Por Jaime Rosemberg - Alberto Fernández cerró el día más dramático de su
gestión con la confirmación de Silvina Batakis como ministra de Economía en
reemplazo del renunciante Martín Guzmán. Una tensa conversación telefónica
entre el Presidente y Cristina Kirchner terminó por desatar el nudo que tuvo al
país sin conducción económica durante más de 24 horas.
La vicepresidenta dio el aval a Batakis, que se desempeñaba como
secretaria de Provincias bajo el mando del camporista Wado de Pedro. Fue la
ideóloga de la quita de coparticipación a la ciudad de Buenos Aires que
Fernández decretó en 2020. En la anterior etapa kirchnerista había sido
ministra de Daniel Scioli en la provincia de Buenos Aires.
Sergio Massa, que pasó casi todo el día en la residencia de Olivos,
finalmente no asumirá el control del área económica, como se había especulado.
Al cierre de esta edición, fuentes de la Casa Rosada señalaban que el de
Batakis será, por el momento, el único cambio ministerial. Se descartó también
decretar un feriado cambiario para hoy. Massa promueve una reconfiguración
amplia del gabinete, como parte de un acuerdo del que participen todos los
sectores del oficialismo.
El diálogo entre el Presidente y su vice, después de semanas de máxima
tensión entre ellos, se destrabó después de una gestión que hizo Estela de
Carlotto. Según fuentes consultadas, fue un diálogo áspero que está lejos de
significar un pacto de gobernabilidad.
Pasaron largas horas de incesantes rumores y trascendidos, hasta que el
presidente Alberto Fernández llamó por teléfono a la vicepresidenta Cristina
Kirchner. De ese diálogo, que duró al menos cuarenta minutos, surgió el nombre
de Silvina Batakis, exministra de Economía bonaerense y actual secretaria de
Provincias, como nueva ministra de Economía en reemplazo de Martín Guzmán.
La novedad, conocida minutos antes de las 22, trajo algo de alivio en la
interna oficialista, que vivió el sábado un nuevo capítulo con la dimisión de
Guzmán, efectivizada por Twitter mientras la vicepresidenta criticaba la
gestión económica desde un acto en Ensenada.
Junto al titular de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, y ministros de
su gabinete, Fernández había intentado, sin éxito, durante la jornada del
domingo alcanzar un acuerdo que permitiera relanzar al Gobierno luego del
sonoro y mediático portazo.
Elegir solo un nuevo ministro de Economía, como pretendía el Presidente,
o reorganizar de manera profunda el gabinete para relanzar la gestión, idea en
la que coincidían Sergio Massa y otros ministros, incluso varios de los que se
mantienen leales a Fernández, fue una de las disyuntivas que dividieron aguas
hasta bien entrada la noche en la quinta presidencial de Olivos.
La otra traba tuvo que ver con la falta de diálogo entre el Presidente y
la vicepresidenta Cristina Kirchner, motivo por el que varios de los candidatos
a ocupar puestos en el Poder Ejecutivo, incluido Massa, se negaron a formar
parte del nuevo esquema.
Por medio del diálogo, postergado durante semanas, ambos salieron de
algún modo ganando. El Presidente, por su parte, consiguió que Batakis fuera el
único cambio confirmado, al menos hasta hoy, mientras que la vicepresidenta
logró obturar otras opciones para el Ministerio de Economía, sobre todo las que
provenían del riñón massista.
“Alberto no quiere llamar a Cris tina, que a su vez espera que la
llamen. Es un delirio y puede terminar muy mal”, reflexionaba un miembro del
gabinete que siguió paso a paso las negociaciones en la cúpula del poder.
La clave estuvo, esta vez, en un llamado que la titular de Abuelas de
Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, hizo al Presidente, en el que le pidió que
se comunicara con la vice. “Le dije: insistí. Vos sabés todo lo que hemos hecho
nosotras para tener noticias en 46 años. Pensá en la patria y en la gente, te
votaron a vos y a Cristina”, dijo la dirigente de derechos humanos al canal
C5N.
El consenso entre el Presidente y su vice fue la elección de Batakis,
funcionaria de Eduardo de Pedro en el Ministerio del Interior y a cargo
actualmente de la negociación con la Ciudad por los fondos coparticipables.
No solo desde el Ministerio del Interior se mostraron conformes: también
cerca del ministro de Desarrollo Productivo, Daniel Scioli, saludaron su
designación, la elogiaron como una “gran profesional, muy formada, de gran
calidad humana y muy respetada por todos”. Recordaron que Batakis “iba a ser su
ministra de Economía” si Scioli hubiera sido elegido presidente en las
elecciones de 2015.
Larga jornada
Uno de los nuevos organigramas que estuvieron en debate durante la
jornada ubicaba a Massa como nuevo jefe de Gabinete, con injerencia directa en
áreas como Agricultura y Energía, motivo de una de las últimas discusiones
entre Guzmán y el Presidente, hoy manejada por La Cámpora a través del
secretario Darío Martínez y el subsecretario de Energía Eléctrica, Federico
Basualdo.
La ecuación cerraba ubicando como ministro de Economía a Emmanuel
Álvarez Agis, exviceministro de Economía de Axel Kicillof, pero este se negó a
aceptar sin un “acuerdo político” que incluyera a todas las patas del Frente de
Todos. “No va a aceptar de esta manera”, comentaron dos funcionarios que
conocen el pensamiento de Álvarez Agis y hablaron con él en las últimas horas.
Otra de las opciones que circularon durante la tarde ubicaba a Marco
Lavagna, actual titular del Indec, como ministro de Economía, a Massa como jefe
de Gabinete, a Juan Manzur mudado al Ministerio del Interior y a De Pedro en
Justicia.
La iniciativa no prosperó, no solo porque Batakis fue la propuesta de la
vicepresidenta, sino porque De Pedro se negaba a ser reubicado en otro lugar
del Gobierno.
Además del Presidente y de Massa, participaron de las reuniones
dirigentes cercanos, como el secretario general, Julio Vitobello; el canciller
Santiago Cafiero; el secretario de Asuntos Estratégicos, Gustavo Beliz; la
secretaria legal y técnica, Vilma Ibarra, y el jefe de Gabinete, Juan Manzur.
Luego de conocida la designación de Batakis, Manzur y la portavoz
Gabriela Cerruti convocaron a los medios a la sala de prensa de la quinta de
Olivos. Un sonoro cacerolazo en la puerta de esa residencia obligó a los
organizadores a cambiar de locación, y la conferencia finalmente se suspendió.
Una postal final de un día de marchas y contramarchas. |