En la Argentina los traders hablan sobre un plan de
acción que silenciosamente proyecta el equipo del nuevo ministro de economía de
Argentina, Sergio Massa, para estabilizar el turbulento mercado cambiario. Las
medidas, menos atractivas para la sociedad que las anunciadas públicamente el 3
de agosto pasado, buscarían atacar las principales causas de fondo en la
presión que sienten los precios domésticos.
Un Banco Central ‘hawkish’
El ministro oficializaría en los próximos días a un hombre de su
confianza frente a la botonera del Banco Central. Se trata de Lisandro
Cleri, que asumirá oficialmente como vicepresidente primero, participará en las
reuniones de directorio y tendrá a su cargo la mesa de operaciones del
organismo monetario.
Cleri llega con la parte del plan de Massa que no fue anunciada en
público: un ajuste monetario contractivo, que pondrá límites a la
voracidad de las transferencias del Tesoro nacional y que intentará quitar
combustible a la demanda de dólares en el mercado.
Según personas con conocimiento directo de los planes, el primer
objetivo es eliminar el exceso de pesos de la economía, lo que implica
interrumpir las asistencias al Gobierno, una de las primeras medidas anunciadas
por el propio Massa la semana pasada. Luego, se buscaría aplicar un fuerte
incremento de tasas de interés y aumentar la venta de letras de deuda.
Todo esto busca allanar el camino hacia un segundo objetivo, también ineludible
y poco amigable para la opinión pública: la corrección cambiaria del peso,
esta vez, en términos reales.
Un vocero del BCRA declinó hacer comentarios. Un representante del
Ministerio de Economía no respondió inmediatamente a una solicitud de
comentario.
Medidas en estudio
La señal para interpretar que la primera etapa ya fue cumplida será
que las tasas de interés del mercado queden alineadas con la de política
monetaria, dicen quienes están al tanto de este plan y pidieron no ser citados
porque el plan no es público y aún está en discusión. Hoy las tasas de
cauciones, préstamos a corto plazo, cotizan hasta 15 puntos básicos por debajo
de la tasa de referencia. El equipo de Massa ve en esto un indicador de la
superpoblación de pesos. Frente a esto, están dispuestos a poner en
funcionamiento todos los mecanismos de absorción. Pero, además, están bajo
estudio algunas herramientas menos ortodoxas, como permitir a los fondos
comunes de inversión que participen en la demanda de pases del Banco Central o
empezar a hacer intervenciones oficiales en la tasa de caución. Son dos medidas
que fueron conversadas en el directorio pero aún no lograron consenso.
El camino a la devaluación
Resuelto todo esto, habría espacio para tomar medidas en el frente
cambiario. Massa es consciente de que el tipo de cambio está atrasado y de que,
en el contexto actual, las monedas emergentes se están depreciando, según las
personas que conocen su plan. Una estabilización del mercado monetario sería la
señal de largada para empezar a ajustar el peso a mayor ritmo que la inflación.
¿Depreciación acelerada del crawling peg o salto discreto? Se verá.
Massa buscará simultáneamente algunas vías para apuntalar las
reservas. El ministro tiene previsto reunirse con el sector agropecuario para
incentivar la venta de dólares. Además, en su presentación el 3 de agosto, el
funcionario adelantó que tiene disponible evaluará 4 ofertas de repo de
instituciones financieras.
La nueva estrategia
Los traders más avezados del mercado empezaron a tomar nota.
Lo más difícil de esta tarea para cualquier operador es distinguir entre lo que
ellos quisieran que suceda y lo que probablemente terminen siendo decisiones
tanto pragmáticas como ideológicas del gobierno.
El canje del Gobierno sobre los bonos más cortos despejó el miedo al
incumplimiento de la deuda en pesos y dejará pocos títulos indexados en la góndola
en el corto plazo. Se descarta que hubo alta adhesión del sector público, que
tenía el 55% de los títulos que participaron del canje. Habrá que
prepararse frente a un escenario de mayor duración apostando por los bonos CER
con vencimientos en 2024 y 2026, proponen los traders. La promesa de recomponer
tarifas también la dará fuerza a las acciones energéticas, algo que ya viene
tomando impulso desde el desembarco de Massa. Si el plan del nuevo ministro es
exitoso, y la inflación y la devaluación esperada se desaceleran, los
bonos en tasa fija en pesos con vencimiento más allá del 2023 volverán a
emerger como una opción atractiva. Y la deuda soberana en dólares, ley
Nueva York, será la nave insignia de los que ven luz al final del túnel para la
Argentina. |