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María Julieta Rumi - Ciudad de México.– a más de dos años de que Telefónica
comunicara que iba a revisar todas sus operaciones en Latinoamérica con la
excepción de Brasil, el ceo de Telefónica Hispanoamérica, Alfonso Gómez
Palacio, dijo anteayer que el proceso de desinversión culminó con las ventas de
sus filiales en centroamérica (costa Rica, Panamá, Nicaragua y el Salvador) y
que avanzan con modelos alternativos para expandir la conectividad en los
países en los que siguen operando. es lo que ocurrió en Chile y Colombia.
durante
la presentación del informe “La importancia de las conexiones humanas para
Hispanoamérica” en esta ciudad, también sostuvo que en México la empresa llegó
a un acuerdo para operar con infraestructura de aT&T y contó que buscan que
la iniciativa internet para Todos de Perú llegue a países como Ecuador y Colombia
para conectar zonas rurales con el apoyo de organismos multilaterales de
crédito. es decir, en el mapa se vislumbran grandes proyectos para la mayoría
de los países, con la excepción de la argentina, que es el que más aportó a la
facturación de Hispanoamérica en 2021, con 2056 millones de euros, seguido de
chile (1769 millones), Perú (1533 millones), colombia (1312 millones), México
(1010 millones) y otros y eliminaciones (683 millones). la nacion conversó con
Gómez Palacio, que hizo mención a la actualidad del sector y a la permanencia
de la empresa en el país.
–En
la Argentina los anuncios de inversión han sido más limitados que en otros
países en donde operan. ¿Por qué?
–Yo
diría que la argentina es, sin ninguna duda, uno de los países con mayor índice
de adopción digital. es impresionante. Todo lo que hacemos digital en la
argentina tiene unos indicadores altísimos. están número uno en la región y eso
nos dice que el país está preparado para avanzar más rápido en la
digitalización. No veo ningún elemento que restrinja la posibilidad de que la
argentina tenga un mayor índice de digitalización del que está teniendo ahora.
diría que va a la vanguardia en casi todas las líneas de nuestra región. desde
luego, obviamente las restricciones tienen que ver con las señales de largo
plazo y esas tienen que ver no con índices de adopción de lo digital, sino con
el cambio de reglas de juego. es algo que hemos dicho. Se lo hemos planteado al
organismo regulador. Yo personalmente tuve una reunión en Barcelona. creo que
hay una oportunidad de generar un entorno regulatorio que permita que se
proteja lo que le preocupa al Gobierno, que es el servicio universal, el
servicio básico de internet, pero que también permita que avancemos en los
entornos donde tenemos y queremos avanzar. entonces, creo que hay que proponer
algún entendimiento de este dNu [el 690/2020, que declara público el servicio]
que francamente ha generado una controversia en la industria. creo que va a ser
muy importante hacia el futuro y, lo que tiene que ver con inversiones de largo
plazo, tiene que ver con la estabilidad de las reglas de juego.
–¿Las
conversaciones con el Gobierno continúan?
–Ha
sido una conversación abierta con el regulador permanentemente. ellos conocen
nuestra posición, las razones por las cuales se lo hemos planteado. También he
conocido las razones por las cuales ellos lo plantean. Nosotros consideramos, y
es algo que se puede corroborar, que el sector de las telecomunicaciones en la
canasta de la inflación es el último. en algunos trimestres ha sido hasta
deflacionario. No solo no incrementa la inflación, sino que es de los que
ayudan a nivelar hacia abajo. el entorno competitivo ya lo controla como para
que haya este tipo de regulaciones y, si la preocupación es como nos han
expresado el servicio básico que todo ciudadano necesita, hay caminos para
hacerlo, pero no es café con leche para todos. es un poco lo que hemos
planteado, pero hay un diálogo constructivo. estuvimos con el enacom en la
ciudad de Barcelona y nos estamos reuniendo permanentemente, así que creo que
ahí hay oportunidades.
–Dice
que no es café con leche para todos. ¿Cuál sería una opción para pensar el
servicio básico universal?
–La
premisa que se ha discutido siempre es el aprovechamiento del Fondo para el
Servicio universal, que es lo que se hace en otros mercados. Pero creo que en
torno a esa preocupación en particular el sector puede hablar y no implica una
medida que generó una restricción para todos los servicios y todos los
segmentos.
–Algunos
dicen que el DNU fue una respuesta general para un problema puntual que fue la
pandemia ,¿comparte ese criterio?
–diría
que el sector en la argentina y particularmente nuestra empresa respondió en el
momento en que el país nos necesitaba. La verdad me siento muy orgulloso de
decirlo. el servicio se mantuvo, se prestó, entendimos las necesidades de
nuestros clientes, entendimos las condiciones particulares de pago de nuestros
clientes y reaccionamos nosotros directamente sin que nadie nos lo pidiera.
Tomamos las acciones frente a nuestros clientes para dar plazos, para
financiar, para hacer cosas distintas para que nadie quedara desconectado en un
momento como el de la pandemia. Lo hizo nuestra empresa, pero sabemos que el
sector también. La verdad es que yo creo que hay que atender los fenómenos como
son. Si es un fenómeno puntual, tenemos una medida puntual o, si es una
cuestión de contexto, pues entendámosla también. Pero de nuevo, cuando vemos
cuál es el impacto de las telecomunicaciones en la canasta de inflación,
digamos que no parece que se condiga con una medida de esa naturaleza. Por eso
se lo hemos expresado así al regulador respetuosamente y esperamos que esos
argumentos sean considerados. Pero en el momento en particular de la pandemia
que tú refieres lo que te puedo decir con orgullo es que la compañía reaccionó
como tenía que hacerlo y es protegiendo a sus clientes.
–Hubo
muchos rumores en distintos países de ventas que no se dieron, y
particularmente en la Argentina se mencionó una posible compra por parte del
grupo Olmos, que es afín al Gobierno. ¿Hubo tratativas con este grupo u otra
empresa y en qué estado está la posibilidad de venta en la Argentina?
–No
estamos en ningún proceso y no tengo ningún comentario sobre lo que ellos (el
grupo olmos) dijeron.
–¿Ningún
comentario y no están en venta?
–No
estamos en ningún proceso y no tengo ningún comentario sobre el grupo en
particular.
–En
cuanto a los planes de corto plazo para la Argentina, ¿serían avanzar en estas
inversiones con pequeños operadores que se montan sobre la red de Telefónica u
otro modelo?
–No.
estamos haciendo inversiones tanto en la red móvil como en la red fija. estamos
haciendo inversiones orgánicas porque además los índices de digitalización de
la argentina son importantes y esto no permite detener las inversiones,
entonces lo seguimos haciendo. Hemos encontrado modelos de compartición de
infraestructura con algunos operadores en algunas regiones, pero seguimos
viendo que hay una oportunidad de crecer y acelerar más rápido. La argentina
fue uno de los primeros países que empezaron a desplegar fibra al hogar con
muchísimo éxito y fue referente de los demás países de Hispanoamérica. Sabemos
que hay un apetito enorme por fibra óptica y banda ancha de altísima calidad,
entonces vemos una oportunidad grande para avanzar. |