Por Mirta Fernández - El Tesoro enfrentará
este miércoles 27 de abril el último examen de deuda del mes en el
mercado local en medio de un clima financiero adverso por la disparada del dólar blue y la suba de las divisas financieras
paralelas (MEP y Contado con Liquidación).
La cartera económica busca
cosechar en la subasta fondos por $382.600 millones para cubrir
vencimientos por unos $395.700 millones.
Al igual que en la anterior
licitación realizada el 12 de abril la Secretaría de Finanzas optó
por no ofrecer títulos de muy corto plazo ajustados por CER que son los
predilectos por los inversores en un contexto de aceleración inflacionaria, donde
las consultoras privadas ya estiman que el costo de vida en abril podría rozar
el 6%.
Esta táctica apunta a
reducir el nivel de la deuda atada a la inflación y estirar los plazos de
colocación en línea con dos de los objetivos plasmados en el acuerdo con el FMI.
Y
es que el stock de deuda en pesos ajustado por inflación a fin de marzo llegó al
equivalente a u$s71.157 millones frente a los u$s23.791 que
sumaba cuando Alberto Fernández llegó al gobierno. Es un aumento de u$s47.366
millones, un monto levemente superior a la deuda recientemente refinanciada con
el FMI por u$s45.000 millones.
Pero
el mercado se sorprendió por esta estrategia ya que una jugada arriesgada en
medio de la escalada de los dólares alternativos,
dado que los analistas advierten que un mal resultado en esta licitación
podría darle más combustible al CCL.
¿Cúal es el menú que se ofrece a inversores?
En
esta operación se ofrece un menú integrado por:
Una
Letra de Liquidez del Tesoro a descuento (LELITE) que vence el 23 de mayo
de este año, que puede ser suscripta sólo por Fondos Comunes de Inversión (FCI)
Tres
Letras del Tesoro a descuento a tasa fija (LEDEs) con vencimientos el 29 de
julio (S29L2), el 31 de agosto (S31G2), y el 30 de septiembre (S30S2) próximos
Una
Letra del Tesoro en pesos a tasa variable más 14% (LEPASE) que expira el 16 de
agosto de 2022 (SG162).
Un bono del Tesoro
Nacional vinculado al dólar estadounidense (dólar linked) con vencimiento el 30
de abril de 2024 (TV24D).
Un
bono del Tesoro en pesos ajustado por CER (BONCER) que caduca el 9 de noviembre
de 2016 (TX26)
Una canasta compuesta por 60%
por una Letra del Tesoro en pesos ajustada por CER (LECER) que vence el 19 de mayo de
2023, y 40% por el BONCER que expira el 26 de julio de 2024 (T2X4).
La
recepción de las ofertas comenzará a las 10.00 horas de este miércoles y
finalizará a las 15.00 horas.
¿Qué lectura hace el mercado?
Pedro
Siaba Serrate, líder de estrategia de PPI, comentó a iProfesional que
"cabía esperar que ante la reciente acelerada de los tipos de cambio
financieros, y dada la necesidad de mantener el acceso aceitado al mercado
local, el Tesoro ofreciera un menú más atractivo".
"Aún con la aparición de
una nueva LECER a mayo 2023 las condiciones dejan gusto a poco", evaluó. Según
su visión, "están tratando de hacer
buena letra respecto a las dudas que despierta la indexación de la deuda, pero no podrán mantener
su ausencia por mucho tiempo". En
la misma sintonía, Lucas Yatche, jefe estratega de Liebre Capital planteó
que "en la última licitación la ausencia de las Lecer se hizo sentir y no
se logró cubrir la totalidad de los vencimientos, en esta ocasión se decidió
quedar a mitad de camino, hay LECER a mayo de 2023 pero únicamente para quienes
deseen cruzar el plazo del 2024 con una canasta compuesta también por el
T2X4". "Es
una prueba desafiante por el volumen de vencimientos y la ausencia de títulos
indexados con vencimientos a las elecciones presidenciales", advirtió. Sobre
el menú ofrecido, Yatche dijo que "están
buscando descomprimir los vencimientos de corto plazo de la deuda en pesos que
es bastante pesado, estirando duración, y reducir el endeudamiento linkeado a la inflación
que no es licuable". Juan
Delich, economista de Eco Go coincidió en que "el Tesoro entiende que la bola de CER de corto le
puede quitar espacio en el futuro y necesita estirar los plazos". A su vez, los analistas
de Facimex Valores remarcaron que "el Tesoro afrontará el
mayor vencimiento desde mayo de 2021
(ajustando por inflación) sin ofrecer opciones CER o dolar-linked con
vencimiento antes de las elecciones presidenciales, por lo que esta
licitación será un termómetro interesante para ver el posicionamiento
inversor". Por
su parte, Javier Casabal, analista de Adcap Grupo Financiero destacó que
"la vez pasada no habían ofrecido Lecer cortas y obligaron al mercado a
colocarse en títulos venciendo más alla de agosto 2023 a quienes buscaran
cobertura de inflación, logrando levantar el 63% de la emisión, donde la
canasta solo tenia 30% del activo más corto". "Esta
vez como el vencimiento a refinanciar es bastante más grande, el Tesoro repite
la estrategia pero duplicando el peso del título más corto", enfatizó. ¿Qué
instrumentos de deuda del menú son más atractivos? Siaba
Serrate evaluó que "el menú de instrumentos no es muy
interesante". "Teniendo
en cuenta el precio del mercado secundario del BONCER24 y poniendo a la nueva
LECER en curva (-3.25%), la canasta
otorga un premio ínfimo ( 0.2%) respecto al mercado. En nuestra opinión,
poco atractiva", analizó. Asimismo, el experto
consideró que "la reapertura del TV24 luce más auspiciosa para los
que busquen rollear cobertura al dólar. Si el título sale a la tasa máxima ofrecida
(devaluación 1%) que presenta un upside de 1.5% frente al mercado
secundario", indicó. En Facimex
Valores señalaron que "no
vemos gran atractivo en las distintas opciones de la licitación". "El
posicionamiento en Ledes tiene poco sentido ante un mercado que no viene
convalidando un premio por exponerse al riesgo inflacionario. El TX26 tiene una
duration demasiado larga mientras el TV24
tiene una elevada tasa máxima, pero de corto plazo estaría golpeado por
una tasa de devaluación que seguiría navegando por debajo de la
inflación",
fundamentaron. Con
respecto a la canasta CER, en Facimex estimaron que "tiene un premio muy
bajo de apenas 0,4% con respecto al mercado secundario". Por
su parte, un informe del grupo SBS sostuvo que "la canasta CER luce como la mejor opción dada la
duración de la LECER de mayo, que es el instrumento CER más corto ofrecido y capturaría buena parte
de la inflación por reacomodamiento de precios relativos que se espera durante
los próximos meses". ¿Qué expectativas tiene el mercado? Será
también el primer test del Tesoro tras la reciente suba de la tasa de
política monetaria (Leliq) que adoptó el Banco Central el 13 de abril por lo
cual los analistas esperan que el Tesoro también convalide un aumento de
rendimientos en los títulos ofrecidos. Para
Yatche, "sin referencias de tasas máximas y tras las recientes subas del
BCRA, estaremos muy atentos a los rendimientos de corte de las LEDES". En ese sentido, Delich subrayó
que el Tesoro "está ofertando $145.000 millones en LEDES, por lo que
es es posible que convalide una tasa que le permita capturar esos
fondos". A su vez, el analista Gustavo
Ber estimó que "la licitación podría enfrentar un menor apetito
en las actuales condiciones financieras, con epicentro en la aversión al riesgo global y
los condimentos económicos y políticos locales que ha despertado al dólar
recientemente, acompañando las depreciaciones de las monedas de la
región". ¿Cómo puede impactar el resultado de la licitación
sobre el CCL? Las
licitaciones de deuda en pesos son cruciales para poder cumplir con la meta
acordada con el FMI de reducción de asistencia monetaria a 1% del PBI este año. Siaba
Serrate recordó que en la última licitación se logró un resultado modesto ya que
"ante la ausencia de opciones cortas CER, el roll over fue de tan solo
81%, muy por debajo de los meses anteriores". Ante
el reciente salto que pegaron el dólar blue y el CCL, el
resultado de esta licitación cobra mayor relevancia. Siaba Serrate alertó que el
riesgo es que "si el rolleo no es muy bueno, los pesos que queden en el
mercado alimenten un poco más la suba reciente del CCL". "Creemos
que por fundamentos el CCL tiene más recorrido, por lo cual un roll over bajo
sería una mala señal", previno. Con la misma mirada, Yatche auguró
que "no lograr financiamiento neto positivo, al igual que en la
última licitación, podría seguir presionando el CCL". "El
financiamiento neto que se logre al cierre de este mes podría generar o más
calma o más presión en los tipos de cambio financiero", aseguró. Ber concordó en
que "un resultado poco favorable acentuaría la cautela de los
operadores, dado que complicaría el desafiante cronograma de roll-over y las
necesidades de financiamiento, en busca de evitar una mayor emisión monetaria en el actual contexto inflacionario, por lo
cual la respuesta a corto plazo podría ser una ampliación de la brecha
cambiaria". Para Casabal, "buena parte de la corrección del CCL que veíamos
venir ya ocurrió en este último salto de $187 hasta más de $212" por
lo que cree que "de ahora en más el mercado estará expectante a si mejora
la acumulación de reservas, el manejo del déficit fiscal"
"Si el mercado lee que las metas con el FMI no se
cumplen con reducción del gasto sino con artilugios contables y que los dólares
de las exportaciones del agro se esfuman por la vía de importaciones de energía
que se sigue regalando, dejará de financiar al Tesoro y es muy probable que la
presión sobre el CCL siga aumentando. Si, por el contrario, el Tesoro y BCRA
pueden aportar claridad sobre estos números y su evolución, debería haber
suficiente financiamiento disponible", concluyó. |