Por Joaquín Lanfranchi - El ministro de Economía, Sergio Massa, mantuvo
ayer una reunión con autoridades de la Confederación Argentina de la Mediana
Empresa (CAME). Allí confirmó, finalmente, que el Gobierno va a impulsar un
Sistema Integral de Monitoreo de Importaciones (SIMI) “simple y transparente”
para “dar previsibilidad” a las pequeñas y medianas empresas (pymes) porque
“contará con fecha de pago al mismo momento de su aprobación”.
“Así, las empresas van a poder planificar sus procesos productivos con
orden y certidumbre”, aseguró el ministro en su cuenta de Twitter. Y agregó:
“Asegurar que cada dólar disponible vaya a la producción es prioridad. Por eso
vamos a impulsar que el SIMI sea simple y transparente, de aprobación
prioritaria para bienes intermedios que necesitan las pymes para seguir
creciendo”.
Además, según los industriales que participaron del encuentro, Massa
anunció que “a la brevedad se liberarán 21.000 CUIT de importadores de bienes
de menos de US$2 millones”.
La inminencia de la medida había sido anticipada por la nacion como una
“suelta de dólares”, tras haber estado guardada bajo siete llaves por el
Gobierno, debido a la andanada de reclamos por las trabas a las importaciones
que había recibido por parte de varias industrias en las últimas semanas, así
como también del sector exportador, que tras la medida excepcional para el agro
llegó a pedir el “dólar malbec” y el “dólar limón”.
Si bien las dificultades con las importaciones llevan varios meses, se
agravaron con el estallido de la crisis cambiaria y las nuevas restricciones
del Banco Central (BCRA), que redundaron en demoras en la llegada de insumos
clave, como vidrio o cartón, y de máquinas para la producción, ante la
imposibilidad de cumplir con los cronogramas de pago a los proveedores.
Además del ministro Massa, la reunión contó con la participación del
secretario de Comercio, Matías Tombolini; el secretario de Industria y
Desarrollo Productivo, José Ignacio de Mendiguren; el jefe de Gabinete de la
provincia de Buenos Aires, Martín Insaurralde; y el presidente de la Cámara de
Diputados bonaerense, Federico Otermín.
Por parte de la CAME, participaron su titular, Alfredo González; el
secretario general, Ricardo Diab; el secretario de Hacienda, Blas Taladrid; los
vicepresidentes Alberto Kahale, Fabián Castillo y Claudia Fernández, entre
otras autoridades, federaciones y confederaciones del interior del país que
pertenecen a la cámara que nuclea a 1491 entidades y a más de 600.000 pymes que
emplean a 4.200.000 trabajadores.
“En este contexto de reactivación es necesario que se implementen
medidas para que la disponibilidad de divisas se direccione al sector
productivo”, dijo González. Y agregó: “Esta situación hace que el Gobierno deba
encarar este tema rápidamente. Ante la escasez de dólares y de sábana corta hay
que privilegiar al sector productivo y eso exige un esfuerzo gubernamental y de
los privados adicional”.
“La reunión fue muy ejecutiva porque era lo que veníamos pidiendo, que
una vez que se autorice la SIMI se tenga la certeza de la fecha de pago. Eso es
lo que cambia realmente la situación y nos permite tener certidumbre”, afirmó
González a la nacion. “Nosotros creemos que el saneamiento de la economía
empieza con la certidumbre”, agregó.
A su vez, entre otros pedidos realizados por la CAME al área económica
del gobierno, se destacaron la implementación de tasas subsidiadas para
créditos productivos del 25% y la reducción del 50% de la actual tasa de
interés resarcitorio y punitorio para deudas impositivas, además del cese de
demoras en el marco del SIMI.● |