembre, se
encuentran alcanzadas por el PIE, en la medida que la fecha de emisión de las
citadas liquidaciones no sea posterior al 2 de octubre.
Además, se fijó que las Declaraciones Juradas de Venta al Exterior
objeto del presente Programa podrán ser registradas hasta las 11 horas del
3 de octubre de 2022, "debiendo cancelarse los derechos respectivos
hasta 48 horas posteriores a dicha fecha".
A su vez se determinó que los permisos de embarque de los productos
establecidos en el Anexo I del Decreto 576, que no están incluidos bajo el
alcance de la Ley 21.453, oficializados en el marco de Programa, contarán con
una prórroga de 60 días contados desde el vencimiento del período inicial
de 30 días.
Finalmente, se ordenó que la liquidación de divisas correspondiente al
pago de las operaciones mencionadas podrán ser concertadas hasta las 15
horas del 30 de septiembre.
Así, "el balance provisorio del programa establece que se superó la
meta de los US$ 5.000 millones en ingresos de divisas con un total de
7.000 productores que se adhirieron y cerca de 4.000 liquidaron menos de 100
toneladas, demostrando su adhesión en pequeños y medianos productores"
En este sentido, la Bolsa de Cereales de Buenos Aires (Bcba) informó que
desde que comenzó el PIE hasta el lunes, las operaciones registradas
alcanzaron las 14.279.387 toneladas.
De ese número 9,9 millones de toneladas corresponden a
operaciones que se concertaron luego de la medida y, el restante, 4,4 millones
corresponde a aquellas operaciones que se operaron luego de la medida, pero se
concertaron antes del inicio de la misma.
Por otra parte, del total acumulado 12.571.094 toneladas
corresponden a operaciones con destino final.
Asimismo, la expectativa inicial del Gobierno de que se produzca una
liquidación de divisas en torno a los US$ 5.000 millones fue sobrecumplida, ya
que al viernes la Cámara de la Industria Aceitera y del Centro de Exportadores
de Cereales (Ciara-CEC) informó que ingresaron US$ 6.000 millones.
Es por eso que el ministro de Economía, Sergio Massa, quien anunció y
puso en vigencia el programa el 5 de septiembre, remarcó en los últimos días en
su cuenta oficial de Twitter que "hasta acá ha sido un éxito muy
importante tanto para la movilización económica de nuestra producción como
también para la contribución a las reservas argentinas y la agenda de
seguridad global alimentaria".
Asimismo, Massa precisó que "hasta el día viernes 30 a las 15, se
podrán realizar operaciones de acuerdo con valores de pizarra" e indicó
que, "luego, solo se podrán completar los trámites administrativos de
dichas operaciones".
Finalmente, el responsable de la cartera económica subrayó:
"queremos agradecer el acompañamiento y trabajo del campo a esta medida a
lo largo de estas semanas e invitarlos a trabajar los cinco días restantes con
el mismo empeño, transparencia y profesionalismo. El viernes a las 19
haremos la evaluación final para contarle a la sociedad argentina los
resultados".
El día después del 30 de septiembre
El economista Christian Buteler afirmó: “Creo que el
gobierno va a seguir por el lado de la restricción para contener la demanda, es
decir, va a seguir regulando a qué importador le deja comprar y a cuál no”.
“No espero que haya un nuevo 'dólar soja' para otro sector, por lo menos
en el corto plazo, que fue una de las versiones que circuló”, agregó.
Consultado acerca del “dólar Qatar'', Buteler aseguró: “Creo que
sería otro gran error. Primero, porque quien tenga que viajar al mundial o
quien tenga que viajar al exterior, después de tanto tiempo que se habló del
tema, seguro ya adelantó todos los gastos ya sea pasaje, hotel, auto, todo lo
que pudo. El gasto grande ya está hecho. Entonces, implementarlo es poner
más ruido en el mercado con un beneficio muy escaso”.
Asimismo, dijo que “cuantos más dólares múltiples haya es peor porque la
mayoría de los sectores económicos que pueden marcar el dólar más alto lo van a
hacer”. Por ejemplo, cuando traés una computadora del exterior y la pagas con
tarjeta porque viajaste, tenes que pagar su valor más el 75% de impuestos
hoy en día. “Eso el importador lo sabe y cuando te vende acá la
computadora que importa a dólar oficial, incluye ese 75%”, dice.
“Los dólares múltiples generan muchas distorsiones en materia
macroeconómica y el Banco Central debería apuntar a la unificación de tipo de
cambio y creo que tiene que empezar a trabajar en un plan urgentemente para que
eso suceda”, concluyó el economista.
A cuidar la soja
Por su parte, Nery Persichini, Head of Research & Strategy de GMA
Capital dijo que la estrategia del Gobierno post "dólar soja"
probablemente apunte a preservar al máximo los US$ 4.000 millones que durante
septiembre el Banco Central compró a un costo promedio elevado de
$232.
“En este sentido, no sorprendería que veamos nuevos torniquetes al
cepo sobre las canillas por las que se filtran las divisas (turismo y
otros servicios). Mientras tanto, el tipo de cambio se movería a la velocidad
crucero de 6-7% mensual para que la competitividad no se resienta, pero no tan
rápido como para recuperar terreno después una apreciación real de 20% en un
año”, afirmó.
Además, señaló que “las alquimias temporales” como la proliferación de
múltiples tipos de cambio nunca son efectivas en el largo plazo. “Con el
dólar comercial retrasado y una brecha cambiaria de 110%, siempre van a existir
incentivos para demandar bienes y servicios a la cotización más baja”, dijo.
Por otro lado, Persichini aseguró que “las decisiones de política
económica que no atacan los problemas de fondo lo único que logran es
profundizar los desequilibrios previos y hacer más doloroso el ajuste
posterior”.
“Al mismo tiempo, le quitan el atributo de ancla al tipo de cambio
porque es muy difícil saber cuál es el verdadero valor del dólar en
Argentina. La sensación de que el dólar está barato se retroalimenta a
través de la brecha. Esta distorsión, a su vez, potencia la volatilidad de
precios de una economía que convive con una inflación de más de 100%
anualizado”, agregó.
“También, las restricciones sobre las cantidades generan consecuencias
perniciosas sobre toda la cadena productiva, la actividad y el empleo. Mayor
inflación, brecha más elevada y menor ritmo de crecimiento son el producto
final”, concluyó.
Siga siga
“De momento el esquema a seguir es el actual: tipos de cambio
diferenciales, restringir importaciones y comprar tiempo (lo vimos plasmado con
el dólar soja durante septiembre)”, dijo Matías De Luca, desde LCG, ante El
Economista. “La realidad es que el Gobierno tiene que corregir el tipo de
cambio y está dilatando la tarea, lo dejó en evidencia con el dólar soja a
$200”, dijo.
Sobre el “dólar Qatar”, De Luca dice: “Su efectividad dependerá de que
se achique la brecha cambiaria, de modo que no haya incentivos a canalizar los
gastos en moneda extranjera a través del tipo de cambio oficial. De todos
modos, por el mismo hecho de existir brecha, la especulación está siempre
vigente. Por lo tanto, no sé realmente hasta qué punto será efectivo para
deprimir la demanda. Más bien tendrá un efecto recaudatorio positivo”. |